VALÈNCIA (EP). Bioparc Valencia prevé crear junto a sus instalaciones el "mejor parque acuático de la península", con atracciones "icónicas", y para ello presentará al Ayuntamiento un nuevo diseño del proyecto en abril, para que se pueda aprobar después de verano y esté listo para abrir al público en 2021.
Así lo ha avanzado este jueves el director general del parque, Luis Ángel Juez, que ha presentado las novedades e intervenciones de Bioparc en 2019, entre las que ha destacado la rehabilitación de alquería del Rey y la Casa Figuerols, la instalación de una caldera de biomasa y que los restaurantes del complejo han eliminado por completo el uso de utensilios de plástico. También han participado el arqueólogo Víctor Algarra y el gerente de restauración, Eduard González.
El director general de Bioparc ha indicado que ya ha recibido "ofertas de empresas holandesas y americanas de atracciones y diseños", por lo que ha apuntado que, en principio "va a ser un referente, estamos yendo al mercado internacional", ha remarcado.
Luis Ángel Juez ha señalado que el proyecto para el futuro parque fluvial de aventura ya estaba "preparado", pero que el "nivel de exigencia" del Bioparc --gestionado por la empresa Rain Forest-- hizo que sus responsables se volvieran a "preguntar si era lo que querían hacer". Así, durante cuatro meses han estado "rediseñando completamente" el proyecto, que está "muy avanzado" y se presentará al Ayuntamiento de València entre marzo y abril. "
Ha detallado que en principio el "concepto" que presentaron, asesorados por otras mercantiles, daba "mucha importancia a la actividad del 'canyoning' y al 'río lento', de forma que los "juegos acuáticos quedaban relegados". Esto suponía "dos problemas", por la capacidad de afluencia "y, por tanto, de rentabilidad" y que además estas dos atracciones son "habituales" en el resto de parques. "Vimos la posibilidad de dar un paso adelante y pensar en atracciones icónicas", ha agregado.
Con todo, la "idea de inauguración sigue manteniéndose para 2021" y ha concretado que el "principal problema" es que las atracciones tardan entre 12 y 18 meses en fabricarse. Además, ha avanzado que aunque la intención inicial era que este parque abriese todo el año, ahora se baraja la posibilidad de que funcione entre ocho o nueve meses al año, en la línea de lograr "máxima capacidad en menor tiempo".
Este parque acuático linda con el conjunto de la Alquería del Rey y la Casa Figuerols. Luis Ángel Juez ha destacado que el parque acomete en estas instalaciones un proyecto de rehabilitación "muy ilusionante". La concesión del Bioparc obliga a la rehabilitación de estas construcciones e indica que deben destinarse para un recinto de recepción de visitantes, un uso que Rain Forest "nunca ha considerado". No obstante, el parque acomete en estas instalaciones un proyecto de rehabilitación "muy ilusionante", para el que llevan estudiando las edificaciones desde hace dos años.
El arqueólogo Víctor Algarra ha explicado que estas alquerías, de entre los siglos XV y XVI, pertenecían a la partida del Pouet de Campanar, que se "desmembró" hace dos décadas y, con ello, "desaparecieron las alquerías que existían" progresivamente y, con ellas, su "indudable valor arquitectónico", por los "avatares del Plan General de Ordenación Urbana" y en la década de los 90 y años 2000. Estas construcciones son de las escasas alquerías que quedan de esta partida.
Ahora, el objetivo es "reconstruir esos espacios vividos" y "la forma de vida de la huerta desde el siglo XV hasta la actualidad". Incluyen además zonas donde se criaba tradicionalmente el gusano de seda, por lo que el Bioparc tiene intención de "incluirla en la Ruta de la Seda".
En el caso de la Casa de Figuerols, Algarra ha explicado que a pesar de no tener "protección directa" bajo ninguna normativa, ha sido "todo un hallazgo" el comprobar que conserva en su planta baja el adobe "perfectamente colocado", lo que le aporta un "valor clave" pues es de las "únicas" construcciones con este material que se conservan.
Este conjunto de alquerías serán "totalmente independientes" del parque y van a tener "vida propia". La del Rey albergará la sede de la Fundación Bioparc, que tendrá entrada independiente por la calle Pío de Baroja, exposiciones itinerantes, aulas para talleres y un espacio dedicado a la cría y producción de seda. La Casa Figuerols funcionará como un museo que "recree la forma de vivir" en la huerta valenciana.
Por otro lado, este 2019 Bioparc conseguirá la eliminación del plástico de un solo uso en el 100% del menaje y utensilios de los restaurantes y su sustitución por enseres de fibras vegetales. Así, se convierte en el "primer" parque en tomar esta iniciativa y se adelanta a la directiva europea de 2021, según ha explicado Eduard
González.
Asimismo, se instalará una caldera de biomasa para abastecer, con la poda de la vegetación del parque, la energía para calefactar las instalaciones de los hipopótamos, cocodrilos, el acuario lago de Tanganica y el cobijo de gorilas de forma autosuficiente, sin
necesidad de utilizar gas natural.
Rain Forest ha "iniciado conversaciones" con el Ayuntamiento de València para, además, recoger la poda de determinadas partes de la ciudad y alimentar así esta caldera, que "será la más grande de la ciudad y una de las más grandes de la Comunitat".
El director general del Bioparc también ha recalcado datos del ejercicio 2018 y de la trayectoria del parque, que cumple once años. Ha destacado que ha "dejado huella" en más de 5,5 millones de personas desde su apertura y ha creado un "nuevo" concepto de "ocio con
causa".
En esta línea, ha resaltado que el año pasado cerca de 618.000 personas visitaron la ciudad, el 77 por ciento turistas internacionales. Junto a ellos, han acudido a las instalaciones alrededro de 36.000 escolares. Ha recordado la participación del parque en proyectos de conservación, tanto in situ a través de la
Fundación Bioparc como ex situ.
Finalmente, desde Bioparc se han referido al parto de los mellizos de chimpancé que el parque acogió este pasado 14 de febrero, un "hito mundial" porque solo hay 14 casos de parto de mellizos de esta especie documentados en el mundo desde 1976. Tras este parto "realmente extraordinario", la madre, de 29 años, se encuentra bien y "maneja a las crías como si las tuviera toda la vida", han destacado.