Compromís Ribera Alta pide más competencias municipales para frenar las macro plantas fotovoltaicas

VALÈNCIA. Las alcaldías de Compromís de La Ribera Alta han denunciado la falta de competencias municipales para frenar las macro plantas fotovoltaicas y han expresado su "malestar" por la estrategia que está siguiendo la administración estatal y autonómica por "favorecer un crecimiento acelerado de la potencia instalada dejando de lado la protección del territorio".

Así, desde el partido valencianista han manifestado que actualmente hay "un continuo goteo de solicitudes de implantación de macro plantas fotovoltaicas en todo el territorio valenciano, muchas de ellas en la Ribera Alta". Actualmente están tramitándose proyectos en Tous, Catadau, Llombai, Alzira y Carcaixent, algunos de los cuales prevén una producción de más de 50 MW, que dependen del Ministerio para la Transición Ecológica, y otros de menos de 50 MW, cuya competencia es autonómica.

En esta línea, los alcaldes Paco Salom (Carcaixent), Diego Gómez (Alzira), Santi Cervera (Alfarb) y la alcaldesa Verònica Almunia (Barraca d’Aigües Vives) se han mostrado contrarios al marco legislativo actual, que a su parecer "resulta permisivo y deja prácticamente fuera los ayuntamientos a la hora de decidir sobre la implantación de los proyectos cuando se trata de la administración más próxima a la ciudadanía, y la más próxima en cuanto a la protección del territorio".

Asimismo, han denunciado la "falta de una planificación estratégica que ordene el proceso de implantación de energías alternativas", por lo que exigen a la Generalitat un Plan Director de ámbito autonómico que regule la distribución en el territorio a partir de criterios objetivos, "más allá del grado de protección actual, la proximidad a una subestación eléctrica o a las grandes concentraciones de población", han expresado.

A su vez, han expuesto que perciben "cierta connivencia política, que acepta determinadas renuncias en pro de un interés general impuesto, como así lo demuestran las declaraciones del presidente Ximo Puig a primeros de abril donde manifestaba que "para hacer una tortilla hay que romper primero los huevos", dejando claro que pone por delante el interés para acelerar la implantación de potencia instalada frente la protección natural y patrimonial de nuestro territorio".

En este sentido, la formación comarcal ha dejado claro que "la transición energética es necesaria pero no a cualquier precio". Por eso, las alcaldías de Compromís de la Ribera Alta han sentenciado: "la necesidad de hacer una transición energética no puede obviar que esta transición tiene que ser también ecológica, y no puede ser a expensas del territorio que, además de su destrucción irreparable, podría derivar en una nueva burbuja especulativa, la de las macro plantas".