VALÈNCIA (EP). El portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique, ha afirmado que lo "lógico" sería que la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, hiciera campaña por los candidatos de la formación al 28M en Madrid y la Comunitat Valenciana, donde compite electoralmente con Más Madrid y Compromís, porque son los aspirantes de su actual "espacio político".
También ha rechazado que el exlíder del partido morado Pablo Iglesias la designara como candidata hace dos años sino que pidió apoyo para ella como futura cabeza de cartel electoral, algo que además debe ser refrendado por la militancia de los diferentes partidos si así lo votan en primarias.
"Pablo (Iglesias), más allá de sus preferencias y sus opiniones, es un demócrata también a la interna de los partidos", ha señalado en una entrevista al programa 'Parlamento' de RNE, recogidas por Europa Press, cuestionado sobre si se esperaba que Díaz y Podemos estuvieran en una situación de tensión cuando en 2021 la propusieron como futura candidata.
Es más, Echenique ha señalado que ahora "queda claro" que Sumar y Podemos son dos espacios "distintos" y que hacen política de forma "diferente", pese a lo cual defienden, al menos por parte de Podemos con "toda la intensidad", llegar a un acuerdo electoral para ir juntos a las generales porque es condición de posibilidad para reeditar el Gobierno progresista.
Todo ello en un contexto donde la cúpula de Podemos no participó el pasado 2 de abril en el lanzamiento de la candidatura de Díaz tras no suscribirse un acuerdo de coalición bilateral con Díaz, mientras que la titular de Trabajo sí estuvo arropada por IU, los 'comunes', Más Madrid y Compromís, entre otros, para la puesta de largo de Sumar, que aspira a reagrupar a la izquierda independiente al PSOE.
Preguntado sobre si en caso de no lograrse un pacto entre ambas partes la ministra de Igualdad, Irene Montero, sería buena candidata, el portavoz del grupo confederal ha respondido que "no están pensando en eso" y que esa posibilidad no lo han debatido a nivel interno de la formación, porque la convicción es conseguir una coalición con Sumar.
En cuanto al papel de la vicepresidenta segunda en las elecciones del 28M, Echenique ha reiterado que Podemos ha pedido apoyo a sus candidatos, que aparte de que forman parte del actual espacio político de Díaz es que "son muy buenos".
Concretamente, ha loado el papel de los cabeza de lista de Madrid, Alejandra Jacinto, y la Comunidad Valenciana, Héctor Illueca, que son referentes en materia de vivienda y la garantía de que se aplique en las dos regiones la nueva normativa estatal aprobada por el Congreso.
Por ahora, la vicepresidenta no ha concretado su presencia en la campaña electoral y en qué territorios participará, mientras que Unidas Podemos ya ha avanzando que abrirá la campaña en Valencia y la cerrará en Madrid, dos plazas clave en estos comicios.
Cuestionado sobre si un mal resultado de Podemos en el 28M les penalizaría de cara a una nueva negociación con Sumar, Echenique ha dicho que su organización no está pensando en eso y solo está centrada en obtener "la mayor fuerza posible" en futuros gobiernos locales y autonómicos.
Respecto a su futuro político, Echenique ha asegurado que no piensa en ello y que en el actual momento de reconfiguración en la izquierda y en pleno ciclo electoral, la mayoría de dirigentes que están en "primera línea política" no saben dónde van a estar tras las elecciones. "No tengo una bola de cristal", ha ahondado para subrayar que esa decisión dependen de los ciudadanos y su voto.
Y sobre si en este tramo final de legislatura percibe que el PSOE se aleja de su socio de coalición, tras desplegar la reforma de la Ley 'solo sí es sí' con apoyo del PP, el portavoz parlamentario de Unidas Podemos ha lanzado que esa cuestión debe ser respondida por los socialistas y que si así fuera, supondría una "irresponsabilidad".
Eso si, ha dejado claro que "los derechos mujeres no puede ser moneda de cambio en un proceso electoral". "Ojalá que no lo hayan hecho", ha deseado.
También ha rechazado que vayan a salir del Gobierno, que es el deseo "más ferviente" de la oposición desde el "primer día", y ha proclamado que Podemos es quien defiende con "más intensidad" la actual coalición, pues su presencia es condición de posibilidad de avances como la subida del salario mínimo interprofesional o la nueva Ley de Vivienda.
No obstante, ha tildado de "trágico" y les "duele" que se haya consumado un paso atrás con el cambio del Código Penal en la reforma del 'solo sí es sí' pactado por PSOE y PP, que supone un "paso atrás" en derechos feministas y volver al "calvario probatorio" para las víctimas de violencias sexuales.
Por tanto, tratarán de volver a situar el consentimiento como centro del marco penal de esta ley, conscientes de que ahora hay una "mayoría bipartidista" que opta por el modelo que sustentó la polémica sentencia inicial del caso de 'La manada'. En todo caso, ha elogiado que el resto de la normativa es un avance para impedir las violencias machistas.
Mientras, ha mostrado su satisfacción por la reciente aprobación de la Ley de Vivienda, aunque llega tarde, porque es una buena legislación "para la gente". "Bienvenido el desbloqueo por el motivo que sea, si es electoral también", ha desgranado Echenique cuestionado sobre si la cercanía de las elecciones autonómicas ha influido en el PSOE para sacar adelante el proyecto de ley tras una larga negociación.
Tampoco le molesta a Echenique que el PSOE vuelque su discurso ahora en esta ley porque es "legítimo" que todos los partidos reivindiquen su trabajo, si bien ha añadido que todos los españoles saben lo que ha hecho Podemos en materia de vivienda.
Por otro lado, Echenique ha dicho que no ve mal las nuevas viviendas públicas si se acaban haciendo, hay dinero y sobre todo existe "voluntad político", aunque ha lanzado que un requisito "fundamental" para que esa promesa acabe siendo realidad es que Podemos tenga más fuerza en el próximo Ejecutivo.
Finalmente, ha afirmado que ve "últimamente nervioso" al PNV tras rechazar finalmente la Ley de Vivienda ante la posibilidad de que pueda haber una mayoría progresista en Euskadi que le haga perder el Gobierno autonómico. "Es verdad que ahora colabora menos en las leyes sociales", ha zanjado.