VALENCIA. Llegó la hora de la verdad. Los británicos votan este jueves entre continuar en la Unión Europea o seguir su camino en solitario tras una intensa campaña entre partidarios y detractores del Brexit. Las consecuencias de la salida han sido analizadas con profusión en los últimos días, en especial las implicaciones para las empresas españolas con intereses en el Reino Unido, así como el impacto sobre las exportaciones, el turismo o la actividad inmobiliaria.
En el caso concreto de la Comunitat, cuyas exportaciones a Reino Unido rozaron los 3.000 millones de euros el pasado año, la opinión es casi unánime a favor del remain, pero no existe total coincidencia sobre las consecuencias que la salida tendría sobre la economía valenciana.
Las opiniones van desde la severa caída en las transacciones que auguran expertos del sector inmobiliario como consecuencia de la previsible depreciación de la libra al daño controlado que se espera en el sector turístico por la debilidad de los mercados alternativos para el turista británico.
¿Qué sectores se verían más afectados? ¿En qué medida? ¿Estamos preparados para afrontar las posibles consecuencias? Valencia Plaza ha recabado las opiniones al respecto de expertos de distintos ámbitos implicados, desde el financiero al empresarial pasando por el institucional. Este es el resultado.
-¿Cuál sería el impacto sobre la economía de la Comunitat de una eventual salida de Reino Unido de la UE?
-La salida no es un juego de suma cero sino que perjudica tanto al Reino Unido como al resto de países. El comercio internacional se vería resentido afectando negativamente a las exportaciones valencianas así como al turismo.
-¿Qué sectores son los más expuestos al Brexit?
-El sector exportador de mercancías así como el flujo turístico son los principales perjudicados. Hay que tener en cuenta que el Reino Unido es el tercer destino de las exportaciones valencianas con casi un importe de 3.000 millones de euros en 2015.
-¿Considera que la UE ha hecho todo lo posible por alejar el fantasma del Brexit o ha faltado convicción?
-Ha faltado una mayor labor didáctica exponiendo los perjuicios del Brexit. Si los británicos fueran conscientes de los perjuicios económicos de la salida creo que saldría claramente el 'no'.
-Si gana el Brexit, ¿cómo debe gestionarse la salida para que el impacto sea el menor posible en la economía valenciana?
-Esto es algo imprevisible.
-¿Cuál sería el impacto sobre la economía de la Comunitat de una eventual salida de Reino Unido de la UE?
-En términos económicos, negativo, por la pérdida de competitividad de la economía británica, pero la plaza financiera valenciana puede posicionarse mejor para atraer inversión extranjera directa. Inglaterra está jugando con fuego, entre otras razones porque está en marcha la fusión de la Bolsa de Londres con la Deutsche Börse. La City es un centro de alto rendimiento basado en el talento y el networking internacional. Todos sus ejecutivos eligen trabajar en Londres por los elevados salarios, régimen fiscal privilegiado y cosmopolitismo. Los grandes bancos de inversión eligen tener su sede en Londres por el “pasaporte europeo” para las operaciones corporativas; si perdieran sus derechos, deberían trasladar buena parte de su negocio, y acaso su sede, a otros centros financieros. Precisamente por ello, si Reino Unido votara a favor del Brexit los grandes beneficiados serían otras plazas financieras internacionales: Nueva York, Hong Kong o dentro de Europa Frankfurt, París, Edimburgo, Madrid o Valencia.
-¿Qué sectores son los más expuestos al Brexit?
-Industrial y manufacturero, por la cancelación, retraso y posible reducción de operaciones comerciales y exportaciones a Reino Unido. Turismo y servicios por la posible reducción de turistas/pensionistas británicos ante una caída de la cotización de la libra esterlina y reducción de la capacidad adquisitiva.
-¿Considera que la UE ha hecho todo lo posible por alejar el fantasma del Brexit o ha faltado convicción?
