Cuando Camilo Sesto se empeñó en estrenar 'Jesucristo Superstar' en España 

VALÈNCIA (EFE). Cuarenta y ocho años después de que Camilo Sesto hiciera historia tras adaptar la obra musical Jesucristo Superstar, una serie de ficción relata cómo el cantante levantó "uno de los proyectos musicales más grandes que ha tenido España" en un tiempo tan convulso como fue el final del franquismo. Camilo Superstar es el título de esta serie que llega este domingo a Atresplayer Premium : "no es un 'biopic' (película biográfica) ni una serie musical, es una ficción inspirada en él. Para ver a Camilo Sesto están sus vídeos”, dice a EFE el actor gallego Alejandro Jato, su protagonista. Lo que hace esta serie de cuatro capítulos es contar cómo Camilo Sesto levantó este proyecto en un relato que transcurre entre 1972 y 1976 y cómo la noche del 6 de noviembre de 1975, mientras los médicos alargaban la vida de Franco unos días más, en el Teatro Alcalá Palace de Madrid (actual Nuevo Teatro Alcalá) el artista se aseguraba un lugar en la historia de la cultura popular española tras haber movido cielo y tierra para sacar adelante ese musical.

A Camilo Blanes (Alcoi, Alicante, 1946) no le importaba demasiado la política, pero sí su carrera: “Puso toda su vida al servicio del arte; de hecho, él dice en más de una ocasión, si quieres conocer a Camilo Blanes, escucha las canciones de Camilo Sesto”, dice Jato. Quería que España cambiara, pero quería hacerlo a su manera, a través del arte, y de ahí su empeño por adaptar el musical que tanto le fascinó en su viaje a Londres. “Era una persona que viajaba mucho, veía mundo, veía como estaba la sociedad europea de avanzada, y luego volvía a España y la veía tan en blanco y negro por llevar una censura de 40 años muy fuerte. A las personas también se las moldea a través de la cultura y el arte, por eso también su empeño por hacer el musical en esa época", asegura Jato.

El espectáculo se convirtió en todo un éxito de público y se mantuvo en cartel durante casi cinco meses, hasta el 28 de marzo de 1976, cuando tuvo que finalizar para que Camilo Sesto atendiera los compromisos profesionales que había adquirido con anterioridad. El intérprete gallego ha tenido que moldear su acento para adecuarlo al del personaje que interpreta, lo que ha sido un reto ya que Camilo Sesto tenía un registro vocal "nada sencillo”, explica Jato, que ha tenido un profesor de canto para la serie. No obstante, señala que también han querido dejar "la huella de Camilo, por lo que algunas canciones de fondo o durante los ensayos es su voz real”, confiesa.