VALÈNCIA. La Ejecutiva Permanente del Bloc Nacionalista Valencià mantuvo una reunión este miércoles en la que analizó la marcha del hasta ahora portavoz de la formación Rafa Carbonell, quien anunció su adiós al partido para regresar a su puesto docente en el centro concertado La Salle de Alcoi debido a que concluía su periodo de excedencia.
Pero no solo eso, Carbonell se marchó dejando en una carta a los militantes unas duras críticas sobre la gestión de su compañero el conseller de Educación, Vicent Marzà, por cerrar una línea de bachillerato precisamente en el colegio en el que anteriormente daba clases. Unas manifestaciones que fueron afeadas este miércoles en las conclusiones arrojadas por la Ejecutiva Permanente del Bloc, en las que aseguraban "respetar" la decisión de su marcha pero en las que mostraban un rechazo de plano a los "argumentos de cariz político de su dimisión".
"Desde el Bloc defendemos y siempre hemos defendido la escuela pública. Es por eso que vemos que el trabajo y las políticas educativas y acciones actuales que se están sacando adelante desde la Conselleria de Educación, Investigación, Cultura y Deportes son fruto del programa electoral y del ideario del partido", subrayó la formación en el comunicado remitido.
En esta línea, desde la formación -quien a través del Consell Nacional defendió meses atrás la gestión de Marzà- se remarcó en esta Ejecutiva que las políticas educativas de la conselleria "son fruto del programa electoral y del ideario del partido" porque son "en defensa de la escuela pública, con garantías de igualdad y de derechos educativos para las familias valencianas".
"El Bloc y Compromís, desde siempre, encabezamos, con el conseller Vicent Marzà al frente, la lucha por la dignificación de la escuela pública valenciana apostando por la recuperación del espacio educativo de calidad que le corresponde en la educación pública", insistieron en la formación, desde donde subrayaron que el objetivo de la dirección del Bloc es, desde siempre, "trabajar por la cohesión del partido, la defensa de los intereses de los valencianos y apoyar a la labor de nuestros cargos en las instituciones valencianas".
De esta manera, la dirección del partido se mostró crítica con el adiós de Carbonell, que además ha dejado descabezada la corriente que él lideró en el congreso del pasado año y que terminó en un acuerdo por el que Àgueda Micó -la otra candidata- se convertía en coordinadora nacional y él en portavoz. Ahora, varios dirigentes del sector de Carbonell también han mostrado su desacuerdo, ya no con la decisión personal de marcharse, sino con el recado enviado a las políticas de Marzà. Su puesto, aunque se podría ocupar según los estatutos, necesitaría a una persona que suscite el apoyo de la Ejecutiva y del Consell Nacional, ambos órganos en los que Micó ha mostrado a priori mayor fuerza.