Desayuno electoral 28M con el candidato de Cs al Ayuntamiento de València, Fernando Giner
Desayuno electoral 28M con el candidato de Cs al Ayuntamiento de València, Fernando Giner
Desayuno electoral 28M con el candidato de Cs al Ayuntamiento de València, Fernando Giner
VALÈNCIA. El portavoz municipal y candidato de Ciudadanos a la Alcaldía de València, Fernando Giner (València, 1964), fue el segundo protagonista invitado en la ronda de encuentros electorales que está organizando Valencia Plaza con el objetivo de conocer las propuestas y prioridades de los distintos partidos y candidatos a alcanzar la vara de mando del consistorio. El formato del encuentro que se utilizó, tal y como viene siendo habitual, fue un desayuno en el céntrico restaurante Al Pomodoro, sito en la calle del Mar, en el que participaron redactores del periódico y colaboradores que plantearon diferentes cuestiones de la agenda política en la capital.
Giner, pese a las dificultades que atraviesa su partido en la actualidad, aseguró presentarse "con la ilusión del primer día". "Veo nuestro proyecto más necesario que nunca. Ninguna de las 70.000 personas que nos votó hace cuatro años podrá decir que se ha sentido defraudada con el trabajo que estamos haciendo en la ciudad de València", aseguró durante el encuentro, si bien admitió ser "realista" respecto a un posible trasvase de voto al PP de sus simpatizantes.
Preguntado por el portazo dado por la exconcejal de Cs Rocío Gil días atrás, que se marchó criticando a la formación naranja para incorporarse a renglón seguido a la candidatura del PP, Giner fue categórico: "Cada uno pone su nivel moral donde puede o donde le han enseñado. Lo que han hecho Cantó, Merino y Gil es totalmente incomprensible para mí, y una muestra de dónde están las lealtades de cada uno", comentó, para poner también el foco en las formas. "Yo puedo entender que alguien pierda el interés por un proyecto, pero lo normal es que uno se vaya a su casa. Lo que es reprochable es que se hayan ido dando un portazo e intentando hacer el máximo daño posible al partido que los ha puesto durante años en el mapa político. Cada uno se puede ir donde quiera porque todos somos libres, pero son las formas las que demuestran el verdadero interés de las personas", sentenció.
El candidato de Cs reivindicó durante el desayuno su intención de "bajar los impuestos el equivalente al remanente líquido de tesorería". "El nivel de ejecución de las inversiones es del 30%, siempre acaba sobrando dinero. Este año estamos hablando de 80 millones de euros y en inversiones para este ejercicio hay programados 245 millones. Al ritmo de ejecución que hay es imposible que se lo gasten, por lo que creo que ese dinero sobrante debe estar en el bolsillo de los valencianos. Así que hay que bajar impuestos o devolver lo que se ha sido incapaz de gestionar", explicó, para reflexionar que podría abordarse una deducción aplicable al tipo de IBI.
Ciudadanos propone eliminar la ORA en toda la ciudad de València
En esta línea, Giner subrayó que, a su modo de ver, hay dos impuestos que "sobran en cualquier ciudad del siglo XXI". "Uno es el de plusvalía: no hay derecho a que se penalice el ahorro. Es un castigo a las clases medias y yo lo bonificaría al 100%. El segundo que yo revisaría es el de la ORA. La recaudación neta es de unos 5 millones y mi propuesta es suprimir los tramos que se han ampliado y, en 2026, que es cuando caduca la contrata, la eliminaría".
Respecto a la Empresa Municipal de Transporte (EMT), el candidato de Ciudadanos se mostró muy crítico con la gestión del alcalde Joan Ribó y en particular del concejal del área, Giuseppe Grezzi. "Es una empresa quebrada y por lo que ha habido que meterle 30 millones de euros este año", subrayó, para recordar que todos los ejercicios se le ponen "110 millones de euros". "Obviamente, algo se está haciendo mal cuando inviertes ese dinero y tienes, lo digo como usuario, frecuencias a veces de líneas de 15 o 20 minutos y peores en fin de semana", incidió.
En este sentido, Giner se muestra "a favor" de "intervenir" la empresa y que fueran "los altos funcionarios del Ayuntamiento quienes la gestionaran". "Si tienes un organismo autónomo, en este caso una sociedad pública, lo creas para gestionar mejor, pero no está funcionando, sobra la empresa y todo el equipo directivo", sentenció, para recalcar además su idea de otorgarle una "visión metropolitana".
En cuanto a la movilidad, Giner se mostró temeroso de cómo pueda gestionar el gobierno de izquierdas la zona de bajas emisiones. "Si Grezzi sigue siendo concejal y lo decide él, no entrará en València ni un coche", comentó el candidato de Ciudadanos. "Estoy de acuerdo en fomentar un uso racional del vehículo y también en apostar por el transporte público pero, ¿qué hacemos con la gente que vive y trabaja o trabaja y vive en el área metropolitana y que necesita desplazarse y no tiene otra opción? Creo que a esta ciudad, en el concepto de movilidad, le ha faltado mucha visión metropolitana", explicó.
En esta línea, Giner recalcó que los comercios y negocios de la ciudad "necesitan el flujo de gente del área metropolitana". "Las restricciones del tráfico hacen que la gente del área metropolitana no venga y el centro de la ciudad se convierta en un parque temático, lo que promueve un turismo de masas que es el que Ribó dice rechazar. Si nos descuidamos, el centro de la ciudad se llenará de franquicias", reflexionó el portavoz de Ciudadanos, quien además se posicionó en contra respecto a las multas a través de cámaras en la ciudad.
"Tenemos que cumplir los objetivos de la Agenda 2030, pero a la gente no se le pueden pedir imposibles. El coche no puede desaparecer de la noche a la mañana: es muy bonito decirlo, sí, pero no es real. Son temas que deben abordarse con más sentido común y planificación y menos ideología. Ya está bien de esta València del 'pensat i fet'", subrayó Giner.
Uno de los temas de interés en la ciudad es el modelo desarrollado por el gobierno de Compromís y PSPV sobre la calle Colón. Giner prefiere utilizar el tema "repensar" que "revertir". "Hay que ir a una València del 2030 y yo en cierta medida coincido con el camino que ha adoptado el alcalde. Ahora bien, no con ideología, sino con sentido común. Entiendo que la calle Colón debe ser una gran calle comercial y, para eso, me parece importante el ancho de las aceras y darle protagonismo a la peatonalización. Ahora bien, estoy defendiendo mi propuesta de dos horas de parking gratis para personas que van a comprar, por ejemplo. Así que estoy a favor de que entren coches al centro pero también estoy de acuerdo con lo que defiende Compromís de que esa calle no puede ser un atajo para el tráfico", analizó.
En cuanto a la designación de València como Capital Verde Europea, el candidato de Ciudadanos expresó su apoyo a la iniciativa y expuso, a su juicio, cuál es la clave medioambiental para la ciudad en el medio plazo. "La clave es el soterramiento de las vías a través del túnel de Serrería. El objetivo debe ser que tú puedas ir paseando o en bici desde la huerta de Alboraia hasta El Saler y que puedas volver, y llegar desde el mar hasta Villamarchante por el antiguo cauce del Túria. Eso no lo tiene ninguna ciudad y nosotros nos lo podríamos permitir", señaló, para puntualizar, no obstante, que ese proyecto debe ser costeado por las autoridades locales según se acreditó en un informe del Gobierno central en la época de Mariano Rajoy.
Sobre esto, Giner cree que el proyecto es "viable". "La parte del soterramiento está estimada en unos 80 millones de euros. Este ayuntamiento tiene este año 245 millones para invertir y no se ejecutan en su mayoría; yo creo que sí se puede hacer. Los ciudadanos están pagando unos impuestos para inversiones que no se hacen y precisamente esta es clave", relató, quien se mostró favorable además de incluir el PAI del Grao dentro del proyecto de soterramiento.
Respecto al debate sobre la tasa turística, que los ayuntamientos que lo deseen podrán poner en funcionamiento en diciembre de este año, Giner se posiciona firmemente "en contra". "Creo que se puede optar estratégicamente por un turismo de calidad, turismo de congresos, turismo de ferias y un turismo que tenga mayor nivel adquisitivo. Yo no quiero tampoco un turismo de masas porque al final va a molestar a los vecinos. Pero la tasa no arregla nada y conceptualmente es que estoy en contra de los impuestos", argumenta el portavoz de Ciudadanos, quien lamentó además la poca proyección turística que a su juicio se le da a Feria Valencia, al Palacio de Congresos, a la Ópera...
"Creo que no hay una estrategia de turismo que esté potenciando un turismo de calidad y que esté aprovechando todas las herramientas y posibilidades que tiene la ciudad", reflexionó, para lanzar finalmente una pregunta: "¿Creéis que esa tasa de un euro por noche es diferencial para las cuentas de un ciudad con un presupuesto de 1.200 millones de euros?".
