VALÈNCIA. El Institut Valencià de Cultura (IVC) consuma el golpe de timón en el Festival de Cine Internacional Cinema Jove. La dirección adjunta de Audiovisuales, a cargo de Luis Gosálbez, está ultimando la contratación de un nuevo director para el certamen, pero el modelo elegido para este proceso no será a través de ninguna forma de concurso público, sino una contratación discrecional.

Tal y como publicó Levante-EMV y ha confirmado a través de fuentes oficiales este diario, el IVC está haciendo una ronda de entrevistas a personas que no se han presentado a una convocatoria abierta, sino que es una lista de seleccionados por la propia institución. A partir de estas, el ente decidirá, sin jurado, ni puntuaciones, ni forma de controlar la transparencia del proceso.

Según las mismas fuentes oficiales, la persona elegida ‘a dedo’ firmará un contrato laboral-artístico, una fórmula específica para empresas e instituciones culturales pero que necesita el visto bueno de la Conselleria de Función Pública y que está reservado a contrataciones temporales. Esta fue la fórmula, por ejemplo, del contrato de Ricardo Casero al frente de la Jove Orquestra de la Generalitat Valenciana.

Carlos Madrid, director del festival en las últimas ocho ediciones, ha declarado a Kinótico que se ha enterado por la prensa del proceso, de lo que se deduce que el IVC no ha entrado en valorar su continuidad y que su nombre no entra dentro de la terna de los posibles candidatos. Se desconocen, en todo caso, los motivos: tanto el director general del IVC, Álvaro López-Jamar, como la ahora exsecretaria autonómica de Cultura, Pilar Tébar, felicitaron a Madrid por su gestión y por el crecimiento del festival, que celebró su edición número 40 el pasado mes de junio.

Para esta última edición, que previsiblemente ha sido la última con Carlos Madrid al frente del festival, el IVC acabó contratándole a través de un contrato menor desde marzo hasta la finalización del festival. Fue la solución que encontró la institución ante la imposibilidad de prorrogar la licitación que había dado cierta estabilidad durante los cuatro años anteriores.

A preguntas de este diario durante los últimos meses sobre cuál iba a ser el modelo de gestión de festival, el IVC llegó a plantear que se hiciera de manera interna, como Dansa València o Sagunt a Escena, bajo la dirección del propio Gosálbez y la gestión del equipo de programación de La Filmoteca, una idea que, aunque se verbalizó, se descartó automáticamente.