El Consell maniobra para evitar el cierre registral de la firma pública y revisa las cuentas elaboradas por el ejecutivo anterior para subsanar el problema
VALENCIA. Las cuentas de Aeropuerto de Castellón SL correspondientes a 2014 siguen en el limbo más de un año después del cierre del ejercicio. La sociedad, una de las 28 firmas públicas que el Consell del popular Alberto Fabra dejó sin auditar, informó este lunes a través del Boletín del Registro Mercantil de que ha presentado un escrito de "justificación de no aprobación de cuentas del ejercicio 2014". El motivo: que la firma auditora, ATD Auditores Sector Público SL, se ha negado a firmar las cuentas, según trasladan a Valencia Plaza fuentes de la Conselleria de Hacienda.
La Generalitat no explicó los motivos que llevaron a los auditores a denegar su opinión sobre las cuentas del aeropuerto castellonense aprobadas por el anterior consejo de administración de la entidad, circunstancia que suele producirse cuando la firma encargada de revisar las cuentas considera que no ha recibido información suficiente para realizar su análisis.
La administración autonómica, sin embargo, ha actuado con rapidez para evitar que el Registro Mercantil proceda al cierre registral de la sociedad, que impediría, por ejemplo, inscribir operaciones como una ampliación o reducción de capital en la empresa pública.
Ahora, según añaden las mismas fuentes, se están analizando las cuentas al detalle para volver a remitirlas a los auditores. En este proceso, según indican, tratarán de corregir los aspectos que llevaron a los auditores a no emitir opinión sobre las cuentas de la entidad.
En la cuenta general de la Generalitat sólo está recogida la memoria abreviada de la mercantil, de la que se desprende que el Aeropuerto de Castellón, pese a su nula actividad, incrementó en 500.000 euros sus pérdidas en 2014 hasta los 4,2 millones de euros. La auditoría externa y las que realice la Intervención de la Generalitat profundizarán en los detalles de estas cifras.
Precisamente la auditoría de las cuentas de 2013 del Aeropuerto de Castellón reveló una particular circunstancia. Como informó este diario, las cláusulas del contrato que adjudica la gestión del aeródromo a SNC-Lavalin reflejaban que la Generalitat no preveía "la existencia de ingresos netos positivos" durante sus veinte años vigencia, es decir, hasta el año 2034.