VALÈNCIA. Late to the party, el libro de la arquitecta María Aucejo (editado por Handshakes Books) sobre edificios futuristas que pertenecen a un pasado imprevisible, en lugar de leer se visita. Resulta una deriva entre formas geométricas más cercanas a la previsión astronómica que a la lógica arquitectónica. Referencias destino como las Bodegas Vinival, el pabellón de escultores de Lladró, la torre de control de Capitanía Marítima, el Mercado Costa Valencia, la Casa del Agua en el Túria, Pavimentos Guillén de Foios o el Estudio Andro, en Fuente del Jarro. Los puntos del tablero de lo imprevisto.
‘Sus’ edificios, los de Aucejo, acaban bailando. Celebran la persistencia del ser humano por ir más allá de lo obvio, de lo evidente. Son el combate contra el aburrimiento. También contra el aburrimiento arquitectónico. ¿Qué hace que una construcción como los estudios Andro esté en un polígono industrial?, ¿cómo el dome de Mercado Costa Valencia en el Puig se levantó con esa rimbombancia formal? La perseverancia de los minoritarios. En las páginas de Late to the party, parece que los edificios, como un Perseverance, vayan a tomar vuelo, a despegarse de su superficie en búsqueda de nuevos acomodos.
A partir de esa imagen, y de la complicidad de un pentágono de arquitectos y/o observadores urbanos, propusimos un juego. Qué edificio contraviniendo los cánones situarías, aunque fuera de manera provisional, en otra ubicación de la ciudad. La fantasía de tomar los complejos fijos por piezas móviles.
Cinco propuestas para mover de lugar cinco edificios.
María Aucejo, arquitecta
Estudios Andro on el Veles e Vents
“M'interessen els edificis que han quedat descontextualitzats pel creixement de la ciutat, de vegades aïllats enmig de barris que estan esperant que caiguen o enmig de camps de taronges que han aconseguit salvar-se. Crec que generen preguntes sobre el nostre entorn i el patrimoni que no sempre tenen resposta fàcil. Part del seu valor és l'entorn on estan i per això m'estic trencant el cap pensant on els canviaria.
Potser seria interessant moure els Estudios Andro i els seus ovnis a l'emplaçament del Veles e Vents, igual de extraterreste però molt menys divertit. Així els seus treballadors (als platós roden programes de tv, fan doblatges de películes...) estarien vora la mar en un entorn més agradable que el polígon i els visitants posarien en valor una obra d'un estudi local com GO.DB, els quals van tindre una evolució molt interessant, de pur racionalisme a la industrialització de cases modulars-ovni. 2x1!”.
Maria Donnini y Maria Grifo, arquitectas
El Teatro Rialto ambulante por toda la ciudad
“Si pensamos en una arquitectura que se mueve, inevitablemente nos viene a la mente Il teatro del mondo, el edificio flotante que Aldo Rossi proyectó para la Bienal de Venecia de 1979 en el que evocaba las representaciones teatrales de siglos pasados sobre el gran canal para el entretenimiento de la población y que se convirtió en una arquitectura efímera que podía transformarse. Trasladando esta idea a València, un edificio compacto con arquitectura escenográfica que cuidaba sus detalles interiores, que además estaba pensado para múltiples actividades y que desprende un halo de nostalgia, el original Teatro Rialto nos parece una opción bonita para trasladar la idea de un proyecto itinerante por toda la ciudad: su cafetería con las molduras ondulantes y entelados, la gran sala de fiestas, la fachada permeable al exterior… espacios como el río, l’horta o la playa serían los escenarios perfectos en los que nos imaginamos el edificio como un teatro ambulante”.
Milena Villalba, fotógrafa de arquitectura
La Ciudad de las Artes y las Ciencias diseminada a lo largo de todo el Túria
“Quizás, lo primero que viene a la cabeza son los edificios de la Ciudad de las Artes y las Ciencias. Los diseminaría por el antiguo cauce del río Túria, en lugar de que todos estuviesen en el mismo sitio. Pero bueno, esta no es una idea propia, si no que la he oído a diversos arquitectos y urbanistas de la ciudad, y con la cual estoy de acuerdo. Eso sí, sus nuevos entornos estarían llenos de árboles, bancos, césped y fuentes para que los disfrutasen las personas, no para que solo pudieses mirarlos o tomar fotos bonitas. Estaría muy bien poder bañarse en las láminas de agua de la Ciudad de las Artes y las Ciencias”.
Andreu Vélez, arquitecto
Estudios Andro en el Barrio de Tormos
"Creo que un buen lugar para realizar una intervención urbana de este calibre podría ser el Barrio de Tormos, más concretamente el descampado que funciona como un parking en la Calle del Canoner, siguiendo el Camí de Montcada. Sería perfecto para situar un equipamiento cultural: hay un instituto justo al lado, el parque de Marxalenes está cerca y la zona carece de edificios públicos que ofrezcan este uso. Además, la fachadas y las calles de este área agradecerían un edificio que aportara algo diferente, un ‘hito’ que dotara al barrio de un plus de identidad y carisma.
El mejor edificio de los expuestos en Late to the Party para cumplir este rol serían los Estudios Andro. Los ‘ovnis’ que se posan tranquilamente en la azotea rodeando al árbol central serían ideales para ser utilizados como salas de reunión por los colectivos del barrio y funcionarían como referencia. La cubierta podría usarse como espacio exterior separado de la calle e incluso podría plantarse vegetación. El resto de espacios interiores también podrían ser aprovechados para desarrollar distintas actividades culturales o vecinales. Los estudios Andro primero fueron estudio de fotografía y ahora son platós de televisión. En definitiva, me gusta imaginar un edificio llamativo y que todo el barrio pudiera utilizar en lo que ahora es un descampado, al lado de una alta chimenea octogonal.”
Pau Olmo, arquitecto
El Mercado Costa Valencia de El Puig en el Nou Mestalla
“Me interesa pensar en el propio traslado como una mudanza, que juega con la idea de que la historia no es algo que se coloca detrás de ti, sino una cosa que se impone delante: un eterno presente sobre el que trabajar.
Pero puestos a especular con la metáfora que propone el acontecimiento de la pregunta… Imagino a los ovnis de GO.DB en el Puig, o sus terrazas para los Estudios Andro aterrizar sobre el suelo de la explanada interior de las obras del Nuevo Mestalla, y en la danza del vehículo, -al igual que ocurre con la imagen del interior del libro, de la Future House de Matti Suuronenque -implicar la modificación de un paisaje ya demasiado rutinario, para ganarlo de nuevo a la ciudadanía”: