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VALÈNCIA. "Desde Valencia Plaza y desde ESIC entendíamos que teníamos que aportar un granito de arena para seguir apostando por el talento joven", explica Agustín Carrillero, director de ESIC Valencia. Por ese motivo hace dos años pusieron en marcha el programa Aquí Talento, una iniciativa para detectar el talento en las últimas etapas de la formación y desarrollarlo y retenerlo en las empresas de la Comunitat Valenciana. "El balance de la primera edición (en 2020 no se pudo celebrar a causa de la pandemia) fue muy positivo. Esperábamos que los participantes lo disfrutaran y, lo más importante, que aprendieran mucho, ya que ese es el principal objetivo de este proyecto. El pensamiento crítico y la resolución de problemas, que encabezan la lista de habilidades que los empleadores creen que crecerán en prominencia en los próximos cinco años, se trabajaron en la anterior edición y ver la evolución y el resultado de los alumnos después de los días de trabajo fue muy gratificante".
-¿Qué van a encontrar los estudiantes que participen en esta edición?
-Entendemos que ser universitario es una forma de posicionarse en la vida. Es importante tener un buen conocimiento de uno mismo, pues nos lleva a identificar y superar nuestros defectos, pero también a conocer y potenciar nuestras virtudes. No existe una fórmula mágica ya que cada uno es único. Hay que encontrar y trabajar arduamente en lo que a uno le gusta, en lo que siente útil y sabe hacer bien. Eso generará felicidad profesional y ese es un paso importante para que pueda empezar a surgir el talento de una persona.
-¿Cómo definen en ESIC el talento?
-En muchas ocasiones cuando hablamos de talento pensamos en alguien que tiene un alto coeficiente intelectual. En algunas conversaciones con alumnos que empiezan a despuntar, me atrevo a pedirles que acepten con mayor responsabilidad si cabe, la exigencia que entraña ser especiales, puntos de referencia para sus compañeros de clase. Por tanto, que vean que son competentes en sus cometidos. Que, con creatividad, convierten las no pocas dificultades en retos que superar. Que conjugan los objetivos particulares con los de servicio. Que están siempre disponibles para asumir nuevas tareas. Que saben pasar por alto los pequeños roces de la convivencia diaria, sin hacer juicios peyorativos sobre persona alguna, y afectuosamente próximos a los demás.
-¿Qué beneficios obtienen las empresas participantes?
-En algunos momentos de la crisis provocada por la covid-19, nos hemos preguntado que ¿qué queremos? Queremos información frecuente, verdadera, precisa y, si es posible, que nos la dé quien decide, en este caso las empresas que buscan candidatos. La incertidumbre genera necesidad de saber, y los participantes conocerán de primera mano que está pidiendo el mercado laboral, y las empresas participantes podrán ver a potenciales candidatos en situaciones muy concretas durante varios días, lo que les permitirá valorar las competencias que están buscando.
-¿Cuál es el papel de ESIC en este programa?
En ESIC tenemos el afán de ser útil a la sociedad. El 50% de todos los empleados necesitarán volver a formarse para 2025, a medida que aumente la adopción de la tecnología, según el Informe sobre el Futuro de los Empleos del Foro Económico Mundial. En este nuevo entorno tan incierto, la Universidad y las escuelas de negocio entiendo que debemos ejercer un liderazgo natural, que nos convierta en factor de cohesión. Es preciso que nos ubiquemos en el epicentro de la reconstrucción, que actuemos como catalizador de la empleabilidad y que aportemos una respuesta solidaria y comprometida con el futuro de la sociedad.
-Uno de los objetivos de Aquí Talento es poner en contacto a empresas y estudiantes, ¿qué beneficios sacan ambas partes?
-Entiendo que debemos responder con creatividad e espíritu innovador a la profunda transformación que esta experimentando la sociedad en este momento. Nuestro empeño es atender y ayudar a los jóvenes estudiantes, para que cada uno se proponga metas ambiciosas y adquiera las capacidades necesarias para alcanzarlas. Además, tenemos muchos antiguos alumnos y muchos amigos excepcionales (algunos en las empresas que nos acompañan en este proyecto), y cada día percibimos que nos ayudan de mil formas diversas y sabemos bien que contribuyen a todos los proyectos que quieren aflorar nuevos recursos. Si queremos transformar la dificultad en oportunidad este es el camino.