El Bloc ingresa por su 'impuesto' a los cargos públicos más de 300.000 euros anuales

VALENCIA. El Bloc necesitará, probablemente, algo más que el 'impuesto' que aplica a sus cargos institucionales para poder cumplir lo acordado en el VII Congrés, donde se conformó una Ejecutiva con siete responsables de área que estarán liberados, además de dos cargos directivos de máximo nivel: Àgueda Micó, coordinadora nacional, y Rafael Carbonell, portavoz de la formación.

Tal y como informó este diario, en el Bloc se baraja la forma de poder conseguir distribuir sus recursos para que los cargos que deben dedicarse 100% al partido tengan un salario digno sin tener que recurrir a los clásicos ardides que se han utilizado en el pasado por las distintas formaciones y que, a la postre, se resumían en tener en la sede a personal que cobraba de instituciones públicas.

Como piedra de toque, y para valorar la dificultad que entraña tener una directiva completa liberada, basta con echar un vistazo a la página de transparencia de Compromís, que pone negro sobre blanco las donaciones que los cargos institucionales entregan al partido para su funcionamiento. O lo que es lo mismo, lo que los políticos suelen denominar informalmente el 'impuesto revolucionario', algo habitual en todos los partidos.

Así, al margen de las cuotas, los responsables institucionales del Bloc, contando los montantes que se revelan en la web de los altos cargos de la Generalitat, diputados y personal de Corts, miembros de las tres diputaciones provinciales, del Congreso, Senado y Europarlamento, empresas públicas y los ayuntamientos de Valencia, Castellón, Alicante y Elche, la cifra total de recaudación asciende a algo más de 300.000 euros anuales. 

Si bien es cierto que la estimación de lo que podrían costar las nueve contrataciones puede situarse sobre una cifra no demasiado superior, los gastos que tiene un partido políticos van más allá que esos salarios, a los que hay que sumarles otros de administración y gestión ya existentes en la formación nacionalista.

Así, atendiendo a las cifras colgadas en la página de Compromís, el Bloc saca la mayor parte de 'tajada' de los altos cargos de la Generalitat, que mensualmente pagan unos 6.100 euros mensuales a la formación nacionalista. En segundo lugar, la derrama más importante la ofrece el Ayuntamiento de Valencia, donde entre concejales y asesores se dejan en el Bloc 5.400 euros al mes. Las cantidades varían pero, por poner un ejemplo, los ediles pagan algo más de 700 euros de su sueldo al partido, mientras que los asesores desembolsan entre 300 y 600 euros.

La tercera institución de donde el Bloc ingresa más por las retribuciones de sus altos cargos es la Diputación de Valencia, en concreto, 3.465 euros al mes. La siguiente es Les Corts Valencianes, donde diputados y asesores aportan algo más de 3.300 euros. En cuanto a los contribuyentes estrella, son en buena lógica los que más ganan: el europarlamentario Jordi Sebastià contribuye con 1.325 euros mensuales -de un salario de 8.213 euros brutos mensuales- y  el portavoz en el Congreso, Joan Baldoví, cede al Bloc 1.029 euros -de 6.215 euros brutos al mes-, siempre según los datos de la web de Compromís.

Los altos cargos de Compromís aportan unos 530.000 euros anuales

En cuanto a los números totales, el 'impuesto revolucionario' deja en las arcas de la coalición más de medio millón de euros, unos 530.000 anuales. Así, aparte de los algo más de 300.000 euros al año que llegan de los cargos del Bloc, hay que añadir los más de 150.000 que se acumulan por dirigentes de Iniciativa en instituciones públicas, los en torno a 60.000 que se aportan desde Gent de Compromís, con Joan Ribó como uno de los principales contribuyentes de esta sensibilidad -casi 700 euros mensuales-, y los 14.000 anuales que, según la web, ponen los cargos de Els Verds, si bien fuentes de esta formación puntualizaron que en lo referente a su partido había contribuciones no contempladas todavía en la web.