VALÈNCIA. Compromís insiste en que el futuro PAI de Benimaclet sea un desarrollo urbanístico donde "todo es compatible", también la desclasificación de suelo actualmente urbanizable pese al escaso apoyo vecinal a la defensa de la huerta revelado por una encuesta municipal este viernes. Tras conocerse los resultados del sondeo, y preguntado por el mismo, el vicealcalde por la coalición valencianista, Sergi Campillo, subrayó que en el sector "caben todas las cosas".
La encuesta, encargada por la concejalía de Urbanismo que dirige la socialista Sandra Gómez, y desarrollada como paso previo a la elaboración del Plan Especial del barrio, revela que apenas el 2,3% de los 400 encuestados apuesta por "defender y mantener la huerta" como una de las principales cuestiones a abordar. Un 0,8% responde "no quitar la huerta" si se les pregunta por lo necesario para "mejorar la calidad de vida" de los residentes, y un 1,3% se refiere a la proximidad de la huerta como uno de los puntos fuertes a valorar del barrio.
Unos datos considerablemente bajos para hablar de apoyo a las banderas sostenidas por Compromís en el debate sobre el futuro desarrollo urbanístico del barrio, en linde con La Ronda Norte. Campillo, sin embargo, y al respecto de estos datos, insistió en que "caben todas las cosas y se debe también considerar el carácter más agrario del barrio", un factor "fundamental" a su juicio.
"Esto no quiere decir que el 90% de los vecinos tengan un huerto urbano", se explicó, e hizo referencia a otros barrios de la ciudad como Malilla donde existen huertos urbanos integrados con zonas urbanizadas. Y aunque es el 11% del total el que pide actuar sobre los huertos urbanos ya existentes, lo cierto es que hay que diferenciar los huertos urbanos regulados por el consistorio como los de Malilla y la desclasificación de suelo, algo bien distinto, que es una de las líneas de defensa del proyecto de Compromís.
De hecho, la propuesta de la coalición valencianista presentada en su momento por el propio Campillo, la portavoz de la coalición en la ciudad, Papi Robles, y el arquitecto y asesor del alcalde David Estal, recogía desclasificar un 35% del PAI de Benimaclet, cerca de 95.000 metros cuadrados de un total de 270.000, para dejar fuera de los terrenos urbanizables huerta cultivada por vecinos y el Centro Social Okupado Anarquista (CSOA) l'Horta, además de terrenos actualmente baldíos.
Este viernes, el vicealcalde sostuvo la línea argumental de que el PAI "debe responder a la historia e idiosincrasia de un barrio muy ligado a la huerta" y que se deben "atender todas las sensibilidades" del barrio, incluyendo la desclasificación de suelo, las zonas verdes o la construcción de vivienda. Y es que casi 9 de cada 10 encuestados considera necesario aumentar la oferta de vivienda del barrio y la vivienda pública.
En este sentido, hay que recordar que la desclasificación del 35% del PAI implicaba una reducción en la cantidad de vivienda construida. Si los socialistas proponían 1.000 viviendas, 351 de ellas protegidas y dotaciones, sin desclasificar suelo, la idea de Compromís reducía la oferta de vivienda nueva a 720, 215 de las cuales serían protegidas.
Con todo, Campillo abogó por continuar con el diálogo en el seno del Gobierno municipal para sentirse "cómodos" y encontrar la solución. "Se trata de llegar a una solución y todavía hay tiempo por delante", manifestó. De hecho, recientemente se ha encargado la redacción del Plan Especial de todo el barrio, que definirá las necesidades del mismo teniendo en cuenta las respuestas recabadas en la encuesta. Este proceso durará un año, de manera que el Plan estará listo para las próximas elecciones.
Los criterios fundamentales para este trabajo están fijados en un acuerdo aprobado por el gobierno municipal el pasado mes de diciembre. Y entre ellos, por ejemplo, no se encuentra la desclasificación de parte de los terrenos para reconvertirlos en huerta, sino que se establece de manera explícita que los usos del suelo se mantendrán tal y como han sido recogidos en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de València.
Tampoco aparece entre los requisitos el soterramiento de la Ronda Nord, otra de las reclamaciones de la coalición valencianista socia del PSPV en el gobierno municipal y que dirige el alcalde Joan Ribó. Sobre ello, más de un tercio, el 38,3% de los encuestados considera "necesario rediseñar" esta circunvalación al paso por Benimaclet "para mejorar la relación del barrio con la huerta". Una cifra considerable, si bien lejos de resultar mayoritaria.
Con todo, y ante estos resultados, cabe recordar, el concejal de Movilidad, Giuseppe Grezzi, de Compromís, anunció el año pasado que encargaría por su parte un estudio para conocer la viabilidad de un proyecto de soterramiento para saber si era posible o no ejecutarlo.
El edificio tendrá carácter plurifamiliar entre medianeras a dos calles y estará compuesto de planta baja más cuatro plantas de piso