Fabiola Meco (Podemos), Manolo Mata (PSPV) y Mireia Mollá (Compromís). Foto: VPVALÈNCIA. Hace más de un año, Podemos registró una propuesta para reformar la ley del Consell Jurídic Consultiu. Una iniciativa a la que los grupos parlamentarios de Les Corts presentaron distintas enmiendas que quedaron ordenadas antes de que se iniciara el debate de los Presupuestos de la Generalitat para 2018 y que serán votadas este miércoles en la comisión de Coordinación del parlamento valenciano.
La iniciativa original que presentó la formación morada no generó consenso desde el principio. No en vano, PSPV y Compromís registraron sus enmiendas por separado, evidenciando así las discrepancias que guardaban las tres formaciones respecto a aspectos clave a modificar como a quién le correspondería designar a los consejeros, cada cuánto se renovarían los mandatos o quién debería nombrar al presidente del órgano. A unas horas de que se produzcan las votaciones, no obstante, los tres partidos que sustentan el Botànic se reunieron para hallar puntos de encuentro y llegar a la comisión con una posición común.
Así, uno de los cambios más significativos en el que socialistas, valencianistas y morados se pusieron de acuerdo a lo largo de la tarde de este martes fue en determinar que la designación del presidente del órgano consultivo la hagan los propios consejeros, tal y como propuso Ciudadanos en un principio. Si hasta ahora éste era elegido por el president de la Generalitat de entre los seis consejeros electivos, de acuerdo a la nueva redacción pasará a ser seleccionado por los propios miembros del CJC.
Ahora bien, PSPV, Podemos y Compromís matizaron el texto de los naranjas para introducir que primero deberá haber voluntarios entre los seis juristas que compongan el Consell Jurídic. No podrá votarse a ninguno de ellos que no quiera presidir el órgano; y para resultar electo como presidente, el candidato tendrá que sumar una mayoría absoluta en la votación. Es decir, deberá obtener cuatro votos favorables.
Si en una primera votación ninguno de los aspirantes -en caso de querer ostentar el cargo varios de ellos- obtuviera tal respaldo, se pasaría a una segunda vuelta, quedando entre los finalistas aquellos que hubieran conseguido mayor número de apoyos. Por ejemplo: si hubiesen tres aspirantes y uno de ellos obtuviera 3 apoyos, otro 2 y un tercero 1, pasarían a votarse en la segunda vuelta sólo los dos primeros por haber reunido más apoyos.
En caso de que en esta segunda vuelta tampoco ninguno obtuviera la necesaria mayoría absoluta, se haría un sorteo en la tercera ronda. Un método con el que los grupos parlamentarios quieren evitar que la elección de la presidencia quede bloqueada.
No es la única modificación que PSPV, Compromís y Podemos acordaron. También se reformará el periodo de mandatos, que pasará a ser de cuatro años renovables por otros cuatro años. Anteriormente eran de seis años a renovar por otro plazo idéntico.
En este sentido, también la elección de los consejeros se verá modificada. La formación morada quería trasladar a Les Corts la competencia para nombrar a todos los integrantes del órgano consultivo. Los socialistas, sin embargo, enmendaron este texto para mantener la redacción de la ley que dio vida al órgano en 1994. Es decir, querían que la potestad para designar la mitad de los consejeros siguiese siendo del Consell.
No obstante, el punto intermedio en el que ambas formaciones se encontraron este martes y que votarán en la comisión de este miércoles es la propuesta que puso sobre la mesa Compromís. La coalición valencianista planteó que cuatro consejeros fuesen elegidos por el parlamento valenciano y otros dos por el Gobierno valenciano.
