La primera vez que la Tieta cruzó al OtroLado fue la última vez que aterrizó en la ZonaZero-BRX de forma convencional. Fue en el otoño del AñoZero, el año que llegó el virus al Territorio-Europa. Antes de salir del aeropuerto, el control médico le tomó la temperatura y le realizó un test PCR exprés. No pasaría mucho tiempo antes de que el control policial comenzara a rastrear de forma obligatoria con la app del móvil interoperativa a todos los viajeros que cruzaban las fronteras del espacio Schengen.
El Supervisor Europeo de Protección de Datos (SEPD) acababa de emitir unas orientaciones sobre el uso de controles de temperatura corporal por parte de instituciones, órganos, oficinas y agencias de la Unión en el contexto de la crisis de la covid-19, destacando que una evaluación cuidadosa y las garantías de protección de datos adecuadas eran estrictamente necesarias. El director del SEPD, Wojciech Wiewiórowski, reconoció que “los controles de temperatura corporal, utilizados como una medida adicional en la lucha contra covid-19, pueden implementarse a través de una variedad de dispositivos y procesos que deben estar sujetos a una evaluación cuidadosa” par garantizar la libertad e intimidad de los ciudadanos europeo, en aquel momento los más protegidos del mundo.
Algunos de estos procesos eran neutrales, mientras que otros podían constituir una interferencia en los derechos de las personas a la vida privada y/o la protección de datos personales. En principio, las comprobaciones manuales básicas de la temperatura corporal no estaban sujetas a la ley de protección de datos personales de la UE, por lo que debían cumplir los requisitos establecidos”.
Por ejemplo, no estaban sujetos a este Reglamento los controles básicos de la temperatura corporal que están diseñados para medir solo la temperatura corporal y que se operan manualmente y no van seguidos del registro, la documentación u otro tratamiento de los datos personales de las personas. El resto debían implementar salvaguardas de protección de datos adicionales minimizando la cantidad de datos personales recopilados. Además, el SEPD señalaba que los controles de temperatura que se llevaban a cabo de forma obligatoria no debían basarse únicamente en el procesamiento automatizado, sino que debía incluir participación humana y cumplir con la norma de necesidad y proporcionalidad.
“El objeto a proteger era el derecho del individuo a guardar la información sobre sí mismo en cualquier operación que se realice sobre sus datos personales, ya sea que por medios automatizados, como recopilación, registro, organización, estructuración, almacenamiento, adaptación o alteración, recuperación, consulta, uso, divulgación por transmisión, difusión o puesta a disposición, alineación o combinación, restricción, borrado o destrucción”. Esta última frase recogida en la SIM que me dejó la Tieta no acabo de entenderla. David, que es especialista en procesamiento de datos personales, me explicó que hubo un momento en que éstos pertenecían al individuo y al Estado, como garante de sus derechos y obligaciones.
Hubo un momento, poco después de que llegara ElCaos, en que LasTec tomaron el control de los datos, a través de las app de rastreo, ya obligatorias para viajar, trabajar, comprar, estudiar o entrar en las redes sociales -¡como si hubiese otra forma de relacionarse!-. Vaya, esto también se lo voy a preguntar a David… Fue poco antes de la implantación obligatoria del microchip obligatorio al nacer, que nosotros no tenemos al ser de la GeneraciónZero.
-¿Cómo te encuentras David? ¿Pasaste el control del eHealth? De lo contrario no podremos encontrarnos en la ZonaZero-BRX. Ha habido un rebrote en el territorio-Europa y LaGranFabrica ha incrementado las exigencias sanitarias. Mi PCR salió perfecto y tengo el permiso para autoconfinarnos. Visitaremos La Villa en cuanto pasemos la cuarentena. Sigo pensando que fue el lugar de encuentro de los que pasaron al OtroLado, sobre todo de Marc y la Tieta. Sigo vislumbrando la silueta de esa misteriosa mujer en su terraza y creo que tiene algo que ver con Alícia Espero que tu dolor se haya atenuado y que no tengas fiebre. Ya sabes…