VALÈNCIA. El patrimonio artístico que custodia Bombas Gens, el centro expositivo impulsado por la fundación privada Per Amor a l’Art, se ‘blinda’ de la mano de la Generalitat Valenciana. La anteriormente conocida como Colección Per Amor a l’Art, ahora Colección José Luis Soler, se ha inscrito en el Inventario general del patrimonio cultural valenciano como colección de bienes muebles de relevancia patrimonial, en este caso en dos bloques: por un lado la Colección de Arte Abstracto, que se compone de 295 obras, y por otro la Colección de Fotografía, que suma 2.176 piezas, siendo este último el gran núcleo del proyecto cultural impulsado por la fundación. Esta inclusión es significativa de cara a su futuro pues, entre otras cosas, prohíbe que las colecciones se puedan disgregar y vincula cualquier movimiento sobre las mismas a la Conselleria de Cultura.
"Las colecciones de bienes muebles declaradas de interés cultural no podrán ser disgregadas por sus propietarios o poseedores sin autorización previa de la Conselleria", reza la normativa, que también apunta que es a la administración pública a la que le compete a partir de ahora "autorizar" cualquier cambio en su uso o tratamiento. En este sentido, tal y como explican desde la propia fundación Per Amor a l'Art a este diario, la administración pasa a "ejercer un derecho de vigilancia y control", siendo "respetuosa con el derecho de propiedad". De esta forma, la inclusión en el Inventario 'blinda' la colección y pone muy difícil que se pudiera marchar del territorio valenciano así como que se pudiera desgajar, perdiendo así su sentido global.
La colección, pues, se protege como un todo, un todo que comenzó a tomar forma en el año 2010, bajo la asesoría de Vicente Todolí, una colección de fotografía y arte contemporáneo que destaca por su importante conjunto de obra de autores japoneses como Shomei Tomatsu o Daido Moriyama, así como de autores clásicos de la fotografía americana y europea como Garry Winogrand o Walker Evans. Siete años después de que se dieran los primeros pasos en su conformación fue cuando abrió sus puertas Bombas Gens, el centro cultural de la fundación destinado a exhibir los fondos de la fundación.
Este movimiento, que también vehicula el acceso de la fundación a posibles ayudas, se lleva a cabo antes de que la nueva corporación aclare si aceptará o no la donación de “parte de la colección” privada. Fue el pasado mes de febrero cuando Per Amor a l'Art puso sobre la mesa la donación de una parte de la colección a la Generalitat con el objetivo de "enriquecer el patrimonio cultural de los valencianos", unos fondos que, tal y como especificaron unos y otros entonces, pasarían a ser gestionados por el IVAM. Las negociaciones avanzaron, sí, aunque sin llegar a concretarse antes del cambio de caras en el gobierno, cuya área de Cultura ha pasado de ser gestionada por Compromís a Vox, lo que en cierta medida obliga a volver a iniciar el proceso. En este sentido, desde el gobierno autonómico apuntan que todavía no se ha realizado ningún contacto al respecto.
Fue el pasado mes de junio, con el anterior equipo de gobierno en funciones, cuando comenzó el proceso de protección de las colecciones, que se componen de 2.5000 piezas, con la petición de reconocimiento como colección museográfica permanente, un proceso que finalmente ha derivado en la inclusión de las mismas este mes de noviembre en el Inventario General del Patrimonio Valenciano. Dividida en dos bloques, la colección de fotografía suma varias piezas del fotógrafo y cineasta mexicano Manuel Álvarez Bravo, del que se incluyen piezas como El ensueño o Parábola óptica; la serie Rodeo Drive de Anthony Hernandez o la serie Flower Rondeau de Nobuyoshi Araki. Yto barrada, Hans-Peter Feldmann, David Goldblatt o Patricia Gómez y Mª Jesús González son otras las firmas que suma la colección de fotografía que custodia la fundación privada. Por lo que respecta a la colección de arte abstracto, suma pinturas de Anna-Eva Bergman, Juan Uslé o Jorge Queiroz así como distintas piezas escultóricas firmadas por Pedro Cabrita Reis, Ángela de la Cruz o la valenciana Inma Femenía. Este grupo de obras se completa con los trabajos con tejido de Teresa Lanceta, que recientemente recibió el Premio Nacional de Artes Plásticas, o la serie de dibujos Divina Comedia. Infierno, de Nicolás Ortigosa.
Con la cuestión de la donación todavía por aterrizar, no es esta la única incógnita por responder sobre el futuro del centro. Fue hace apenas unos días cuando el museo abrió las puertas a la exposición Timm Rautert y las vidas de la fotografía, un proyecto del que es cocomisaria Sandra Guimaraes. La portuguesa accedió a la dirección artística de Bombas Gens en septiembre de 2020, tras la marcha de Nuria Enguita, que pasó a dirigir el Institut Valencià d’Art Modern (IVAM). La aventura, sin embargo, ha durado poco. Poco después de su aterrizaje en la institución privada, Guimaraes llamó a otras puertas, una de ellas las del nuevo Museo Helga de Alvear de Cáceres, que el pasado mes de mayo la eligió como directora. Con todo, la presentación de la mencionada exposición la hacía “como cocomisaria” y no como directora artística de Bombas Gens, tal y como remarcó durante el turno de preguntas, una plaza que todavía no ocupa nadie. “Estoy cerrando un ciclo”, añadió.
La segunda cuestión que dejó coleando la presentación fue sobre el futuro de la propia programación, pues al vacío en la dirección artística se suma la indefinición en el calendario de muestras. Viene siendo habitual que, desde su apertura, el centro presente varias exposiciones cada curso, un ritmo que, especialmente desde el confinamiento, ha ido disminuyendo. En este sentido, la exposición de Timm Rautert comparte espacio con la muestra Earth: a retrospective, que abrió sus puertas en verano de 2022 y que debía haber sido clausurada el pasado mes de junio. Pese al anuncio inicial, será un año más tarde, en junio de 2024, cuando cierre sus puertas, tras una prórroga que mantendrá durante dos cursos la propuesta expositiva. ¿Qué vendrá después? De momento, no ha sido anunciada ni a prensa ni a través de sus canales oficiales ninguna nueva programación de cara al próximo año.