EFE/ Fernando VillarMADRID. El expresidente de la Generalitat Francisco Camps se enfrenta este miércoles a su declaración en el juicio del caso Gürtel. A su llegada a la Audiencia Nacional, ha afirmado que va a responder "con seriedad" a la Fiscalía como ha hecho "todos estos años". "Voy a contestar con la verdad. Anticorrupción lleva 14 años preguntándome sobre muchas cuestiones. De esto se me preguntó ya en la causa de los trajes y también a los altos cargos", ha comentado.
Camps ha hecho hincapié en que este juicio va de si los contratos estaban bien o mal hechos y de si él dio "alguna indicación". "Nadie ha dicho absolutamente nada de mí sobre los contratos", ha apuntado.
El expresidente de la Generalitat ha destacado que es "el único que no ha variado la explicación y el discurso de lo que ocurrió en aquel momento", a diferencia de algunos acusados. "Cualquier persona tiene derecho a negociar con la justicia, pero no a imputar a otras personas actos o acciones falsas para salvarse uno mismo o intentar llegar a un acuerdo con Anticorrupción. Eso es una irregularidad", ha remarcado.
Camps, que ha dicho que afronta la jornada "con tranquilidad en unas circunstancias que no son plato de buen gusto de nadie", ha sostenido que en torno a 500 o 600 personas de causas en las que ha estado imputado o no y a las que se les ha preguntado si él había dado alguna orden, "han dicho que no". "Altos cargos, funcionarios, empresarios... ¿qué más se puede pedir?", ha reflexionado.
En esta pieza de la macrocausa, 27 personas son juzgadas, junto al exjefe del Consell, por el presunto trato de favor desde la Generalitat a siete empresas del cabecilla de la Gürtel, Francisco Correa, que entre 2004 y 2009 recibieron varios contratos menores por valor de más de 1,8 millones de euros. En ella se incluyen las supuestas irregularidades en la adjudicación a Orange Market del contrato para el expositor valenciano de la edición de Fitur 2009.
Camps está acusado de los presuntos delitos de fraude y prevaricación, por los que la Fiscalía le pide dos años y medio de prisión y diez de inhabilitación. A lo largo de las sesiones celebradas hasta la fecha, han declarado 25 personas, algunas de las cuales han llegado a una conformidad con Anticorrupción y han señalado al expresidente de la Generalitat como el que favoreció a la trama Gürtel en los contratos con la administración valenciana.
Otras, más favorables a su línea de defensa, lo han desvinculado. Fue el caso de la exdirectora general de Promoción Institucional de la Generalitat Dora Ibars, cuya declaración tenía una especial relevancia.
Esta pieza de la macrocausa de Gürtel es el último de los frentes judiciales que ha afrontado Camps durante años y supone su segunda declaración como acusado en un juicio relacionado con ella. La primera fue en el conocido como "caso de los trajes", del que fue absuelto tras dimitir como presidente de la Generalitat en 2011.
