Daniel Fabra, director de la docuserie Som Coop de À Punt: “Elegir una cooperativa es apostar por condiciones laborales dignas"

28/11/2024 - 

VALÈNCIA. Daniel Fabra Rivas (1975), nacido en València, es un reconocido profesional del ámbito audiovisual. Con un máster en Dirección de Producción por la ESCAC, ha sido guionista, director de fotografía y productor ejecutivo de documentales y series como Parir en el siglo 21 (RTVE, 2020-2023), Crónica médica (À Punt Media, 2021) o La estrategia del silencio (Mediapro, 2017), entre otros.

Su proyecto más reciente, la docuserie Som Coop, es una iniciativa de la Federación Valenciana de Empresas Cooperativas de Trabajo Asociado, FEVECTA, financiada por la Conselleria de Educación, Universidades y Empleo, producida por Barret Coop. V y FEVECTA, con la participación de À Punt y el patrocinio de Caixa Popular. La serie, compuesta por siete capítulos, se adentra en el universo cooperativo de la Comunitat Valenciana, profundizando en 18 cooperativas, de las que pone de relieve sus historias humanas y empresariales. Aborda temas actuales como la precariedad laboral, la democracia económica y la crisis climática, mostrando cómo los principios cooperativos son herramientas para enfrentar estos retos sociales.

Los dos primeros capítulos de Som Coop están disponibles en apuntmedia.es, y el próximo sábado 30 de noviembre a las 12:30 horas se emitirá el tercer episodio dentro de la programación de À Punt.

¿Por qué consideras que era necesario hacer una serie sobre las cooperativas valencianas?

Existe un gran desconocimiento de lo que suponen las cooperativas valencianas y el cooperativismo en general. Posiblemente, este concepto se relaciona más al sector agrario, mientras que las cooperativas de trabajo asociado, que son las que profundizamos en la serie, son grandes desconocidas. Y es una lástima, porque suponen una gran opción de emprendimiento, y porque además están muy comprometidas con su entorno.

¿Qué tienen de particular?

Son empresas locales, con valores sólidos. Constituyen una opción muy válida para emprender o para que los trabajadores tomen las riendas de una empresa cuando el propietario decide cerrarla. En ese caso, es un plan para salvar la empresa y conservar los puestos de trabajo. Por otro lado, a la hora de crear una empresa de cero, a menudo se opta por una SL, que se basa en la aportación de capital, cuando muchas iniciativas podrían funcionar como cooperativas, pues están basadas en la aportación de trabajo. Además, muchas empresas ya funcionan bajo principios cooperativos, como la democracia interna o la formación, pero no utilizan esta fórmula.

"Las cooperativas son grandes desconocidas, pero representan una opción excelente de emprendimiento y compromiso con el entorno."

Tu productora, Barret, es una cooperativa ¿fue eso lo que te sedujo para desarrollar este proyecto?

Un motivo importante fue que las cooperativas, con independencia de los sectores en los que operan, nos permiten abordar temas de gran relevancia actual. Desde la igualdad de género hasta la lucha contra el cambio climático, pasando por la precariedad laboral, la formación de jóvenes o la inclusión. Poniendo el foco en las cooperativas podemos explicar problemas de nuestro tiempo viendo cómo estas empresas los abordan. Esto nos permite llegar a una audiencia más amplia, interesada en estos problemas, aunque no tengan por qué estarlo en las fórmulas empresariales.


Entrando ya de lleno en la serie ¿cuánto tiempo les llevó la realización de una serie de estas características?

La idea surgió tiempo atrás, pero la producción comenzó en enero de este año y los trabajos de postproducción y entrega final se completaron en septiembre. Ha sido un trabajo documental muy satisfactorio. Contar con FEVECTA como socio y promotor del proyecto facilitó enormemente las cosas: nos abrió puertas, estableció contactos clave y redujo los tiempos para generar confianza con los participantes. Esto permitió que, desde el día uno, estuviéramos rodando secuencias válidas, acortando los plazos en comparación con otras producciones que pueden extenderse hasta dos años. Por ejemplo, si necesitábamos documentar una empresa que ayuda a otra a salir adelante, FEVECTA identificaba rápidamente el caso adecuado y facilitaba el contacto. Así ocurrió, por ejemplo, con Equitec, una empresa que transforma furgonetas en vehículos policiales o ambulancias.

"Nuestra intención no era explicar conceptos teóricos, sino contar historias humanas que conecten con la audiencia". 

¿Qué enfoque le han dado a la serie para tratar de enganchar con la audiencia?

Pensamos que la mejor manera de explicar qué es una cooperativa es a través de historias personales. Esto nos lleva a contar historias de personajes porque pensamos que es lo que puede generar más empatía. Las entrevistas se han minimizado para dejar que sea la secuencia la que lo explique. Hicimos las entrevistas desde un punto de vista personal, huyendo de la explicación de conceptos teóricos. Buscamos vivencias personales dentro de la cooperativa, no es una serie de conceptos. Queríamos usar las cooperativas para abordar temas de interés, desde la economía circular o las energías limpia hasta la violencia de género, entre muchos otros.

