VALÈNCIA. El Centre del Carme Cultura Contemporània (CCCC) presenta seis comedias de Francia, Chipre, Italia, República Checa y la Antigua República de Yugoslavia en la cuarta semana del ciclo de cine de verano CCCCinema d’Estiu, que celebra su quinta edición bajo el título ¿De qué nos reímos en Europa?. Entre el 3 y el 31 de agosto, de martes a domingo, a las 22:00 horas el claustro gótico del antiguo convento se convierte en un cine de verano en el que disfrutar, de forma gratuita hasta completar aforo, de una cuidada selección de comedias europeas.
La cuarta semana del ciclo presenta seis cintas donde la conciencia política en diferentes periodos históricos de los últimos 100 años es la gran protagonista de las mismas.
Programación del 22 al 27 de agosto
La francesa La vie au Ranch (2009) es la película que será la encargada de abrir la cuarta semana de CCCCinema d’Estiu el martes 22 de agosto. El Rancho del título es un piso parisino situado en la orilla izquierda donde se reúne una variada fauna estudiantil. Sin encuadres precisos o grandes movimientos de cámara, la cineasta Sophie Letourneur entra de lleno en fiestas y raves, sin que surja una trama o destaque algún personaje. La directora registró improvisaciones de los actores que se oían claramente y seguidamente las mezcló creando una banda sonora de grupo mayoritariamente femenino, algo confusa y caótica de un mundo que desaparece, pues cada estudiante debe separarse y escoger su destino.
Smuggling Hendrix (Chipre, 2018), -la película de Marios Piperides- transcurre casi toda en Nicosia, la última capital del mundo dividida. La parte sur es chipriota; la norte, turca. Los personajes pasean por un territorio desgarrado, fragmentado desde la invasión turca de 1973 en busca de Jimi, el perro del protagonista. Condicionados por la misma frontera absurda, surge la empatía entre personajes de este tiempo que siguen enfrentados artificialmente por la historia. Este filme inédito en España, que conquistó al público y la crítica en grandes festivales como el de Tribeca, llegará al Centre del Carme el miércoles 23 de agosto.
Al día siguiente, el jueves 24 de agosto, la acción de Ko to tamo peva (Línea no regular, 1980) transcurre el 5 de abril de 1941, un día antes de que los nazis bombardearan Belgrado. Y hacia allí precisamente se dirige en un autobús un conjunto muy variado de caracteres de la época. En algunas escenas de esta obra maestra de la Antigua República de Yugoslavia, se ve a una anciana vestida de negro sentada en el asiento trasero. Nadie habla con ella, no interviene en la película y no aparece en los créditos finales. El director Slobodan Sijan afirma que representa la muerte y la tragedia de la guerra que se avecina. En 1996, los miembros de la Academia Yugoslava de Artes y Ciencias Cinematográficas (AFUN) votaron esta película como la mejor película serbia realizada en el periodo 1947-1995.
En la italiana Sogni d’oro (1981), Michelle Apicella es el trasunto perfecto de Nanni Moretti. En su tercer largometraje, programado para el viernes 25 de agosto, el propio Moretti encarna a Apicella, un cineasta tan ególatra como frustrado, violento pero incapaz de imponerse a un equipo y llevar a cabo su visión. Como en Aprile o Il Caimano, Moretti aborda aquí un tema recurrente en su filmografía: el de la película imposible de hacer. Pero antes vierte su mirada sobre aspectos del mundo del cine que no suelen ser retratados: las presentaciones en público, la relación con los productores, la frustración creativa, la incomprensión de la crítica o los efectos de su oficio en sus relaciones íntimas y familiares.
El título de Postriziny (Tijeretazos, 1981) se refiere a los tiempos cambiantes, a medida que las distancias entre ciudades, naciones, culturas se acortan. A diferencia de Milos Forman o Ivan Passer, el autor de este filme, Jirí Menzel, permaneció en la República Checa después de que los tanques rusos la invadieran, y allí, gracias a que cultivó un humor físico y visual que se podía entender al margen de su contexto político, logró fama mundial. Esta obra divertida y sensual, que se verá en el CCCC el sábado 26, versa sobre los orígenes del escritor Bohumil Hrabal, cuyos padres vivían en la ciudad provinciana de Nymburk, dominada por la cervecería local.
Como broche de oro, el domingo 27 de agosto se rescata la obra maestra de Pierre Étaix Yo-yo (1965) donde el propio director interpreta a un aristócrata rico y crónicamente aburrido que lo tiene todo excepto el afecto de una mujer que una vez conoció íntimamente. Étaix fue quien mejor entendió que toda esa tradición burlesca del cine cómico mudo es herencia del circo y de la comedia de payasos. Federico Fellini lo admiraba y en I Clowns (1970) lo presentaba como el único payaso cineasta.
Las películas de CCCCinema d’Estiu se proyectan del 3 al 31 de agosto, de martes a domingo a las 22:00 horas en el claustro gótico del CCCC, en versión original subtitulada en castellano y valenciano. El acceso es gratuito sin necesidad de reserva previa, hasta completar aforo.
Las personas que acudan con antelación van a poder disfrutar cada noche, justo antes de la proyección de la película, de dos episodios de la primera temporada de CCCC Stories, la primera serie de ficción producida por el CCCC, rodada y ambientada íntegramente en un centro de arte contemporáneo.