Insta a reunificar el centro derecha y ve este Congreso como el "más decisivo" de la historia por las incertidumbres que amenazan la democracia
MADRID, (EP). La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha instado a los suyos a trabajar para recuperar el voto perdido, el de los "españoles desengañados" que se quedaron en la abstención o se fueron a otro partido en las últimas elecciones para recuperar una mayoría que le permita gobernar sin depender de otros, porque no pueden "confiar" ni en el PSOE ni en Ciudadanos, cuyos votos necesita ahora para sacar adelante las políticas.
"No podemos confiar desgraciadamente que la izquierda vaya a obrar conforme a los intereses generales, a saber qué va a pasar con la socialdemocracia en España. Y no sabemos qué va a ocurrir con los nuevos partidos, si acabarán cansados de estabilidad y buscarán nuevas emociones", ha dicho Cospedal en su discurso en la jornada de cierre del XVIII Congreso Nacional del PP.
En este sentido, ha señalado que puede ser la "última vez" que puedan gobernar por un margen tan estrecho y ha afirmado que ahora los españoles tienen un "activo" que es la estabilidad política, social y económica. "En eso tiene mucho que ver el PP", ha precisado para acto seguido recordar que España estuvo a punto de tener un gobierno alternativo formado por el extremismo que "a bien seguro" hubiera conducido al país a "una gran crisis nacional".
Con estas incertidumbres, la secretaria general ha pedido a los 'populares' que trabajen para "recuperar la unidad del centro derecha español" y una mayoría holgada para gobernar. Su objetivo, según ha dicho es "aspirar a ser invencibles" porque son la "vanguardia" y considera que es "bueno para España".
Por ello, ha pedido a sus compañeros que "cuiden" de quienes han seguido confiando en el PP, que eleven su "techo" y su "suelo" y que no se conformen con menos. Para lograr este objetivo, considera que deben aprender de los errores, ser humildes y descubrir por qué mucha gente dejó de confiar en ellos. "Averigüemos qué les preocupa porque les necesitamos para que España no tenga que depender algún día de quienes pretenden poner fin a la larga historia de nuestra nación", ha advertido la recién reelegida secretaria general.
Y ha insistido en que, si desde el Gobierno se deben buscar acuerdos, como partido tienen que "trabajar para incitar entender para sumar, convencer y para ganar".
Cospedal ha recordado que había vivido muchos congresos del PP, unos con más expectación que otros, según ha relatado. Pero ha considerado de "enorme transcendencia" el que se clausura hoy porque de él tienen que salir preparados para las próximas elecciones autonómicas y locales de 2019. En este punto pidió a sus compañeros que no se conformen con mantener posiciones y que salgan a "ganar" para "devolver a la gente de este país los gobiernos sensatos que necesitan".
Pero también ha considerado este cónclave como el "más decisivo" de la historia del PP porque en estos momentos "la idea de democracia" en algunos lugares y con algunas personas "parece replegarse" ante las "incertidumbres y las amenazas".
Tras poner "a punto" el ideario del PP, ha reconocido que les llevará "meses e incluso años" en saber si han "dado en el clavo" del éxito y si han sabido adaptarse al signo que marcan los tiempos, si han "cogido el tren de la historia".
Relató las incertidumbres que tiene actualmente la sociedad, como el levantamiento de nuevos muros, la "barbarie" terrorista, el repliegue de un sistema liberal que dio paso a las décadas de más crecimiento, la creencia de muchos jóvenes de que van a vivir peor que sus padres o la de la generación mayor que teme por la cuantía de sus pensiones, sobre si el cambio tecnológico mermará las posibilidades de empleo o si se podrá mantener el crecimiento "de manera inclusiva".
Cospedal se mostró convencida de que con las ponencias que han aprobado en el XVIII Congreso del PP se da respuesta a estas "dudas" y ha advertido que si no se da respuestas desde el PP, "las darán por nosotros y algunos pretenden pescar en el río revuelto de la incertidumbre".
En este punto, puso como ejemplo que a 7 kilómetros de la Caja Mágica, donde se está celebrando el cónclave popular, se encuentra la "casta populista" y apuntó con ironía que luchan "por librar a la humanidad de de la maldición que es la prosperidad económica y el bienestar social". Aunque ha añadido que "en verdad lucha por librarse los unos de los otros", en referencia a la pelea entre Pablo Iglesias e Iñigo Errejón, aunque sin citarles expresamente.
Ha advertido también contra el nacionalismo que pretende "arruinar" la vida de muchos catalanes y "poner fin" a la convivencia común de todos los españoles.
Tras citar todas estas incertidumbres, la secretaria general ha asegurado que los miles de ciudadanos que "asisten atónitos a estos planteamientos" que ya "creían superados" quieren respuestas y para ello "miran" al PP porque, ha alegado, "no existe" otro partido u otra entidad en España capaz de "vertebrar el país" y capaz de tener un "auténtico liderazgo social".
En este contexto, María Dolores de Cospedal transmitió a sus compañeros la "responsabilidad" que se deriva del "liderazgo" que tiene el PP y avisó de que si no la ejercen "pagarán las consecuencias". Para ello les pidió que lleven a la práctica todo lo aprobado en el Congreso que hoy clausuran.
La secretaria general también dedicó unas palabras de elogio a su jefe de filas, Mariano Rajoy, al asegurar que el PP tiene la "suerte" de contar con el "primer activo diferencial, el mejor liderazgo y el mejor presidente". Dijo que si hay cargos que hacen al hombre, también hay hombres y mujeres que hacen al cargo y hoy, añadió, " el hombre con competencia, sentido común y altura de miras" y que ha "dignificado durante cinco años ese cargo" es Mariano Rajoy.
También se ha destacado la unidad y cohesión internas del PP, del que dijo que ha sabido "conciliar" los pensamientos "liberal y demócrata-cristiano", pero ha asegurado que han ido muchos más allá de las ideologías que representan.
Se trata, dijo, de un partido aglutinado en torno a un concepto cívico de nación, unido en torno a la idea de España, que cree en la Constitución de 1978 y avisó de que los principios siempre les "sacarán las castañas del fuego" y los que les llevarán a la "victoria".