MADRID (EP). El plazo de aceptación de la oferta pública de adquisición de acciones (OPA) que Carlos Slim lanzó a finales del pasado mes de enero sobre la inmobiliaria Realia concluye mañana jueves.
El empresario mexicano, que ya controla la compañía al ostentar un 30,30% de su capital, lanzó su oferta precisamente tras superar la cota del 30% que obliga a 'opar' por el 100% de una compañía.
Slim pagará 0,80 euros por cada título de Realia que acepte su OPA, precio que si bien arrojaba una prima del 17% sobre la cotización de la inmobiliaria cuando se planteó la operación, en la actualidad ya ha sido superado por el mercado, donde cotiza a alrededor de 1 euro.
La operación constituye un paso más en la estrategia del empresario para Realia, que pasa por sanearla y reestructurarla con el objetivo de que su patrimonio inmobiliario genere rentas suficientes para afrontar la deuda. El fin último es que la compañía siga cotizando en Bolsa, sea rentable y vuelva a repartir dividendos.
Asimismo, el magnate pretende facilitar una ventana de liquidez a los socios minoritarios que quieran dejar la empresa, que ha registrado un descenso de su valor desde su salida a Bolsa en 2007 y hace años que no abona dividendos.
La OPA de Slim, que supone valorar Realia en 368 millones de euros, se dirige de forma efectiva a alrededor del 33% del capital social de Realia, dado que al 30,3% con que cuenta directamente Slim se suma la participación del 36,8% que tiene en la inmobiliaria FCC, grupo constructor a su vez controlado por Slim y que, por lo tanto, tampoco acudirá a la oferta.
Así, la oferta supondrá un importe máximo de unos 121 millones de euros en caso de que logre una aceptación del 100%, si bien el mercado no prevé una adhesión muy alta dada la actual cotización de la inmobiliaria.
Carlos Slim financiará la OPA con recursos propios, si bien cuenta con un aval de CaixaBank por valor de 256,89 millones para garantizar la financiación de la operación.
Realia es una de las primeras firmas patrimonialistas del país, dado que cuenta con una cartera de 419.000 metros cuadrados de superficie en alquiler, valorado en unos 1.400 millones de euros, en el que sobresale una de las Torres Kio de Madrid.
La OPA de Realia concluye mientras el empresario mexicano está a la espera de que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) autorice la OPA que también tiene formulada sobre el 100% de FCC.
En este caso, Slim tuvo también que lanzar una oferta sobre todo el grupo constructor al superar la cota del 30% de su accionariado tras garantizar una ampliación de capital realizada por el grupo para reducir su deuda.
Ambas operaciones constituyen una muestra del compromiso que el empresario viene manifestando por FCC y Realia desde que a finales de 2014 desembarcó en la constructora también participada por Esther Koplowitz. Además de inyectar fondos a través de distintas ampliaciones de capital, el magnate avala la deuda de la inmobiliaria y la de la segunda accionista de FCC.
