Aerte pide eliminar la reserva del 10% de plazas y ampliar las visitas en la era posvacunación

VALÈNCIA. (EP) La patronal Aerte pide que en la nueva etapa posvacunación en las residencias se libere el 10% de las plazas que había que reservar para aislamientos covid para poder atender el incremento de demanda asistencial, terminar con el confinamiento generalizado en las habitaciones, así como ir facilitando las visitas y el contacto físico entre personas vacunadas.

Estas son algunas de las reivindicaciones que la Asociación Empresarial de Residencias y Servicios a Personas Dependientes de la Comunitat Valenciana (Aerte) ha planteado a la Conselleria de Igualdad en la reunión que han mantenido para analizar cómo se incorpora la vacunación a los protocolos que regulan la vida en estos centros.

El objetivo del departamento que dirige Mónica Oltra es que el nuevo texto esté listo a finales de mes, según han confirmado fuentes de la conselleria a Europa Press. La última actualización del plan de actuación en residencias se publicó el pasado 7 de enero.

Al respecto, el presidente de Aerte, José María Toro, ha destacado que la reunión con Igualdad fue "bastante bien" ya que coincidieron en que tras la vacunación de toda la red, y una vez se compruebe los efectos, es le momento de "ir aflojando las restricciones para mejorar la calidad de vida".

Aerte solicitó asimismo la pasada semana una entrevista con Sanidad para avanzar en el protocolo pero aún no han recibido respuesta y al respecto ha señalado que hay "bastante presión" de las familias que "quieren saber qué cambios va a haber una vez que los residentes ya están inmunizados".

En ese sentido, ha destacado a Europa Press que desde la parte social "todos tenemos la misma visión de que hay que ir dando pasos hacia delante", pero falta conocer desde la Conselleria de Sanidad los requisitos".

Por su parte, la patronal pide que se libere el 10% de plazas que se deben reservar para posibles aislamiento de brotes y poder atender así el incremento asistencial. En ese sentido, ha explicado que aunque la pandemia "ha frenado la demanda inicial, la dependencia, como el Alzheimer o el Parkinson, no han parado" y una vez que la población ha visto que los centros son "seguros y ya están vacunados necesitan acceder a una plaza".

Del mismo modo, ha constatado que el confinamiento en habitaciones va "en detrimento" de la atención de la personas, por lo que una vez todos los residentes y plantilla están inmunizados "hay que plantear otros sistemas" al igual que cuando se registran casos de gripe, una vacuna con una eficacia "inferior" a la covid, "no se aisla a todo el mundo en sus habitaciones".

Ampliar las visitas

El presidente de la patronal ha abogado también por permitir las visitas a familiares salvo que exista un brotes descontrolados, así como favorecer el contacto físico entre los allegados si están ya vacunados. "Hay que ser muy prudentes en evitar los contagios pero una vez vacunados hay que ir dando pasos hacia delante buscando un equilibrio entre lo social y sanitario", ha defendido.

Por último, ha abogado por realizar pruebas serológicas periódicas en sustitución de las PCR para determinar el grado de inmunidad de un centro y cómo evolucionan los anticuerpos. En ese sentido, ha destacado el interés que también tendrían los resultados de estas pruebas para que los epidemiológicos puedan determinar la protección de las vacunas, dado que las residencias han sido las primeras en concluir la inoculación, por si fuera necesario repetirla al igual que sucede cada año con la gripe.

Por último, ha insistido en la urgencia de vacunar a los profesionales que prestan ayuda a domicilio ya que al atender a varios dependientes pueden convertirse en "un factor de riesgo".