El Burning Man beca el proyecto 'Renaiximent' para plantar falla en Estados Unidos

VALENCIA. Los lazos entre el festival de arte de mayor repercusión en el mundo, el Burning Man, y las Fallas de Valencia sigue estrechándose. El artista David Moreno y el arquitecto Miguel Arráiz, los mismos que lograron levantar el proyecto experimental para la comisión Nou Campanar en 2015, han conseguido 'colar' su proyecto de monumento entre los únicos siete becados fuera de Estados unidos por el festival para su próxima edición, en agosto y septiembre de este año.

El Burning Man, un festival de arte multidisciplinar que acoge a 65.000 personas en el desierto de Nevada, en la ciudad efímera Black Rock City, ha viajado hasta Valencia precisamente durante estos días de actividad fallera, tal y como avanzó Valencia Plaza. Si hace tan solo unas semanas el proyecto de falla pasó el filtro, esta vez ha logrado conseguir la beca que el propio festival aporta a algunos proyectos y, además, la de mayor cuantía posible.

Con el handicap de tener que trasladar todo el monumento desde Valencia a San Francisco (en California, ciudad sede del Buring Man) y de allí al desierto de Nevada, los creadores Moreno y Arráiz siguen perfilando todavía el proyecto que, entre otros asuntos técnicos, ha de estar preparado para resistir temporales de arena de hasta 160 kilómetros por hora. De hecho las condiciones climáticas, la viabilidad técnica y económica del proyecto y su propia cremà han ido moldeando el llamado proyecto 'Renaiximent'.

El reto de la financiación

"En origen, la palabra 'Renaiximent' estaba muy vinculada a la idea de rehacer la falla una vez llegados allí y la idea de que, a través del fuego, todo se consumiera para volver a nacer. No obstante, en el Burning Man no se puede quemar ni cartón ni papel por la contaminación de pavesas en el desierto. Por ese motivo, estamos planteando que la falla vuelva y quemarla en Valencia, casi con total seguridad ese mismo otoño", apunta Moreno a este diario.

El refuerzo "brutal" de la estructura para soportar las condiciones del desierto hace que, en este momento, Arráiz y Moreno trabajen con el ingeniero Josep Martí. Con la gran noticia de haber alcanzado la beca del Burning Man y estar entre los proyectos elegidos del festival, ambos aguardan todavía cumplir con las siguientes fases para convertir en realidad un proyecto que acaba de recibir su primer espaldarazo económico, "pero al que le quedan dos tercios en este sentido para hacerse posible". Fundaciones, instituciones y empresas son conscientes de esta necesidad y ambos están tratando de aproximarse a este escenario de financiación, aunque habrá "una parte que sacaremos a través de crowdfunding". En total, la cifra "necesaria" es de 70.000 euros.

Moreno, que estos días anda con los detalles de la plantà de la comisión Obispo Amigó-Cuenca que ha diseñado, sostiene la idea de 'homenaje' a la Lonja de Valencia como parte central de esta falla. Estructuralmente similar a la falla plantada en Nou Campanar, el corazón del propio monumento, su interior, "es un tributo a los talleres falleros. Hay piezas colgando del techo, símbolos de artesanía y la idea de cómo todo eso se convierte en modernidad, precisamente como un reflejo también de las dificultades que se salvan a través del proceso creativo para hacer realidad la falla".

La Lonja, de hecho, refleja la superación por parte de la sociedad civil valenciana contra la Inquisición y el establishment de los Borgia a los que se les 'colaron' las figuras grotescas que rodean este edificio. El proyecto rezuma el lado satírico y propio de los monumentos falleros, aunque este diario no ha tenido acceso a las imágenes del proyecto ya que tan solo el Burning Man puede tener conocimiento del mismo hasta acogerlo definitivamente o descartarlo.

Pese a los retos físicos y las condiciones técnicas para las que se ha preparado 'Renaiximent', Moreno cree que "en este momento, nuestra principal barrera puede ser la de no alcanzar la financiación, y aunque tenemos una línea de tiempo y recursos para abandonar a tiempo el proyecto, somos optimistas". Por su parte, los distintos agentes falleros en torno a los monumentos, desde Junta Central Fallera, el Gremio de Artistas Falleros y el propio Ayuntamiento de Valencia mantienen conocimiento de la evolución del mismo.