VALÈNCIA. BBVA ha lanzado un préstamo que ayuda a agricultores y ganaderos a convertir sus explotaciones convencionales en ecológicas. Se trata del primer préstamo del mercado adaptado a las necesidades de los productores durante el periodo de conversión, en el que tienen necesidades especiales de tesorería. Una solución vinculada al compromiso adquirido por BBVA de impulsar una recuperación económica verde que fomente la inversión sostenible y que facilite, además, la reinvención del sector primario tras la crisis sanitaria.
BBVA se ha convertido en la primera entidad en España que facilita la conversión de una explotación agrícola o ganadera convencional en ecológica. La irrupción de la crisis económica por el COVID-19 ha puesto de manifiesto la importancia de consumir productos de proximidad para contribuir con la recuperación económica. Un hecho al que se le une el incremento de la demanda de productos ecológicos en nuestro país debido, principalmente, a los cambios en los hábitos de consumo y la concienciación social con respecto al cambio climático.
Por este motivo, y con el objetivo de ayudar a aquellos productores que quieran convertir sus explotaciones en ecológicas y crear nuevas líneas de negocio, BBVA ha lanzado una línea de financiación que les permitirá, durante el periodo de conversión, hacer frente a los posibles desajustes entre ingresos y gastos que se generan a la hora de cumplir la normativa de la Unión Europea para comercializar productos ecológicos.
El ‘agropréstamo conversión ecológica’ de BBVA dispone de condiciones específicas adaptadas para cada explotación. Para acceder a este tipo de financiación, los agricultores o ganaderos deberán demostrar que se encuentran en un proceso de conversión ecológica presentando la inscripciòn de su explotación en el registro de productores ecológicos. “Los productores españoles todavía se muestran reticentes ante la conversión de sus explotaciones en ecológicas por el mayor coste de producción que supone en sus primeras fases y que no tiene reflejo en el precio. BBVA quiere estar ahí, apoyando a sus clientes en esa transición hacia un modelo de negocio más sostenible y que será la base de la recuperación económica”, ha señalado Alberto Cano, director de Pymes de BBVA en España.
En el sector agropecuario tiene una especial importancia la gestión del impacto ambiental. Adaptar el sistema de producción alimentaria a nivel global es clave para hacer frente al cambio climático, preservar la biodiversidad y garantizar al mismo tiempo la seguridad alimentaria y un desarrollo inclusivo. El crecimiento de la demanda de productos ecológicos en el mundo ha tenido su reflejo en España. Hoy es el primer productor de alimentos ecológicos de la Unión Europea y cuarto en el mundo. Esta creciente demanda, impulsada por las generaciones más jóvenes, tiene que estar acompañada por el crecimiento de la producción ecológica.
Según los últimos datos del Ministerio de Agricultura, la Comunitat Valenciana es una de las regiones de España con mayor superficie de terreno destinada a la producción ecológica. La Comunitat cuenta con más de 114.000 de hectáreas de agricultura sostenible, lo que supone el 5,10%, y casi 2.300 productores ecológicos. Ahora, ante la nueva situación económica y el cambio de hábitos en el consumo de productos de proximidad, la producción ecológica adquiere una mayor relevancia de cara a contribuir con la recuperación económica. Esto abre una gran oportunidad para los agricultores y ganaderos en España.
La sostenibilidad, uno de los pilares estratégicos de BBVA, ha adquirido un mayor protagonismo con la irrupción del COVID-19 al convertirse en una de las claves para la recuperación económica tras la crisis sanitaria. En línea con el compromiso que BBVA ha adquirido en este ámbito, el banco se ha adherido a la alianza europea verde donde las administraciones, las empresas, los agentes sociales y las ONG apuestan por una salida sostenible a la crisis por el COVID-19. En España, y junto a más de 240 firmantes, BBVA también se ha sumado al manifiesto impulsado por el Grupo Español para el Crecimiento Verde (GECV), donde se compromete a trabajar de manera conjunta para impulsar una recuperación económica verde a través de un paquete de estímulos económicos basado en criterios de sostenibilidad.
Hace dos años, BBVA ya anunció su compromiso para movilizar 100.000 millones de euros en financiación sostenible entre 2018 y 2025. Hasta enero de 2020, BBVA ha movilizado 30.000 millones de euros, un tercio de todo lo comprometido. La aspiración de la entidad es que todos los productos que ofrecen a los clientes, tanto grandes empresas, como instituciones, pymes o particulares, tengan una solución sostenible. Un objetivo que espera alcanzar en 2020 para los principales productos en España.