Carmen Alcayde y Raúl Antón, en el cartel de monologuistas del Casino Cirsa en abril

VALÈNCIA. Un amplio elenco de humoristas del panorama nacional actuarán en la sala Ópera de Casino Cirsa Valencia la noche de los sábados del mes de abril. Contará con las actuaciones de Carmen Alcayde junto al Maestro Benavent, Coria Castillo, Raúl Antón y el televisivo Mariano Mariano.

El próximo sábado 6 de abril abrirán la lata de las risas Carmen Alcayde y el Maestro Benavent, que regresan a Ópera después de su debut del pasado verano. La pareja cómica vuelve al escenario del casino valenciano donde el público podrá ver a una Carmen que se ríe de sí misma, de cómo le ha ido la vida, personal y profesionalmente, y también de cómo ve el mundo que le rodea. Presentará la sesión, David Nácher, como maestro .

El 13 de abril será el turno de Coria Castillo, que a los seis años ya ganó su primer dinero contando chistes a los guiris en una playa… Sus padres estaban tan orgullosos que la pusieron a trabajar ‘robando’ sonrisas. Ganadora de varios concursos de comedia, Coria es una habitual de Paramount Comedy y una ‘enfermera loca’ en el Circo de los Horrores. Actualmente viaja por toda España haciendo reír a los demás. No hace caso a las críticas y está convencida que, de momento, la calabaza que la llevó al baile sigue ahí y no piensa moverse.

Y al día siguiente, en sesión extraordinaria de domingo a las 19:00 horas, como es habitual últimamente, regresa Raúl Antón y su archiconocido “Hasta luego Mari Carmen”. Es la seña de identidad de cómico valenciano que "lo peta" en las redes sociales y que siempre que actúa en Casino Cirsa Valencia agota las entradas varios días antes de su actuación. Es de sobra conocido por su sus vídeos en los que se mezclan risas y sátira valenciana, desde las fiestas de los pueblos hasta el despilfarro de los políticos.

Después de Semana Santa, el sábado 27 de abril, cierra este espectacular cartel el televisivo Mariano Mariano, que triunfó en los 90 con intervenciones estelares en Crónicas Marcianas. De aspecto serio, pero capaz de arrancar una sonrisa al respetable, fue uno de los precursores del género de los monólogos en España cuando en 1990 batió un récord de actuaciones diarias durante cinco años consecutivos en Madrid.