VALÈNCIA (VP). Caixa Ontinyent cumple este domingo 137 años. Una historia que empezaba a rodar el 31 de octubre de 1884 cuando una Real Orden aprobaba sus Estatutos Fundacionales con tres finalidades básicas: asegurar la disponibilidad de los ahorros de sus clientes; invertir estos ahorros financiando actividades productivas que dinamizan la economía de la zona; y revertir los beneficios en actuaciones de interés comunitario. Unas finalidades que, ajustadas a cada momento histórico, ha ido manteniendo a lo largo del tiempo.
Desde su nacimiento, Caixa Ontinyent ha atravesado toda clase de circunstancias: ciclos económicos, pandemias, guerras civiles y mundiales, revoluciones industriales y tecnológicas, cambios sociales y culturales... y siempre manteniendo la esencia del que es una caja de ahorros: la territorialidad y la proximidad. Esa fidelidad al modelo y a su gente ha sido determinante para superar las crisis que hemos vivido en los últimos años y que han acabado con muchas entidades financieras, prácticamente con todas las cajas de ahorros españolas, y ha llevado al cierre de gran parte de las oficinas bancarias. Hoy, Caixa Ontinyent es la única caja valenciana que queda, la única que mantiene su presencia en los mismos pueblos que antes de la crisis financiera y la única que revierte aquí, en estas comarcas y en forma de obras sociales, sus beneficios.
En estos 137 años y a pesar de las diversas circunstancias que se han atravesado, Caixa Ontinyent ha sido capaz de garantizar siempre la disponibilidad de los ahorros de los clientes y ha facilitado en todo momento el acceso al crédito a familias, pymes y autónomos propiciando una actividad económica recurrente en su zona de actuación. De hecho, desde la crisis financiera del 2008, ha financiado operaciones por 862 millones de euros, de los que 384 millones se han destinado a la construcción y adquisición de vivienda, sobre todo de primera residencia, y otros 276 millones a actividades productivas, mejorando la infraestructura y la capacidad económica de estas comarcas.
Como caja de ahorros, Caixa Ontinyent no tiene propietarios y su propiedad corresponde a la sociedad. Por eso, la parte que otras entidades destinan a retribuir a sus propietarios, Caixa Ontinyent la destina a obras sociales de interés comunitario a través de una variada gama de actuaciones, que han ido ajustándose a las necesidades de cada momento:
Según José Pla, presidente de la entidad, “tenemos una obra social amplia y diversa que, junto con la actividad financiera, están posibilitando una calidad de vida en nuestros pueblos, evitando su despoblación”.
Caixa Ontinyent se encuentra hoy inmersa en el mismo proceso de transición que afecta la sociedad y a la economía en general. Un proceso que basa en tres aspectos:
Con motivo de esta especial celebración para Caixa Ontinyent, su presidente ha resaltado el papel histórico de la entidad y su proyección de futuro, “un futuro en el cual, en muy poco de tiempo, cambiará sustancialmente tanto el modelo económico como el modelo social. Esa transición ya está en marcha y detectamos una gran preocupación por el acceso a los servicios financieros, por la situación de desamparo en que están quedando muchas familias, por la falta de oportunidades para los más jóvenes y por las propias incertidumbres respecto a la evolución de las empresas, del emprendimiento y, en definitiva, de la ocupación. En esos aspectos, y en el papel que tiene que jugar Caixa Ontinyent como la entidad de aquí, es donde tiene que profundizar nuestro Consejo de Administración en esa reflexión estratégica que, de cara a los próximos años, está abordando tanto desde la vertiente financiera como desde la vertiente social, consciente que solo siente rentables se podrá mantener la Entidad, su actuación y su Obra Social”.
Según Pla, “el modelo de negocio tiene que contemplar hoy herramientas para combatir no solo la competencia sino enemigos más potentes como son el cambio climático, nuevas pandemias o cuestiones geopolíticas derivadas de las desigualdades”. Y todo a partir de ya porque “el futuro no existe, el futuro es hoy y el trabajo que hacemos día a día y que va conformando una nueva sociedad que, como tal, requiere nuevas estrategias”.