En 2019, la barrera recogió 1,9 toneladas de residuos procedentes de los colectores pluviales de la ciudad.
VALÈNCIA (VP). La Autoridad Portuaria de València ya tiene preparada la barrera anticontaminación de última generación instalada al final del antiguo cauce del Túria para recoger los residuos flotantes procedentes del tramo comprendido entre el Oceanogràfic y el puente de Astilleros en el que confluyen varios colectores pluviales de la ciudad.
Esta infraestructura impide que los residuos flotantes procedentes de los vertidos lleguen al Puerto o a las playas adyacentes al recinto portuario, como Pinedo o El Saler. La APV realiza un seguimiento y vigilancia diaria de estas aguas para proceder a la recogida periódica de los mismos. Los desechos son almacenados en contenedores específicos para ser tratados a través de una empresa autorizada en la gestión de residuos. El año pasado, el puerto de València retiró gracias a este equipamiento 1,9 millones de toneladas de impurezas procedentes de los colectores pluviales.
La barrera anticontaminación se enmarca en el plan de seguimiento de contaminación de las aguas que desarrolla el departamento de Medio Ambiente de la APV. Entre los objetivos de este plan destaca efectuar un correcto seguimiento y vigilancia de las aguas, con especial sensibilidad hacia los núcleos de población más próximos.
La Autoridad Portuaria de València mantiene un control y análisis periódicos de la calidad de las aguas portuarias o de la calidad del aire en las estaciones de control de la APV con el objetivo de consolidarse a la vanguardia en sostenibilidad medioambiental. En esta línea, se trabaja en proyectos como Green C Ports, liderado por la Fundación Valenciaport, que va a instalar una red de sensores ambientales y meteorológicos, el desarrollo piloto de una plataforma de rendimiento ambiental portuario y la modelización de algoritmos de inteligencia artificial para informar a los usuarios y clientes de los puertos y a los ciudadanos sobre los principales parámetros ambientales derivados de las actividades portuarias. Además, se ensayarán soluciones innovadoras para reducir la congestión del tráfico, mejorar la calidad del aire, reducir los niveles de ruido, prever la productividad de las grúas y medir las emisiones en tiempo real en los puertos de Venecia, El Pireo, Bremerhaven, Wilhemshaven y València.