-La Unión Europea ha sido una historia de éxito, paz, riqueza y bienestar durante 50 años, pero hoy por hoy vive una crisis profunda en la que se cuestiona su legitimidad. Históricamente, el posicionamiento de Reino Unido siempre ha sido económico, no político, y ha dañado cualquier avance fuera de la unión aduanera (tratado de Schengen, constitución europea, UEM -euro-, Unión Bancaria). Existen además precedentes de referéndums europeos con malos resultados (por ejemplo, Holanda y Francia con la Constitución Europea). Las instituciones europeas deben evitar la autocomplacencia, actuando de forma diligente y coordinada. Los comunicados oficiales de Secretarios de Estado y la publicación de informes por parte de instituciones, universidades y centros de opinión pueden pasar desapercibidas para el electorado británico, ajeno a sus argumentos y conclusiones. No podemos olvidar que la diplomacia británica es de las más eficientes. Históricamente ha salido ganando en cualquier negociación con Bruselas (por ejemplo, con el cheque británico). Desde Bruselas no parecen ser conscientes de la destreza de su interlocutor, y no deben rendirse ni hacer concesiones sin pelear a fondo. El peso de la economía británica -sin la City- no tiene la relevancia de antaño, y la City sin Europa pierde atractivo. Estas últimas semanas desde Bruselas se ha tratado de “aislar al enfermo” y “evitar el contagio” pero es muy peligroso trabajar la opinión pública contra las cuerdas, en vísperas de un referéndum. Las mejores planificaciones de campaña empiezan con meses de antelación, para “construir el voto” de forma argumentada, racional y coherente.
-Si gana el Brexit, ¿cómo debe gestionarse la salida para que el impacto sea el menor posible en la economía valenciana?
-La negociación de la salida lleva gestándose en el gobierno británico desde hace unos meses, pero sus ciudadanos están muy alejados de dichas negociaciones. Aquellos británicos que desdeñan los informes y los estudios contrarios al Brexit -por considerar la City “otra” isla dentro de Reino Unido y el referéndum como un paseo en barca sin efectos económicos- pueden protagonizar una pesadilla inesperada. Si la cotización de su moneda o la City se vieran perjudicadas, ellos también sufrirán externalidades negativas en términos de bienestar y servicios sociales en sus decisiones diarias o en el coste de sus vacaciones. Desde la Comunidad Valenciana lo mejor es que las empresas apuesten por intensificar la internacionalización fuera de Europa, con Estados Unidos, Rusia, Asia y Latinoamérica como zonas de creciente importancia. La diversificación geográfica es la mejor medicina ante posibles caídas de las exportaciones o ingresos con Reino Unido. A escala competitiva, la infraestructura turística de la Comunidad Valenciana debe apostar por modelos de alta gastronomía, cultura, salud y parajes naturales atractivos para turistas solventes que no quieren tomar el sol. Hay que preparar la oferta para “otras” demandas.
-¿Cuál sería el impacto sobre la economía de la Comunitat de una eventual salida de Reino Unido de la UE?
-Si triunfa la opción de abandonar la UE, los efectos económicos se sentirían en toda Europa, España incluida, aunque la magnitud de los efectos a largo plazo dependerá de cómo el Reino Unido y la UE configuren sus futuras relaciones. En primer lugar, si los británicos votan a favor de dejar la UE, se abrirá un periodo de incertidumbre en los mercados. Esa inseguridad llevará a los inversores a huir de los activos británicos y, por tanto, de la libra. El Brexit afectaría al comercio, a la inversión directa extranjera y a los flujos migratorios dentro de la UE. La Comunidad Valencia no sería inmune al contagio, dados sus fuertes vínculos con el Reino Unido a través del turismo, la inversión británica las tres provincias y las exportaciones.
-¿Qué sectores son los más expuestos al Brexit?
-A grandes rasgos, el efecto más inmediato sería la pérdida de renta y poder adquisitivo para los británicos que podría acabar afectando al turismo (el pasado año, 2,7 millones de ingleses visitaron la Comunidad Valenciana), con la reducción del gasto por persona y el estancamiento de la inversión inmobiliaria para el turismo residencial. Además, la depreciación de la libra encarecería el coste de venir y de invertir en España. También se verían afectadas las exportaciones porque provocaría un encarecimiento del precio de los productos valencianos exportados y por tanto menos competitividad en el mercado inglés. El año pasado, las exportaciones valencianas al Reino Unido supusieron 3.000 millones de euros. No obstante, es muy factible que en el medio–largo plazo se llegara a algún tipo de tratado comercial para mitigar este efecto.