En cuanto a su posición respecto a los pisos turísticos, que se han convertido en un objeto de debate en la ciudad, Giner puso el acento en la importancia del ayuntamiento como actor principal a la hora de "gestionar la convivencia". "Por un lado, yo dejaría muchísima más autoridad a las comunidades de vecinos pero, al mismo tiempo, como alcalde tendría la obligación de dar seguridad jurídica a quien ha invertido o a quien va invertir", subrayó, para puntualizar que no vería lógico "cambiar las reglas del juego de repente a una persona que ya ha invertido".
"Hay que comprender que todo el que tenga una licencia antes del 2018, pues ya la tiene. Eso sí, si una comunidad de vecinos se me queja de esa persona que tiene la licencia, aunque sea antes del 2018, se la quitaremos. Tenemos que combinar, la seguridad jurídica con la convivencia", expuso Giner.
Giner, también puso negro sobre blanco su postura sobre el futuro de la Marina de València y los pasos dados por su grupo municipal respecto a este espacio. "El Consorcio hay que liquidarlo, porque puede ser que hasta se esté incurriendo en fraude de ley, y hay que crear un nuevo Consorcio con la Autoridad Portuaria", subrayó, en primer lugar.
Además, el candidato de Ciudadanos apostó por distinguir lo que es "un espacio público para esparcimiento" y la zona dedicada a "generar negocio" que, a su juicio, debería ser un "ecosistema tech" con las startups que se están desarrollando allí y nuevas incorporaciones. "Lo que debemos evitar es que se nos vaya nadie", comentó Giner, quien se mostró muy insistente en la importancia de dar "seguridad jurídica" a las empresas.
En cuanto al ecosistema emprendedor valenciano, el portavoz naranja propuso encargar a Valencia Startup un plan estratégico de innovación. "Hay que coordinar todos los organismos y ver si alguno sobra. Tenemos la Marina, tenemos Las Naves, tenemos Smart City, tenemos Valencia Tech... creo que todo eso tiene que estar dentro de Valencia Activa y coordinado", comentó, al considerar que carece de sentido que la gestión de la innovación descanse sobre varios organismos.
En este línea, el concejal se mostró favorable a crear una delegación dentro del consistorio sobre Inteligencia Artificial. "Tenemos que ser punteros en ese aspecto como ciudad", aseveró.
Respecto al uso del antiguo edificio de los Docks para la instalación de un almacén de datos, Giner se mostró contrario a ese uso para el recinto en un área destinada a un ecosistema tech y lo calificó como una cuestión de "cabezonería" del alcalde. "Hay mil sitios donde podría ir. Es otra muestra donde se impone la ideología y no el sentido común", zanjó.
Otro de los asuntos candentes a lo largo de toda la legislatura en el ayuntamiento ha sido la ampliación norte del Puerto de Valencia. Durante la cita, Giner mantuvo la posición que ha defendido a lo largo de estos años: "Hay que acabarla. Si esta pregunta me la haces en 2009, pues igual entonces tomaría una decisión determinada. Ningún informe dice que acabar esa obra suponga perjudicar a las playas del sur. Es decir, lo que se tenía que perjudicar, ya se ha hecho. No puedo estar en la tesis de Compromís de deshacerlo todo", explicó, si bien retó al alcalde a que demostrara que los pasos restantes en la ampliación perjudicarían a las playas: "Si alguien me demuestra lo contrario, cambiaría de opinión", zanjó, para mostrar sus dudas respecto al acceso norte: "Esa solución necesita una postura que se madure mucho, porque mandar todo por camiones a la AP-7 también me parece una barbaridad", reflexionó.
También respondió el candidato de Ciudadanos respecto a la seguridad en València. El portavoz naranja puso el acento en la "inseguridad estadística" y la "inseguridad percibida". "Somos la segunda ciudad con más delitos de España por detrás de Barcelona y la ciudad donde más crece, según datos del ministerio", subrayó, para destacar que, a su juicio, hay barrios donde la gente "se siente insegura". "Hay zonas del Cabanyal, la Malvarrosa, Orriols, Pla del Remei... donde existe esa sensación", enumeró.
Para resolver el problema, Giner, además de ampliar el número de efectivos policiales, pone sobre la mesa la posibilidad de establecer puntos SOS y también, especialmente para la gente mayor y dependiente, implantar pulseras que conecten directamente con emergencias o con la policía, con la idea de que puedan servir tanto para situaciones de salud como de seguridad.