¿Con qué te gustaría que se quedara la audiencia?

Me conformaría con que se llevaran esta idea: son empresas muy vinculadas a lo local, muy implicadas con su entorno. No se van a ir, porque eso iría contra su propia esencia. Simbolizan una protección para la sociedad, algo que demostraron durante la pandemia del COVID y ahora con la DANA. Son empresas que se han volcado, están continuamente atendiendo y canalizando peticiones en todos los ámbitos de una manera brutal. Aunque muchas otras empresas también lo hacen, el espíritu de colaborar está profundamente arraigado en el ADN de las cooperativas. Ojalá esto cale en la audiencia porque cuando haces una opción de consumo, si podemos incorporar esto como un criterio para ayudar a que ese tejido sea más fuerte, es algo que redunda en beneficio de toda la sociedad. Elegir una cooperativa es una garantía de que los trabajadores tienen condiciones más que dignas de trabajo, porque es su propia empresa, pero además van a revertir en su entorno social, económico, ambiental.


¿Cómo hicieron la selección de las cooperativas que finalmente integran la serie?

Finalmente nos quedamos con 18. Al principio sí que estábamos obedeciendo a una lógica de distribución entre criterios como grandes y pequeñas, porque por una parte queríamos mostrar la potencia del cooperativismo en Valencia, pero también exponer casos de cooperativas que son de tan solo dos socios, por ejemplo. Otro criterio era mostrar cooperativas antiguas, en procesos de renovación, pero también queríamos hablar de cooperativas que acaban de empezar, constituidas por jóvenes. De alguna manera esto ya ayuda a cribar cuando tienes que elegir entre dos opciones. Por otro lado, había que buscar elementos narrativos. En algún caso hemos elegido nosotros como productora, entre un abanico de opciones que había, en función de qué empresa iba a comunicar mejor. También según el proceso en que estaba inmerso, que podía ser otro aspecto interesante. La verdad es que no ha sido complicado elegir las que están, lo difícil fue el descarte, porque se presentaron muchas opciones.

"Sin televisiones públicas como À Punt, proyectos como 'Som Coop' no tendrían sentido; necesitamos ese equilibrio"

Comentas que las cooperativas podrían ser consideradas grandes desconocidas. ¿Podemos entender este tipo de series un ejemplo de servicio público, en este caso a través de À Punt?

Así lo considero. Hacemos la serie con toda la pretensión de que sea entretenida, pero sin televisiones públicas no tendría el más mínimo sentido. Para las plataformas, que obedecen a su algoritmo de programación y a los intereses de una televisión de pago, no son contenidos que les interesen. Es tan lícito una cosa como la otra, pero es verdad que necesitamos el equilibrio que ofrece contar con medios públicos que puedan prestar este servicio. Después es nuestra obligación no rebajar ni la calidad narrativa ni la calidad técnica para que sea un producto igualmente entretenido, que pueda atraer audiencia. Además, es una serie que solamente tiene sentido en el marco de la televisión autonómica. Podemos acudir a TVE para muchas producciones cuando tienen un carácter universal, pero si todos los elementos son valencianos no es una historia universal, se convierte en una historia valenciana, que es justo lo que buscábamos, porque creo esta identificación de las cooperativas se hace desde la proximidad.


Tras la producción de la serie, ¿ha cambiado en algo tu opinión sobre el cooperativismo?

Ha cambiado mucho y para bien. Hemos aprendido muchísimo, porque nuestra cooperativa es pequeña, de entre tres y seis socios. Ver lidiar a las grandes, que con centenares de trabajadores son capaces de mantener su esencia de cooperativa es sorprendente. Pasan las décadas y el espíritu se mantiene, prevaleciendo a los trabajadores iniciales y a los fundadores. Considero que tiene un montón de mérito, creo en mantener esos valores.


Si te pidiera tres valores concretos que los trabajadores de las cooperativas pueden trasladar a la sociedad valenciana, ¿qué me dirías?

El primero, la gestión democrática. En una cooperativa las cosas se ven siempre desde un montón de puntos de vista, se van a discutir, se buscan soluciones, votando si no hay más alternativa, pero muchas veces por consenso. Porque es una democracia que no está posicionando al otro enfrente, se abre un proceso de investigación, se debaten alternativas, se valoran y lo más importante, se hace sin crispación.

El segundo, la preocupación por la comunidad. Es algo que está en el ADN de una cooperativa, no permanece impasible ante un problema que acontece a su alrededor. Lo estamos viendo con la DANA, lo vimos con el Covid y siempre va a ser igual. Se movilizan y se vuelcan con los problemas de los demás.

El tercero sería la Intercooperación. Cuesta ver en la sociedad que las empresas colaboren en vez de competir, que sean capaces de complementarse, y sin embargo es algo bastante habitual en el mundo cooperativo. Nosotros lo vivimos durante el accidente del metro, éramos capaces de colaborar distintas productoras velando principalmente por el interés de la audiencia, para que le llegara la mejor información posible y con el mayor rigor.

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