-¿Considera que la UE ha hecho todo lo posible por alejar el fantasma del Brexit o ha faltado convicción?
-Nadie quiere a los británicos fuera y en los últimos meses se ha intentado crear las condiciones necesarias para que el Reino Unido siga en el club europeo. Siempre ha estado muy claro cuáles son los beneficios de la permanencia: además de un espacio de 500 millones de personas con quien negociar libremente, constituimos un bloque de 28 estados que nos permite enfrentarnos de una forma más eficaz a los retos del mundo globalizado. Y aquí, por supuesto, el Reino Unido tiene que estar. Recordemos el acuerdo que se alcanzó de manera unánime a principios de año y que incluía las demandas que Cameron había pedido en noviembre. Un traje a medida para apoyar la campaña del líder conservador británico. Es verdad que, históricamente, Reino Unido ha tenido una visión particular de la UE que en ocasiones ha sido interpretada desde el continente como demasiado enfocada en intereses económicos. La cuestión es que el referéndum no es sólo una pregunta económica, sino un también política y, muy importante, con un alto grado emocional.
-Si gana el Brexit, ¿cómo debe gestionarse la salida para que el impacto sea el menor posible en la economía valenciana?
-Nadie sabe cómo se gestionaría la salida del Reino Unido del bloque comunitario. El proceso llevaría, al menos, dos años. Además, y en paralelo, habría que negociar una nueva relación entre el Reino Unido y la UE, cuestión que podría durar varios años más, por las dificultades del proceso; ello por no hablar de la incertidumbre económica, social y política que se generaría.
-¿Cuál sería el impacto sobre la economía de la Comunitat de una eventual salida de Reino Unido de la UE?
-Las exportaciones valencianas al Reino Unido alcanzaron en 2015 casi 3.000 millones de euros, duplicando la cifra de sólo tres años antes. Este dinamismo en las ventas en el mercado inglés puede verse negativamente afectado por la previsible depreciación de la libra con respecto al euro, con lo que los productos valencianos exportados serán más caros y por tanto menos competitivos en el mercado inglés; el posible incremento de barreras arancelarias y no arancelarias, que dificultaría los trámites y costes de exportar al Reino Unido e implicará o aumento de precio de los productos valencianos exportados o reducción de los márgenes de las empresas; la más que posible caída de la renta media británica, que implicará una menor demanda de productos importados; y mayores costes de tramitación para las empresas españolas implantadas en el Reino Unido y para las inglesas implantadas en España.
-¿Qué sectores son los más expuestos al Brexit?
-Los productos valencianos más afectados podrán ser elementos de transportes y sus componentes, productos agroalimentarios (frescos o procesados), maquinaria mecánica y eléctrica, productos cerámicos y el calzado. Y, por supuesto, el sector turístico. España es uno de los principales destinos del turista inglés. En 2015, 15,7 millones de ingleses visitaron España, de los cuales más de 2.700.000 lo hicieron en la Comunidad Valenciana. Dicha cifra supone el 35% de los turistas extranjeros en la Comunidad Valenciana. Asimismo, la provincia de Alicante cuenta con una de las zonas residenciales de turistas ingleses más importante de España. Los efectos negativos sobre la actividad turística en la Comunidad Valenciana serían consecuencia de la pérdida de poder adquisitivo de los ingleses y la depreciación de la libra. El coste de venir y de invertir en España será mayor.
-¿Considera que la UE ha hecho todo lo posible por alejar el fantasma del Brexit o ha faltado convicción?
-Evidentemente, todo lo posible no ha sido suficiente. En cualquier caso, el Reino Unido ha tenido desde la época de Margaret Thatcher una situación privilegiada y anómala dentro de la Unión Europea. El Reino Unido ha sido absolutamente contrario a la Unión Económica y Monetaria (está fuera del Euro), a la futura Unión Bancaria y armonización fiscal, ha sido especialmente beligerante con la política social europea, y, finalmente, con la política migratoria. Son demasiados aspectos esenciales de los cuales los británicos llevan desmarcados y a la contra desde hace muchos año. Es un problema básico de diferentes concepciones de cómo se debe desarrollar el concepto de Europa.