Sin duda, uno de los asuntos también de la legislatura y de la década es el inacabado nuevo Mestalla y la relación de las instituciones con el club. Giner se pregunta si el gobierno municipal oculta algo. "Nosotros hemos pedido un expediente para ver por dónde van los acuerdos que en ocasiones han anunciado. Pero no hemos recibido nada y parece que es no hay ni un sólo papel de esto, así que no sé si nos ocultan información o es que directamente no hay nada", comentó, para apostillar que en esta cuestión "sobran reuniones y faltan soluciones".
En cuanto a su propuesta, el candidato de Ciudadanos tiene claro que el estadio "hay que acabarlo". "València, los valencianistas y los valencianos no se merecen lo que tenemos a la salida de la pista de Ademuz. Es una auténtica vergüenza. Entonces yo me comprometo a acabarlo. Aunque de entrada fuera municipal, estaría dispuesto. Eso sí, al final tiene que ser de los valencianistas el estadio. Pero lo que quiero es desatascar esa situación", proclamó, en lo que sería una operación donde el ayuntamiento tendría temporalmente la propiedad del estadio y lo arrendaría al club.
Esta ha sido una de las propuestas de Giner en los últimos meses. "Si Málaga tiene un museo Picasso, ¿por qué València no puede tener un museo Sorolla? ¿cuántas obras de Sorolla hay dispersadas en la ciudad de Valencia? Entre público, privado, la Fundación Bancaja... ¿Por qué no las aunamos todas en un centro? ¿Por qué el museo de Sorolla está en Madrid, no está en València? Habría que hacer un esfuerzo de reunir las obras, pero se podría hacer", comentaba el candidato de Cs, quien apuntó como posible ubicación el Palacio de Montortal, de reciente adquisición municipal.
Preguntado por algunas cuestiones simbólicas impulsadas por el gobierno municipal de Ribó, el candidato de Cs admitió que su criterio sería distinto. "Desde el punto de vista institucional, yo no recibiría a las Reinas Magas, para mí no es una tradición aunque se haya revestido así ahora", apuntó, para hacer una reflexión sobre la personalidad de la ciudad: "A Compromís y al PSOE les encanta la ciudad de Barcelona, y de hecho le han regalado la Copa América, cosa que no entiendo. Y veo que al PP que le encanta Madrid. Ni Madrid ni Barcelona son València. Pero ¿por qué no dejamos que València sea ella misma? ¿por qué tenemos que asemejarnos a otras ciudades?", se preguntó durante el encuentro.
Respecto a la presencia institucional en actos religiosos, el candidato de Ciudadanos está a favor de la participación en los mismos. "Hay tradiciones de 700 años en las que creo que es normal que el representante institucional esté presente, lo contrario me parece una falta de respeto. De la misma manera, si me invitan otras religiones a actos importantes, acudiría. Yo estoy a favor de la inclusión", explicó.
Uno de los temas más espinosos a los que se enfrenta el candidato es a la convulsa situación interna de su partido. Giner admitió que en los últimos tiempos había preferido dejar de lado la vida orgánica de la formación naranja. "He estado siete años en distintos puestos de la dirección y creo que he cumplido con esa etapa. Sinceramente, me aburre, yo entré en política porque estaba en la Casa de la Caridad y vi que las colas pasaban de 300 a 700 personas y quería solucionar eso. Me gusta la proximidad, que me llame un vecino y me cuente un problema, eso es lo que me interesa y a lo que dedico todo el tiempo que puedo", argumentó.
Además, respecto a pactos, defendió que su línea roja es el "nacionalismo y el pancatalanismo". "Al margen de eso, creo que es fácil entenderse conmigo. Creo que puedo ser la llave del ayuntamiento. Mi idea es que haya cambio y que Ribó no siga, así que en ese escenario mi plan es dar respaldo a quien más cumpla mi programa. Pero, en ese caso, yo no entraré en el gobierno, me quedaré fuera", aclaró, para subrayar que su segunda línea roja son las políticas sociales. "No se puede dar ni un paso atrás ahí".
Por último, el candidato de Ciudadanos dejó claro que irá hasta el final con su proyecto político para el 28M. "Es un ejercicio de lealtad, coherencia y de demostrar que hemos entrado en política para algo más que para estar en un sillón", explicó, al ser preguntado por algunos de sus compañeros que han abandonado las siglas o se han marchado directamente al PP.