El cliente interno. La comunicación empieza con los de casa
Hace 120 años, Lever Brothers, empresa creadora de Unilever, dispuso un buzón de sugerencias para conocer la opinión de los empleados. La esencia no ha variado, pero sí los escenarios.
La comunicación interna se puede definir como la herramienta en la gestión de empresas e instituciones, dirigida al público interno, destinada a alcanzar unos niveles óptimos de motivación en los empleados y retener el talento. Para llevarla a cabo es necesario, como paso previo, la creación de una cultura empresarial liderada por la dirección, que perciba la comunicación con las personas como una herramienta de éxito.
De manera generalizada, no ha sido una característica destacable de las empresas españolas la existencia de una adecuada política de comunicación interna entre la organización y los empleados que permita alcanzar un equipo integrado y motivado, que genere una buena eficacia interna y, por tanto, transmita a los mercados la máxima calidad organizacional. Si bien es cierto, que la covid-19 ha planteado toda una revolución en la comunicación interna, descubriéndose como la gran aliada de las organizaciones para “salvar” esta crisis sanitaria y económica lo mejor posible.
En este sentido, uno de los principales objetivos de este artículo es mostrar los motivos que deben llevar a cualquier organización, con independencia del tamaño y tipología, al desarrollo de un plan de comunicación interna como estrategia de gestión organizacional. De hecho, cuanto más pequeña es la organización más importancia hay que darle a la comunicación interna, pues la desmotivación o absentismo de un empleado puede ser devastador y un auténtico problema de organización en una micro pyme.
Aunque hay diversas razones que explican la importancia que supone llevar a cabo una adecuada comunicación con el cliente interno, destaca la creación de una cultura empresarial que recoja sus principios y objetivos a alcanzar, lo que facilita la optimización de los recursos e incrementa las relaciones entre los distintos niveles de la organización.
Sin duda, lograr una comunicación permanente, fluida y en todas direcciones que nos permita alcanzar un clima laboral satisfactorio entre los empleados y una mayor implicación en la organización, es una razón de peso para tomar en serio la gestión de la comunicación interna.
Para ofrecer un servicio de calidad al cliente externo resulta imprescindible alcanzar la plena satisfacción del cliente interno, y convertir al equipo humano en embajadores de marca.
En cuanto a las herramientas para facilitar la comunicación dentro de las organizaciones son diversas, desde las más tradicionales como la intranet hasta las reinas indiscutibles en tiempos de pandemia, como las redes sociales internas, aplicaciones para realizar proyectos en grupo, así como herramientas de mensajería instantáneas y de difusión digital.
En el Manual de Comunicación Interna, recientemente publicado por la Asociación de Directores de Comunicación -DIRCOM- del que soy coautora junto a Cristina Aced y Susana Miquel, se aprecia la evolución e importancia que ha adquirido la Comunicación interna con la pandemia. Hace tan solo un par de años, los estudios realizados nos indicaban que los máximos directivos de las organizaciones valoraban como importante la comunicación interna. En la actualidad, esa valoración se ha visto incrementada a muy importante, adquiriendo un 85% de reconocimiento en las organizaciones tras la irrupción de la covid-19 en nuestras vidas.
Durante la pandemia, las organizaciones que han gestionado su comunicación interna se han centrado sobre todo en mejorar la motivación e implicación de los empleados y reforzar su orgullo de pertenencia, así como en establecer acciones creativas que facilitara su consecución. La comunicación interna se ha descubierto como una colaboradora necesaria e imprescindible en la digitalización de las organizaciones y estimuladora de la creatividad y la innovación entre los empleados.
En los tiempos surrealistas que nos ha tocado vivir, nos encontramos que de un día para otro nos tuvimos que ir a casa a trabajar. Y nos surgen muchas preguntas ¿Estaban las organizaciones preparadas para ello? ¿Cuentan con herramientas y medios necesarios para comunicarse y dirigir a sus equipos con éxito? ¿Tienen planes de comunicación interna o al menos estructurada la comunicación con los empleados de su organización? La respuesta es que el 70% de empresas no estaban preparadas para afrontar la pandemia.
Pero, si algo bueno nos queda de esta pandemia mundial que estamos viviendo, es que la comunicación interna ha dejado de ser “esa gran desconocida”, para convertirse en una de las protagonistas indiscutibles en la supervivencia de las organizaciones, en tiempos de coronavirus.
Consejo: Diseñe un plan de comunicación interna en su empresa, su cuenta de resultados se lo agradecerá y sus colaboradores, mucho más.
Maite Arocas es CEO de la agencia Compás Comunicación, vocal de la Junta Directiva de Dircom Comunitat Valenciana y Región Murcia y delegada de Dircom en la Región de Murcia