Compradores pasan frente a una tienda de la calle Colón (DANIEL DUART)VALENCIA, (EFE). El Ayuntamiento de Valencia ha pedido a la Asociación Nacional de Grandes Superficies de Distribución (Anged) que siga cumpliendo el acuerdo local que restringe la apertura de los comercios en la ciudad, después de la decisión de la Generalitat de estimar los recursos contra la reducción de zonas.
El alcalde, Joan Ribó, reconoce no estar "muy satisfecho" con la decisión de la secretaria autonómica de Economía Sostenible, María José Mira, que ha resuelto dejar sin efecto las resoluciones del 30 de marzo por las que se declaran zonas de gran afluencia turística en Valencia la zona Centro y la zona Ciudad de las Artes y las Ciencias, lo que suprimía la apertura comercial en otras tres zonas.
Así lo ha indicado Ribó a los periodistas al ser preguntado por esta cuestión antes de visitar el Congreso de Educación Inclusiva en la Universitat Politècnica de València (UPV).
El alcalde ha manifestado que cuando un acuerdo como el adoptado en el Consejo Local de Comercio es "tan mayoritario" -fue aprobado con 23 votos a favor de 26- hay que respetarlo. "Le pedimos formalmente que este acuerdo, aunque no sea obligatorio, se siga cumpliendo", ha afirmado.
Por ello, desde el Ayuntamiento se ha solicitado a Anged que siga cumpliendo este pacto, al tratarse de una "posición coherente" con el acuerdo, además de beneficiar especialmente a los trabajadores y al pequeño comercio.
Los problemas legales, ha dicho, tiene que resolverlos la Generalitat, y el consistorio lo que quiere es mantener un acuerdo local que se alcanzó "con un amplísimo consenso" y prácticamente "de forma unánime".
Según ha dicho, el concejal de Comercio, Carlos Galiana, ha solicitado a todos los que votaron a favor del acuerdo que lo mantengan el próximo domingo "y los siguientes", y ha recordado que el pacto se alcanzó "dentro del marco del acuerdo del Botánico".
Ha recordado que el acuerdo contiene la conciliación laboral, al reducir las jornadas de festivos trabajados a un máximo de trece o catorce al año, así como que el comercio de menos de 300 metros cuadrados puede abrir libremente.
Ribó ha insistido en que la posición "ideal" del Ayuntamiento era que los domingos y festivos no abriera ningún gran centro comercial, pero los horarios comerciales es una cuestión "que se tiene que hacer por consenso".
El Consistorio defiende que las zonas de gran afluencia turística (ZGAT) se tienen que reducir a las áreas donde realmente hay turistas y existen zonas como la del entorno del estadio del Levante (ahí se sitúa el centro comercial Arena) donde la presencia de turistas "es muy baja".
"Pensamos que lo hicimos bien pero si hay problemas legales, lo tiene que resolver la Generalitat", ha señalado Ribó, quien ha concluido que el conflicto se podía haber resuelto mejor.
