VALÈNCIA. Dar el salto al exterior no siempre es fácil para las empresas. Obstáculos como las barreras culturales, idiomáticas o la diferencia en fiscalidad complican la entrada en nuevos mercados. Por ello, ir de la mano de asesores o socios locales se antojan como dos factores claves para el éxito de la internacionalización de una compañía, aunque siempre hay otros desafíos y retos que superar.
Así se puso de manifiesto en una jornada organizada por Valencia Plaza junto al despacho Miñana Beltrán Tax & Legal, que celebra este año su 20 aniversario, asesorando a empresas con vocación internacional. Un evento que contó con una nutrida participación de empresas y en el que se abordaron los principales factores para conseguir que la implantación en otro territorio sea lo más fructífera posible.
La jornada arrancó de la mano de Tomás Miñana, socio director de Miñana Beltrán Tax & Legal, quien hizo un repaso a los orígenes del despacho y avanzó los planes del futuro. "Venimos de unos inicios muy modestos. Mi padre era economista y decidió dejar la gran empresa en la que trabajaba para montar un despacho de asesoría fiscal y laboral. Hace 20 años que yo me uní al proyecto", rememoró.
De ese origen solo quedan recuerdos pues, tal y como detalló, actualmente son un equipo de 20 personas y tienen presencia en Almería, Valencia y Oporto. De cara al futuro, aseguró que su intención es hacer crecer la empresa y ser un referente detrás de las Big Four, pero "sin dejar de pensar que los clientes son amigos ni implantar en el despacho un cómputo horario para facturar x euros a final del mes".
Tras esta intervención, continuó Pau Rausell, profesor de Economía Aplicada de la Universitat de València y Director de Econcult, con una ponencia sobre las principales claves de la internacionalización. "La expansión internacional implica que vendemos y compramos mucho en el exterior, pero también que se realizan inversiones comerciales y productivas en mercados internacionales. Y, en este contexto, España está bien posicionada tras el cambio de modelo que se produce después de la crisis de 2008", expresó.
En este sentido, incidió en que antes del boom del 'ladrillo' el sector exterior era el "freno de la economía española", algo que después cambió y que ha permitido que en estos momentos mantenga un crecimiento sostenido. Como claves a tener en cuenta por las compañías que quieran salir fuera, apuntó a la necesidad de convivir con la incertidumbre, ser proactivo y tener planes B, C, D e incluso E; invertir en intangibles; no dejar que se escape el talento; eliminar complejos; y establecer alianzas con socios locales.
Posteriormente, se celebró la primera mesa redonda sobre la fuentes de financiación para impulsar el crecimiento empresarial, en la que participaron Julio Cobo, socio director de Implica Corporate Finance; Luz Martínez, directora de internacional de la Cámara de Comercio de Valencia; Joan Badenes, socio en Miñana Beltrán Tax & Legal; y Eva Uroz, directora de comercio de Caixa Popular.
Al respecto, Luz Martínez, directora de Internacional de la Cámara de Comercio de Valencia, señaló que uno de los principales obstáculos que se encuentran las empresas a nivel de financiación es su encarecimiento y el endurecimiento de las condiciones generales, unas barreras que, a su juicio, muchas veces impiden a las empresas optar al crédito. Por ello, defendió la formación y la labor de la consultoría para ofrecer esa cultura financiera necesaria para conocer otras alternativas. Pero también puso en valor el papel de las instituciones públicas. "Estamos aquí ayudar y somos complementarias para definir una hoja de ruta y dónde podemos encontrar fuentes y ayudas", subrayó.
Julio Cobo, socio director de Implica Corporate Finance, quiso dejar claro que no es lo mismo exportar a un mercado que internacionalizarse con la apertura de una delegación comercial, una sucursal o mediante la adquisición de una empresa local. Generalmente, sostuvo, lo habitual es acudir al sistema bancario tradicional que "te va a pedir unas condiciones o avales de tu empresa, incluso garantías personales". "En cambio, existen otra serie de herramientas privadas e institucionales para financiar procesos como fondos de deuda, prestamos senior, subordinados o participativos", defendió.
También, apuntó a la existencia de fondos de capital riesgo que entran con posiciones minoritarias y agilizan el proceso de crecimiento de una compañía, o de empresas públicas como Cofides que "puede ayudar de forma temporal entrando en el capital mediante una ampliación o mediante préstamos", explicó. Sin embargo, reconoció que en muchos casos los empresarios tienen bastantes reticencias a recurrir a este tipo de vías porque muchas veces implica la entrada al accionariado de capital externo.