-Si gana el Brexit ¿Cómo debe gestionarse la salida para que el impacto sea el menor posible en la economía valenciana?
-Esta situación sólo puede ser gestionada a nivel europeo y las respuestas y soluciones las darán las diferentes instituciones europeas y en los Estados Miembros. Será una respuesta conjunta que afectará al conjunto de los países y regiones de Europa y a sus economías.
-¿Cuál sería el impacto sobre la economía de la Comunitat de una eventual salida de Reino Unido de la UE?
-Supondría un impacto muy negativo, ya que se traduciría en la imposición de barreras arancelarias a las exportaciones españolas. En el caso del sector agroalimentario, y en concreto de Anecoop, el impacto sería importante, ya que Reino Unido es uno de nuestros principales mercados. La producción agroalimentaria española perdería en este mercado volumen de negocio.
Según la opinión que nos han trasmitido los responsables de nuestra filial FESA UK, la perspectiva del Brexit ha tenido ya un impacto negativo en la confianza de los inversores y el valor de la moneda se ha visto afectado según la evolución de los sondeos que especulan con los posibles resultados. Para nuestros compañeros, el Brexit tendría un efecto de mayor inestabilidad en la economía y afectaría negativamente a la libra esterlina. Una posible devaluación de la libra afectaría al coste de los productos y tendría significativos efectos colaterales en la cadena de suministro y afectaría a la confianza del consumidor. Este es el punto de vista de la mayoría de empresas de nuestro sector y del conjunto de la comunidad empresarial británica, especialmente de las que basan su negocio en las importaciones.
¿Qué sectores son los más expuestos al Brexit?
En general los sectores económicos con mayor capacidad exportadora y, por supuesto, el sector financiero, por la gran cantidad de filiales bancarias establecidas en Reino Unido. También las telecomunicaciones. Y no debemos olvidar el turismo, porque si el coste de la salida es el que dice el gobierno de Reino Unido, bajará el nivel adquisitivo de los consumidores ingleses y eso puede afectar al sector.
¿Considera que la UE ha hecho todo lo posible por alejar el fantasma del Brexit o ha faltado convicción?
Personalmente creo que la UE, con los acuerdos recientemente alcanzados con Reino Unido, ya le dio un trato preferente, se hizo un esfuerzo y se demostró el interés por su permanencia en la unión. No debemos olvidar que con el referéndum se ha puesto en duda el valor de la UE, sin tener en cuenta los beneficios que ha reportado. Deshacer el mercado común sólo servirá para reducir nuestra prosperidad y por eso cada vez es más necesario que las naciones de Europa cooperen juntas para atajar problemas comunes.
Si gana el Brexit ¿Cómo debe gestionarse la salida para que el impacto sea el menor posible en la economía valenciana?
Los problemas han aparecido desde el inicio de la campaña y observamos otros que pueden aparecer de forma inmediata si se consolida el Brexit. Evidentemente afectará a las empresas exportadoras valencianas, aunque no debemos olvidar que según algunos expertos las trabas para las empresas exportadoras serán más “psicológicas que reales”. Aunque haya Brexit, las relaciones comerciales entre Reino Unido y la UE podrían no diferir demasiado de las actuales. No obstante, considero que nos hace falta mucha más información para poder hacer una valoración más ajustada a la realidad.
-¿Cuál sería el impacto sobre la economía de la Comunitat de una eventual salida de Reino Unido de la UE?
-Las últimas encuestas apuntan al no y cree que el Reino Unido no va a salir. Pero si se produce el Brexit tampoco es que se vayan a la luna, tendríamos con ellos una relación como la que ahora tenemos, por ejemplo, con Noruega. Estamos haciendo demasiado problema de algo que no sería tanto problema. En nuestro caso, el cliente británico está acosado por el terrorismo en nuestros países competidores y aunque hubiera Brexit no se irían para allá, seguirían viniendo a destinos de la Costa Blanca. No creo que tuviéramos muchos problemas.
