VALÈNCIA. (EP). El líder de la Gürtel, Francisco Correa, ha insistido este martes ante el juez de la Audiencia Nacional José de la Mata en que él no era el que hacía los negocios de sus empresas en la Comunitat Valenciana, por lo que no conoce los detalles de los mismos, de modo que no ha señalado al expresidente Francisco Camps como la persona que habría ordenado contratar con la trama.
Según han informado fuentes jurídicas, Correa ha explicado, como ya hizo hace un año en el juicio por la financiación irregular del PP valenciano, que eran sus socios Pablo Crespo y Álvaro Pérez, 'el Bigotes', quienes se encargaban del día a día de la actividad de Gürtel en la Comunitat a través de la empresa Orange Market.
Así lo ha manifestado el líder de la trama corrupta ante el magistrado que investiga a Francisco Camps por presunta prevaricación administrativa y fraude a la administración por el contrato adjudicado a Orange Market para la instalación del estand de la comunidad en la edición de Fitur de 2009.
Correa, que ha comparecido como investigado y que, según las fuentes consultadas, no ha estado ante el juez más de 15 minutos, ha dicho que apenas conoce a Camps y que sólo coincidió con él en dos ocasiones: en la boda de Ana Aznar y en la de 'el Bigotes'.
La declaración de Correa este martes ha ido en una línea parecida a lo que ya manifestó hace un año en el juicio por la financiación irregular del PP valenciano, justo el mismo proceso que ha dado lugar a la imputación de Camps a raíz de las revelaciones que allí se hicieron, como la del ex secretario general del partido Ricardo Costa, quien apuntó directamente al expresidente como el que tomaba las decisiones.
Correa ha llegado a la Audiencia Nacional en furgón policial procedente de la cárcel de Valdemoro, donde cumple varias condenas que suman más de 70 años por tres juicios ya celebrados del 'caso Gürtel'. Está pendiente de otra vista oral por supuestos amaños en contratos con Aena, que aún se está celebrando.
Antes que el líder de la Gürtel ha comparecido, también como imputada, la ex directora general de Promoción Institucional de la Comunitat Valenciana Dora Ibars, quien ha afirmado que eran los técnicos de la Generalitat los que se encargaban de redactar los contratos públicos y que ella se limitaba a firmarlos, por lo que no conocía los detalles de los mismos, según fuentes jurídicas.