VALÈNCIA. El tirón del ecommerce en estos últimos años ya había obligado a los grandes operadores a repensar sus modelos de venta. Una transformación que en el último año se ha acelerado como consecuencia de la pandemia y el auge del comercio online. Unos pedidos que han aumentado de forma considerable aflorando nuevos formatos de tiendas. Y, entre ellos, uno de los modelos que ha cogido protagonismo entre las grandes cadenas de supermercados son las 'dark stores', tiendas que se reconvierten en almacenes de operaciones destinados a la preparación y envío de las compras online.
Se trata de un formato que ya ha irrumpido en España con fuerza, especialmente por parte de alguna cadena. Este es el caso de Dia que cuenta a nivel nacional con una amplia red de 14 'dark stores' o tiendas fantasma, como también se les conoce, pues no tienen clientes ni cajas y su actividad está básicamente destinada al comercio online, en concreto, al click and collect para los pedidos por Internet. De hecho, la compañía ya manifestaba su que valora implementar este formato de tienda en la Comunitat Valenciana para poder dar un mejor servicio online con distintas empresas que operan a nivel ecommerce. En muchos casos, estos negocios se ubican en las ciudades para mejorar el tiempo de las entregas y estar más cerca del consumidor.
"Las dark stores surgen como una oportunidad de reconversión de las actuales tiendas de venta al público hacia tiendas escaparate donde la mayor parte de superficie de venta al público, o en ocasiones hasta su totalidad, se ha transformado en un almacén para la distribución de última milla", explica Jesús Fajardo, gerente de la consultora TPF Consulting. "Cada compañía, y más dentro del reparto de paquetería, está evolucionando sus modelos con el fin de dar respuesta a la demanda de los consumidores: rapidez en la entrega", Subraya.
Y es que, apunta que muchas empresas cuentan con activos inmobiliarios sobredimensionados para la demanda actual de compra en físico, lo que constituye una oportunidad de transformación hacia este formato. Así, muchas compañías han readaptado sus tiendas físicas. En este sentido, El Corte Inglés anunciaba recientemente que transformará su tienda en Eibar en una 'dark store' para convertirla en un gran centro de preparación y distribución de pedidos de alimentación para el comercio electrónico, que dará servicio a Bizkaia, Gipuzkoa y Álava. También Mercadona se sumaba a esta tendencia hace años con sus 'colmenas'.
"El máximo exponente de este negocio ha sido El Corte Inglés a nivel nacional, potenciando sus modelos de compra online o recogida click and car en tienda con la ventaja competitiva que les supone las inmejorables localizaciones de sus almacenes a nivel peninsular", puntualiza Fajardo.
Aunque no es un modelo nuevo, lo cierto es que ha experimentado un tirón ante el crecimiento del ecommerce por la pandemia y estas tiendas ofrecen grandes ventajas a los operadores. "Son menos costosas de operar, no solo porque están ubicadas en áreas de alquiler más baratas, sino también por el costo reducido de preparación en comparación con los supermercados tradicionales. Una dark store en la tienda le cuesta a una empresa alrededor de 10 euros , que es significativamente más bajo que el costo de 15 euros por pedido de comestibles recogido en una tienda tradicional", señala Alberto Larrazábal, director nacional Industrial y Logística CBRE España.
Además, asegura que su auge también se explica por la propia influencia y desarrollo del comercio online. "Las nuevas generaciones son más digitales y gastan menos tiempo en hacer la compra. La demanda de estos establecimientos ha aumentado dado su desarrollo exponencial con motivo de la pandemia", incide Larrazábal, quien destaca el abaratamiento de costes, rapidez, flexibilidad y adaptación al nuevo mundo digital como algunas de las ventajas que este formato ofrece a las empresas.
En el caso de València, según el gerente de la consultora TPF Consulting, en un corto periodo de tiempo podría producirse la reconversión de espacios como pudiera ser el aparcamiento del Centro Comercial Gran Turia para la distribución. Y es que, aunque con mayor arraigo en Madrid y Barcelona, València tiene potencial. "La ciudad tiene varios locales vacíos que pueden dar sentido a los mismos y tiene buenas conexiones en general para poder realizar dicha actividad. Si bien es necesario hacer un protocolo de actuación para no crear problemas de tráfico, descargas ilegales", puntualiza el director nacional Industrial y Logística CBRE.
Por el momento, son las grandes compañías las que han puesto el foco en este formato por el gran volumen de pedidos que mueve. "Se están viendo operaciones de manera muy activa con aperturas elevadas en la Comunidad Valenciana, especialmente Dia y Mercadona están muy activos y con aperturas claras que pueden mejorar el servicio de sus empresas", comenta Larrazábal.
Eso sí, también implica un importante reto de movilidad para la entrada de camiones para el reparto que los hagan compatibles con las normativas municipales. Las empresas minoristas con dark stores suelen operar flotas de camiones ligeros para entregar los pedidos realizados en línea, especialmente en las zonas urbanas interiores, para evitar interrupciones en las operaciones de las tiendas. "Se trata de un modelo en constante evolución, en el que día a día las compañías trabajan para dar respuesta al crecimiento exponencial en el reparto a domicilio por la compra online", concluye Fajardo.