VALÈNCIA (EFE). Activistas de la plataforma ciudadana Comissió Ciutat-Port, de la que forma parte Ecologistas en Acción, se han concentrado este martes frente al Real Casino de Madrid, donde se celebraba la Cumbre Empresarial Eje Madrid-Comunitat Valenciana, para manifestar su "oposición frontal" al proyecto de ampliación del Puerto de València.
La plataforma se opone a "esta megaconstrucción que solo favorece intereses privados de una naviera, amenaza la riqueza natural del territorio y la salud pública y destruirá empleo" y en la que, según indica la entidad, "se prioriza el interés particular frente al interés general".
A la segunda Cumbre Empresarial han asistido la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el president de la Comunitat Valenciana, Carlos Mazón, así como la presidenta de la Autoridad Portuaria de València y empresarios navieros con intereses en el Puerto valenciano.
Las activistas han mostrado una pancarta en la que podía leerse: “No a la ampliación del Puerto de València” y, mediante esta concentración, han mostrado su rechazo a esta ampliación portuaria y se han posicionado contrarios a “las injerencias interesadas de terceros actores”, según han informado en un comunicado.
En respuesta a las reiteradas declaraciones de los políticos asistentes al encuentro, que afirman que “el Puerto de València es el puerto de Madrid”, los manifestantes ecologistas exigen “una participación real de la ciudadanía en la toma de decisiones y el gobierno del Puerto de València, priorizando los intereses y la voluntad de las vecinas y vecinos de la ciudad”.
En declaraciones a los medios, Francesc Herrera, miembro de la Comissió Ciutat-Port, ha afirmado que “ni el patrimonio natural del pueblo valenciano, sus playas, su Albufera y su huerta, ni la salud de la ciudadanía pueden estar supeditados a los intereses económicos de una gran multinacional como MSC, con sede fiscal en Suiza”.
Por su parte, Jorge Fernández, miembro de València Saludable y la Comissió, ha recordado “el progresivo encarecimiento del proyecto, recientemente incrementado un 22 %, superando ya los 660 millones de euros y todo ello en un Puerto en constante pérdida de tráfico: solo en el último año, el descenso ha sido del 11 % según datos de la propia Autoridad Portuaria”.
Herrera ha añadido que "a este gasto público habrá que añadirle el correspondiente desembolso para construir nuevas infraestructuras de acceso, que también se costeará con fondos públicos".
"Una desmesura de gasto público para un proyecto completamente desfasado de la realidad actual, ignorando la situación mundial del mercado logístico y con graves impactos medioambientales. Un traje a medida para MSC que nos sale muy caro y que, tal como denuncian trabajadores del sector, destruirá más de 500 puestos de trabajo debido a la automatización total de la nueva terminal”, ha indicado.
Los activistas consideran "sorprendente" la “obstinación de las diversas administraciones implicadas en continuar impulsando un proyecto que está bajo la lupa de los tribunales debido a las diferentes causas judiciales promovidas por la plataforma ciudadana que se encuentran en marcha".
La plataforma ciudadana muestra su preocupación por la “irresponsabilidad” en la que está incurriendo la Autoridad Portuaria de València, "persiguiendo un proyecto caduco y propio de las peores prácticas del siglo pasado, completamente contrario a lo necesario en el momento de crisis climática en el que nos encontramos”, y critica la reciente decisión del Puerto de Valencia de suprimir las ruedas de prensa posteriores a las reuniones de su Consejo de Administración