Cultura y Sociedad

propuesta improvisada a espaldas del sector

Això ho pague jo!: Rus lanza una televisión low-cost a la que la industria no le ve futuro

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VALENCIA. Las cuentas no salen. Al menos no a los profesionales de la industria audiovisual. Este miércoles está previsto que se publique en el Boletín Oficial de la Provincia el pliego de condiciones técnicas para el concurso convocado por la Diputación de Valencia para la emisión de información audiovisual en valenciano. La oferta del contrato es de 2,68 millones más IVA, es decir, más de 3,2 millones de euros, según confirmaron fuentes de la corporación. Teniendo en cuenta que el ganador del concurso deberá aportar 13 horas diarias de programación, la suma total de horas de televisión ascenderá a 4.745 horas anuales, por lo que la media de coste por hora de emisión ascenderá a 569 euros. Y eso sin contar el beneficio industrial del adjudicatario. En total la corporación invertirá 4,8 millones de euros si suma el contrato del primer año y la prórroga de seis meses.

"Van a reventar el mercado", dice el realizador Luis Lizarán, de la mesa sectorial audiovisual valenciana. Este miércoles también está previsto que se reúna este colectivo y Lizarán y otros responsables de la Mesav anticipan que se plantearán emitir un comunicado. Por el momento, Lizarán ya advierte de que estudiarán si cabe la posibilidad de iniciar medidas legales, es decir, impugnar el concurso, ya que de entrada creen que la Ley de extinción de RTVV impide cualquier tipo de televisión pública. "Veremos judicialmente cómo se sustenta", adelantaba.

Una opinión que no comparten juristas consultados, quienes hicieron ver que la ley se refiere únicamente a la Generalitat. Es decir, que por ahí la corporación encontraría un hueco legal para poder lanzar este proyecto de televisión, auspiciado directamente por el presidente de la Diputación, Alfonso Rus. Este personalismo, criticado por los profesionales de la industria, es admitido desde la propia institución donde reconocen que "sí, él quería hacer esto".

¿Y qué es "esto"? Esto en principio es un concurso por el cual la corporación oferta un contrato para la emisión de 13 horas diarias de televisión con un 90% de programación en valenciano. Las cadenas que aspiren a participar en el concurso deberán llegar al 95% del territorio de la provincia de Valencia. Este dato limita el concurso a sólo dos canales valencianos: Mediterráneo TV y el nuevo canal Beovisión que impulsa el empresario Ángel Raga.

Desde la corporación advierten que también podrían participar grupos nacionales como A3 Media o Mediaset, que quisieran dedicar uno de sus canales TDT en la Comunidad Valenciana a este efecto. Asimismo, critican el escepticismo de los profesionales del sector ya que, dicen, "el pliego se presenta este miércoles y hasta que esté publicado no pueden saber lo que contendrá". "Es un proyecto que se ha hecho con el apoyo de técnicos, es una televisión sostenible, dará empleo a unas 30 personas", insisten.

UNA PROPUESTA "LAMENTABLE"

No es esa la impresión que tienen entre los profesionales del sector donde califican la propuesta de la corporación de "lamentable" y recuerdan que se ha pergeñado todo a espaldas de la industria. Nadie sabe quiénes son los técnicos consultados. Todo, de hecho, se ha mantenido en secreto. Así, Lizarán señalaba este martes que la medida lanzada por la Diputación es "una manera muy triste de hacer frente a la situación de la industria audiovisual". En parecidos términos se expresan desde los productores, quienes aseguran que el único fin de esta televisión es la "propaganda" y a la que no le auguran ni una gran audiencia, ni un gran futuro.

Para ello ponen como ejemplo los costes de producción de algunos espacios. Así, un programa como Trau la llengua que presentaba Eugeni Alemany tenía un coste de entre 15.000 y 18.000 euros por capítulo, mientras que un programa barato y relativamente popular como Gormandía tenía un coste medio de 15.000 euros. Por su parte, las series de ficción como L'Alqueria Blanca tenía un presupuesto por capítulo de 70.000 euros. Las cuentas, insisten, no salen.

Desde la corporación no dan su brazo a torcer y recuerdan que el ganador del concurso deberá difundir los contenidos audiovisuales realizados por la propia corporación, que consisten básicamente en grabaciones de Rus inaugurando polideportivos, visitando obras o descubriendo placas; estas horas de emisión abaratarían los costes de producción.

Asimismo, explican que si bien el ganador del concurso tendrá que realizar unos informativos con conexiones locales, dar información del tiempo, ofrecer series ambientadas o vinculadas con la Comunidad valenciana, emitir conciertos de bandas y retransmitir fiestas locales, acontecimientos deportivos y todo tipo de ferias gastronómicas, de turismo, etc...  siempre contará con el apoyo de la corporación. "Se puede emitir en bucle, se podrán repetir contenidos, dispondrá de todo nuestro material", se justifican desde la Diputación.

Sus argumentos no convencen a los profesionales valencianos. El propio Ángel Raga cuando consiguió la adjudicación de los tres lotes de RTVV, ofertó un precio sobre 4.000 euros la hora y aquella propuesta ya fue considerada "temeraria" por la mesa de contratación. "Es absolutamente increíble que esto pueda funcionar de una forma normal y hayan contenidos mínimamente dignos", dicen.

La televisión autonómica más barata de España es la de Aragón, con unos costes de 6.000 euros la hora. "¿Que contenidos se pueden hacer por 500 euros la hora?", se preguntan. El sector, avanzan, estará muy expectante a todo lo que se haga en esta televisión y "se denunciará cualquier abuso que se realice y sueldos que no se ajusten a convenios colectivos de técnicos nacionales".

Es en ese contexto en el que los profesionales de la industria audiovisual valenciana consultados por ValenciaPlaza.com coinciden en destacar que se tratará de una televisión "sin mucho recorrido" ni futuro. "Durará lo que duré el contrato", explicaba este martes un productor valenciano. Es decir, se le da un margen de vida de 18 meses, ya que el contrato es por 12 meses, prorrogables otros seis. "¿Quién va a querer ver una televisión que se dedica a emitir todos los días a Rus inaugurando polideportivos?", se preguntaba este martes un productor valenciano. "Tendrá menos audiencia que Canal 9; si RTVV tenía un 3%, ésta no pasará del 1%. Es un despilfarro de dinero público para que Rus salga en la tele", concluía.

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