MADRID (EP). Banco Popular prevé que más de 1.800 empleados de los aproximadamente 2.900 trabajadores afectados por el proceso de reestructuración de la entidad se puedan acoger a fórmulas de prejubilación, con lo que el 62% del ajuste de plantilla se realizará por esta vía.
En un comunicado tras la reunión mantenida con los sindicatos, el banco ha limitado el "impacto real" del ajuste a menos de 1.100 personas, menos del 9% del total de la plantilla de Popular y Pastor.
La entidad presidida por Ángel Ron ha planteado además a los sindicatos canalizar el grueso de las salidas a través de vías de "carácter voluntario". El banco ha reafirmado "una vez más" su pretensión de implementar el proceso de forma acordada con los sindicatos.
La semana pasada, el Popular anunciaba que el proceso de reestructuración dentro de su plan de optimización de los recursos afectaría a entre 2.900 y 3.000 empleados, lo que supone hasta el 20% de la plantilla. Además, la entidad prevé reducir su red de oficinas en un 14%.
El Popular contaba con una plantilla de 14.935 trabajadores, de lo que cerca de 1.700 son empleados con 59 años o más, y con 2.093 oficinas a junio de este año.
El banco concretaba que la disminución de la plantilla afectaría sobre todo a las sucursales con menor rentabilidad por empleado y además limitaría los días de apertura en localidades de menor tamaño. El Popular también pretende potenciar la operativa multicanal y la transformación digital.