Un hogar para Simone Fattal
El IVAM explora la idea de narración en Suspensión de la incredulidad, la primera exposición en España de la artista
VALÈNCIA. La subsede del Institut Valencià d’Art Modern (IVAM) ha dado el paso definitivo para convertirse en una realidad. El Ayuntamiento de València ha finalizado los trámites de cesión del muelle 3 del Parc Central al museo para que este pueda disponer del espacio municipal y convertirlo en su nueva sede, un espacio que quiere completar el discurso de su centro principal, ubicado en la calle Guillem de Castro, incidiendo en su relación con lo contemporáneo y la experimentación, así como con una conexión mucho más explícita y fluida con la ciudad. "Estamos más cerca de poder contar con un nuevo recurso, un nuevo espacio destinado a centro de exposiciones y para desarrollar todo tipo de actividades artísticas y culturales que enriquecerán mucho la vida de la ciudad y especialmente de los barrios colindantes de Ruzafa y de Malilla”, ha declarado la concejala Isabel Lozano. La cesión se hace con carácter gratuito y por un plazo de 75 años.
Este paso completa un proceso en el que se está trabajando desde hace meses en colaboración con el museo, siendo el pasado mes de febrero cuando la la Junta de Gobierno Local dejó sin efecto la adscripción del muelle al Organismo Autónomo Municipal de Parques y Jardines, dejando vía libre a la cesión. El objetivo es, tal y como anunciaron representantes de la administración pública y autónomica durante la presentación del proyecto, que el espacio esté “a pleno funcionamiento” en 2023, para lo que desde el museo ya están trabajando no solo en las necesidades físicas del espacio, sino también en la propuesta artística. Así, el espacio, cuya proyecto se inspira en otras subsedes como el Palacio de Cristal del Reina Sofía o en la Capella del Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (MACBA), busca ser algo más que un lugar para la exhibición de la colección del IVAM, entendiéndose también como un espacio de experimentación e investigación.
Actualmente, el edificio tiene un interior diáfano y las obras previstas comportarán el cierre mediante carpinterías, puertas y ventanas vidriadas, además de la ejecución de un módulo central contenedor, de cámaras técnicas y la instalación de un nuevo pavimento a la totalidad del edificio, así como la implantación de los diferentes servicios para su correcto funcionamiento. En total, el IVAM llevará a cabo obras por valor de dos millones de euros.
Construido entre 1906 y 1910, con proyecto del ingeniero Javier Sanz y dirección de obras de Demetrio Ribes, esta fue una de las primeras edificaciones del nuevo recinto de la Estació del Nord, un espacio que ahora cambiará por completo el uso para el que fue diseñado. El inmueble se convertirá en un espacio dedicado al arte contemporáneo, una nave que quedará dividida en dos salas expositivas para actividades y mediación y que, además, incluirá una cafetería vinculada al centro. De igual forma se plantea hacer uso de la explanada frente a la entrada del muelle como parte del proyecto artístico.
“Estoy trabajando en un hipotético programa para la sede –explicó Enguita el pasado mes de septiembre, durante una entrevista con Culturplaza- que esté también situado, en el sentido de que está en un parque, con lo que hay cuestiones que puede ser interesante trabajar allí por ser un espacio paisajístico; porque está entre Ruzafa y Malilla, en un barrio en expansión... estamos trabajando para desarrollar este programa a partir de 2023. El espacio nos da una libertad mayor que el cubo blanco que es el museo”. Cabe recordar que esta no es la primera ampliación del museo. Fue en el año 2018 cuando el centro abrió su primera subsede, en este caso en la provincia de Alicante, un espacio compartido con la Fundación CAM y el Ayuntamiento de Alcoy.
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