VALÈNCIA (EP). El presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, ha avanzado este jueves que el Consell ha instado a la Abogacía de la Generalitat a presentar ante Fiscalía una denuncia por delitos de odio y alteración del orden público tras los incidentes ocurridos el pasado 9 d'Octubre, Dia de la Comunitat Valenciana, y el escrache que sufrió la vicepresidenta del ejecutivo valenciano, Mónica Oltra, en la noche de este miércoles por parte de un grupo de extrema derecha.
Así lo ha indicado Puig en la sesión de control de este jueves, en donde ha subrayado que su gobierno "no consentirá episodios como los del 9 d'Octubre ni el que sufrió ayer la vicepresidenta delante de su casa". Por eso, ha instado a la Abogacía de la Generalitat a presentar una denuncia ante Fiscalía por delitos odio y alternación del orden público.
"Hoy más que nunca reafirmar el valor de la convivencia. La sociedad valenciana es de personas libres, respetuosas y esperanzadas en un proyecto común y el Consell no permitirá que los fascistas pongan en peligro la libertad, la democracia y autogobierno", ha remarcado.
El 'president' ha señalado que la democracia es "respeto" y ha recordado que hace 40 años los radicales ya querían que "no llegara la democracia y autogobierno". "Ahora la vuelven a atacar y no vamos a permitir que el fascismo vuelva a la calle para intentar atemorizar a los que no piensan como ellos", ha incidido.
"No representan a nadie y no van a ser protagonistas del futuro nuestra sociedad. Nuestra solidaridad a la vicepresidenta y a su familia y con las víctimas de agresiones fascistas", ha manifestado Puig.
Por su parte, la presidenta y síndica del PPCV, Isabel Bonig, se ha "sumado" a las condenas y a las iniciativas, pero ha indicado que le llevará fotografías de "cómo se producían actos también violentos e intimidación contra miembros del PP" como la exalcaldesa de Valencia Rita Barberá,; el expresidente de la Generalitat Francisco Camps; y otros dirigentes 'populares' como Esteban Gónzalez Pons, José Ciscar o ella misma. "Todo hay que condenar y perseguir", ha remarcado.