Desde el punto de vista de una entidad bancaria, Eva Uroz, directora de comercio de Caixa Popular, apuntó que los desafíos financieros para las empresas son muchos y dependen de la situación de cada organización, sus activos e, incluso, del sector. "En Caixa Popular, por ejemplo, no financiamos empresas relacionadas con el juego", indicó. En cualquier caso, remarcó que los criterios dependen de cada entidad y de la coyuntura económica del momento. "Si es desfavorable, hay una restricción al crédito. No obstante, hoy en día, afortunadamente, si las cuentas están actualizadas no hay problema, pero todavía hay muchas pymes que disponen de una contabilidad que no refleja adecuadamente su situación financiera, por lo que tienen muy difícil acceder a financiación", indicó.
Respecto a los riesgos financieros más comunes al entrar en nuevos mercados, Uroz apuntó a las divisas, ya que incluso transacciones realizadas en Europa se están abonando en dólares. Asimismo, consideró primordial tener un buen estudio de mercado y un análisis de costes para que "esa expansión sea positiva".
Joan Badenes, socio en Miñana Beltrán Tax & Legal, admitió que uno de los principales obstáculos que se encuentran es que el administrador de una empresa está tan centrado en el día a día y la gestión de la compañía que no es capaz de conocer las opciones de financiación que existen, por lo que recurren a la tradicional. Por ello, apeló a la importancia de la figura de un asesor para que le pueda trasladar todo el "abanico de posibilidades que existe".
En cualquier caso, admitió que existe reticencia de los empresarios a acudir a determinadas fuentes de financiación que pueden implicar una cierta pérdida del control de la empresa. No obstante, Badenes defendió que la entrada temporal de fondos públicos o privados es "una buena solución para financiar determinadas operaciones, sobre todo de fusión o compraventa, articulados sobre un pacto de socios que establezca qué funciones asume cada parte".
La segunda mesa versó sobre estrategias de internacionalización y casos de éxito. En esta parte de la jornada participaron Ramón Greshake, ex-Gerente en TEDI comercio SLU España y Portugal; Juan José Tomás, director general en Mayes Exportación; Tomás Miñana; Juan Ignacio Franchini, founder de Innovation I Legal/Tax/Tech; y Fabio Sardella, COO & Sales Director de Bimotor Ibérica. En esta parte, las empresas expusieron sus experiencias en el mercado exterior y cuáles fueron los pasos que adoptaron.
En este sentido, Miñana apuntó que, desde su experiencia en el asesoramiento a compañías, una de las principales cuestiones a tener en cuenta es el sistema tributario de cada país. Mientras en miembros de la OCDE son bastante similares, remarcó que existen notables diferencias en continentes como el asiático o el africano. "España tiene una buena red de convenios internacionales que están para evitar la doble imposición, pero es importante conocer hasta dónde se pueden hacer efectivos y tener en cuenta las tasas", afirmó.
Por su parte, Juan Ignacio Franchini, founder de Innovation I Legal/Tax/Tech, hizo alusión a los problemas que se encontraron a nivel de ordenamientos jurídicos diferentes, especialmente aquellos como el anglosajón o germánico. También, detectaron barreras idiomáticas y culturales. "Uno de los problemas más prácticos es la lentitud de la justicia o las restricciones a las inversiones en países con reglas más proteccionistas. Por eso, la seguridad jurídica es algo fundamental", reseñó.
También se refirió a estas cuestiones Juan José Tomás, director general en Mayes Exportación, establecido en Marruecos desde el año 2.000 y que día a día debe hacer frente a una rígida burocracia. Sin embargo, admitió que se trata de un país "seguro" que, dentro de sus "peculiaridades", favorece la inversión extranjera. También destacó la importancia de llegar de la mano de un socio local, una alianza que facilita la internacionalización. Eso sí, manifestó que tienen problemas para encontrar mano de obra preparada porque, aunque el sistema universitario ha cambiado y cada vez hay más oportunidades, en ciertos puestos más especializados cuestan encontrar candidatos.
El diálogo continuo con las autoridades fue la clave que puso encima de la mesa Fabio Sardella, COO & Sales director de Bimotor Ibérica. "Cada país tiene lo suyo, pero hay burocracias como la de Italia que es absurda, mientras en otros países es más ligera", comentó. En su caso, distribuyen productos en prácticamente todo el mundo y en muchos casos más que abrir filial ha sido más eficiente tener "dos o tres departamentos que nos permitan la distribución y entrar a nivel fiscal de manera ligera". Ir junto a un socio local en ciertas zonas lo subrayó como algo necesario e importante.
En cuanto a perfiles profesionales, Ramón Greshake, ex-Gerente en TEDI Comercio SLU España y Portugal, destacó el talento en retail de aquellos que se forman en España, aunque reconoció que muchos se van fuera porque se potencia y valora más su trabajo. "A la hora de contratar, existe una fuerte demanda de personal cualificado en España ya que están muy capacitados para adaptarse a las incertidumbres del sector” concluyó.