VALÈNCIA. Era una de las noticias que desde el sector llevaban esperando con más ganas y, tras años de anuncios y conversaciones, se ha materializado. El Consell Local del Disseny ya es una realidad. La Junta de Gobierno Local ha aprobado este viernes su creación, un organismo mediante el que el Ayuntamiento de València fortalecerá su arquitectura interna en esta materia. El gobierno local, tras haber barajado distintas opciones -entre las que se incluía la de crear la figura de un director creativo, como en Madrid o Barcelona-, ha optado por la creación de un consejo con el que esperan que el diseño no solo forme parte de la comunicación de la institución sino que pase por otras áreas menos visibles. También en el ámbito del urbanismo, que en los últimos meses ha ‘tirado’ de la asociación Capital Mundial del Diseño para redondear algunas de sus propuestas.
Fue, de hecho, hace apenas unas semanas, durante un encuentro con los Premios Nacionales de Diseño Jaime Hayón y los responsables de la empresa Expormim, cuando el alcalde de València, Joan Ribó, se refería al consejo como una manera de “introducir este proceso creativo en todas las actuaciones desarrolladas por el Ayuntamiento”. Con la creación del consejo el consistorio se marca como objetivo la mejora de la calidad visual, funcional y paisajística de València, un órgano de carácter consultivo que tendrá como misión, entre otras cuestiones, detectar problemas de diseño y comunicación estratégica y trasladar informes y recomendaciones a las distintas concejalías y Alcaldía. También se plantea como un espacio que sirva para asesorar a los distintos servicios municipales; desde el que se defina la visión del diseño en la política urbana o la evaluación de productos y servicios urbanos a partir de los criterios del buen diseño.
Un consejo con entre 10 y 15 miembros, de carácter multidisciplinar y sin remuneración
Pero, ¿quiénes formarán parte del Consell? Aunque los nombres propios vendrán más adelante, lo que sí se sabe es que estará formado por entre diez y quince miembros con un carácter multidisciplinar, con perfiles que incluyan el diseño gráfico y de producto, arquitectura, comunicación, perspectiva de género o expertos en patrimonio histórico-artístico. Los miembros del consejo serán nombrados por la Junta de Gobierno Local por un periodo de dos años, con carácter renovable, una figura para la que el consistorio no plantea ningún tipo de remuneración económica.
Esta fórmula da respuesta a la esperada integración del sector del diseño en la arquitectura municipal (la autonómica de momento no ha anunciado planes al respecto), un gran paso que, al mismo tiempo, se entiende desde el sector como el inicio de un camino y no tanto como el fin del trayecto. “Al Ayuntamiento de València se le plantean varias opciones en un primer momento, una de ellas, y creo que debe ser la que llegue a largo plazo, que haya una Oficina de Diseño, un departamento que dé cohesión a todas las estrategias de diseño municipales. Eso es lo que se necesita. Es difícil y entiendo que una primera manera de empezar a experimentar con eso es un Consejo de Diseño”, expresó Xavi Calvo, director de València Capital Mundial del Diseño 2022, durante una reciente entrevista con este diario.
Aunque las actividades relacionadas con la capitalidad ya han empezado, no será hasta dentro de unos días, con el cambio de año, que València sea Capital Mundial del Diseño. Con la 'medalla', sin embargo, han venido muchas dudas sobre cuál será el futuro del proyecto una vez pase el próximo curso, una visión a largo plazo que se quiere asentar con la creación del consejo local, aunque no solo. Fue el pasado verano cuando, tal y como adelantó este diario, se creó la Fundación Valenciana del Diseño, una entidad que quiere ser quien tome el testigo del proyecto de 2022 cuando finalice. Esta fundación, que nace de manos privadas, sin embargo tendrá una vinculación más que directa con la administración pública, pues es La Marina la que les dará cobijo en la antigua base de Iberdrola, espacio que se convertirá en la casa del futuro Centro del Diseño y, también, en sede del Arxiu Valencià del Disseny.