Sanidad elimina el indicador sobre altas médicas de los criterios de evaluación de los profesionales

VALÈNCIA (EP). La Conselleria de Sanidad ha eliminado el indicador relativo a las altas médicas entre los criterios de evaluación del desempeño de la actividad de profesionales sanitarios, incluidos en el Acuerdo de Gestión 2024, con el objetivo de "garantizar la mejor atención a los pacientes al evitar las altas hospitalarias precipitadas", según ha informado el departamento que dirige Marciano Gómez.

En concreto, el indicador eliminado con respecto al Acuerdo de Gestión aprobado por el Botànic para 2023 es el que computaba 'el porcentaje de altas de hospitalización dadas entre las 8.00 y las 11.59', pactado en diciembre de 2022.

Los nuevos indicadores para 2024 se hicieron públicos en el Foro de Participación Ciudadana, que se convocó a través de la página web de la Conselleria de Sanidad a finales del mes de octubre.

Al respecto, el director general de Información Sanitaria, Calidad y Evaluación, Juan Beltrán, ha explicado que el objetivo de eliminar este indicador" fue "precisamente garantizar la mejor atención a los pacientes y que el complemento retributivo de productividad que perciben los profesionales, desde hace años, incentive realmente a quienes mejor trabajen en beneficio de una mejor y más ágil atención sanitaria a los ciudadanos". De este modo, "se pretende así evitar altas hospitalarias precipitadas y los reingresos que pudieran ocasionar".

Asimismo, ha destacado que la Conselleria de Sanidad ha incrementado el presupuesto destinado a financiar este programa de Acuerdos de Gestión para incentivación de los profesionales, que va a pasar de 20 millones de euros en 2023 a 30 millones en 2024.

Indicadores

Los indicadores que se van a evaluar en 2024 se enmarcan dentro de las siguientes líneas estratégicas: satisfacción de los pacientes, accesibilidad diagnóstica y terapéutica, buenas prácticas para la atención al paciente, y proporcionar una atención segura y apropiada.

Asimismo, se tendrán en cuenta la integración de los dispositivos asistenciales, el impulso de la seguridad clínica, innovar la atención a la cronicidad, potenciar la investigación, promover el uso de datos para mejorar los resultados en salud, adecuar la prescripción farmacéutica y optimizar recursos, entre otros.