-¿Qué sectores son los más expuestos al Brexit?
-El turismo no. La libra se verá afectada, pero no hay que alarmarse. Es cierto que todo se produce en un momento de muchas incertidumbres.
-¿Considera que la UE ha hecho todo lo posible por alejar el fantasma del Brexit o ha faltado convicción?
-La UE se la tienen que creer todo. Si sólo se la cree alguno, es complicado que la Unión vaya entrando en la conciencia del ciudadano europeo. Todos tenemos que asumir como nuestras cosas en común y crear una cultura europea. Todos tenemos que poner de nuestra parte; si Reino Unido sólo mira por el retrovisor para fijarse en los agravios… Si se quiere ser de la UE, la voluntad tiene que ser compartida. Todos tenemos que tener voluntad de ser, de apoyar y de presionar para que las instituciones europeas funcionen mejor y por el bien de todos los países de Europa. La crisis económica ha sido el embrión para el surgimiento del Brexit, los partidos radicales y los radicalismos que funcionan en Europa. El Brexit, Podemos o Le Pen forman parte de ese populismo barato y fácil.
-Si gana el Brexit ¿Cómo debe gestionarse la salida para que el impacto sea el menor posible en la economía valenciana?
-Habría que ver, porque es un terreno inexplorado. Ni siquiera los analistas más agudos saben lo que pasará. Pero sabemos que nuestro valor turístico está supervalorado y los británicos son fieles a nuestro producto. No preveo consecuencias reseñables.
-¿Cuál sería el impacto sobre la economía de la Comunitat ante una eventual salida de Reino Unido de la UE?
-Nuestra posición financiera es estable y la decisión política de un país miembro de la Unión Europea no puede tambalear nuestros cimientos mercantiles. No obstante, la salida del Reino Unido del marco europeo supondría, en algunos sectores, un descenso de nuestros marcadores e índices positivos. Es el caso del turismo, ya que actualmente el Reino Unido es nuestro principal emisor de visitantes, si finalmente ganaran los partidarios del Brexit, la devaluación de la libra -según reflejan diversos informes- generaría una pérdida de poder adquisitivo de los británicos, ciudadanos que conforman el mayor núcleo de población extranjera residente en nuestra provincia, con municipios como Rojales o Llíber -por poner sólo dos ejemplos- en los que la población extranjera supera a la nacional.
-¿Qué sectores son los más expuestos al Brexit?
-Por supuesto, tal y como acabo de exponer, el turístico, en tanto que más de 15 millones de británicos viajaron a nuestro país el pasado año. Pero también otros como el empresarial, ya que son muchas las empresas valencianas y alicantinas que cuentan con negocios en la City londinense y que, ante una posible salida, verían afectada la libre circulación de productos, bienes y servicios, transacciones o capitales. Perturba a nuestros empresarios e inversores, además de a los miles de alicantinos que actualmente viven en el Reino Unido y se benefician de una legislación laboral en el marco europeo o a estudiantes que completan su formación allí.
-¿Considera que la UE ha hecho todo lo posible por alejar el fantasma del Brexit o ha faltado convicción?
-La gran mayoría de estados miembros de la Unión Europea apoya la permanencia del Reino Unido y los órganos de gobierno que la conforman han dado pasos firmes para propiciar que siga formando parte de este proyecto. Los propios ciudadanos británicos creen en el sistema y son una pieza fundamental del engranaje. El deseo de integración sigue siendo grande por parte de todos los europeos y no contemplamos una salida.
-Si gana el Brexit ¿Cómo debe gestionarse la salida para que el impacto sea el menor posible en la economía valenciana?
-Lograr una integración política, económica y social a nivel europeo, que sea real y eficiente y que proporcione estabilidad y cohesión a los estados miembros es el objetivo por el que todos los países que conformamos la Unión Europea trabajamos. No obstante, en el hipotético caso de que finalmente ganaran los defensores de la salida, estamos preparados para afrontar este hecho, porque contamos con una economía sólida, un producto interior bruto saneado y un capital inversor con proyectos, expectativas y centrado en generar crecimiento. Aunque reitero mi pleno convencimiento de que, finalmente, ganarán los que apoyan la permanencia.