VALÈNCIA. El Consell empieza a dar forma a uno de los objetivos más ambiciosos que se marcó en el pasado seminario de gobierno en Montanejos: la creación de un Observatorio Fiscal de la Comunitat Valenciana. Aquel cónclave, celebrado el pasado mes de julio, sirvió al ejecutivo autonómico para fijarse una serie de medidas por Consellerias, plasmadas en un documento, que serán la base de su acción de gobierno en los primeros seis meses de legislatura.
En concreto, la creación de este nuevo organismo quedó incluido como uno de los cinco ejes prioritarios del departamento que dirige Vicent Soler junto a la elaboración de un Plan de Acción de la Administración Electrónica de la Generalitat y Entidades Locales. Según se explicó en la rueda de prensa posterior a la celebración de este encuentro, el objetivo de este observatorio será "cambiar la mentalidad alrededor del fisco", luchar contra el fraude y contribuir a la mejora de la aplicación del sistema tributario.
Asimismo, nace con vocación de facilitar políticas tributarias que priorizan el desarrollo humano sostenible y para profundizar en el conocimiento mutuo entre la Agencia Tributaria Valenciana y las personas profesionales representadas en él en un marco de cooperación, transparencia, rigor técnico, objetividad, proporcionalidad y receptividad y aumentar la seguridad jurídica en las relaciones de contribuyentes y profesionales con la Agencia Tributaria Valenciana.
El Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV) sacaba este martes a información pública el anteproyecto de creación de este Observatorio Fiscal, a través del Proyecto de Ley de medidas fiscales, de gestión administrativa y financiera y de organización de la Generalitat, una norma que acompaña a los presupuestos, y daba un plazo de 15 días para presentar alegaciones. La Ley de Presupuestos de la Generalitat para el año 2020 establece determinados objetivos de política económica del Consell cuya consecución exige la aprobación de diversas normas que suelen incluirse en la conocida como ley de Acompañamiento.
Este es el caso del Observatorio cuya constitución deberá ser efectiva dentro del plazo de un año desde la fecha de publicación de ley de Acompañamiento en el DOGV que, si no hay problemas durante su tramitación y votación en Les Corts, suele salir adelante en el mes de diciembre, lo que implicaría que en el mismo mes de 2020 debería estar creado este organismo.
Dependiente de la Conselleria de Hacienda, estará integrado por todos los agentes sociales y administrativos con participación en el sistema tributario valenciano, es decir, los titulares de los distintos departamentos de la Agencia Tributaria Valenciana, asociaciones y colegios profesionales del ámbito tributario, organizaciones sociales y empresariales representativas de colectivos y agentes del ámbito tributario que estatutariamente tengan reconocido un papel activo en este ámbito. Se pretende, de este modo, determinar una pauta de análisis y revisión constante para garantizar la mejora y adaptación de la conciencia tributaria a las necesidades de la sociedad valenciana y al contexto económico y social del momento. ¿Su finalidad? Mejorar la relación entre la administración tributaria valenciana y los contribuyentes mediante la transparencia y la cooperación.
Así, este observatorio deberá servir de plataforma para planificar, estudiar y analizar la aplicación del sistema tributario valenciano reduciendo las cargas fiscales y fomentando el uso de la administración electrónica, así como lograr una mejora en la prevención y lucha contra el fraude de forma colaborativa, buscando soluciones a las prácticas fraudulentas y fomentando el rechazo social del fraude fiscal. Además, tendrá como misión la evaluación de los efectos de las medidas introducidas por las leyes tributarias en el ámbito de la Comunitat con el fin de facilitar políticas tributarias que "prioricen el desarrollo humano sostenible, promover la educación ciudadana sobre las actuaciones tributarias, profundizar en el conocimiento mutuo entre la Agencia Tributaria Valenciana y las personas profesionales representadas en él en un marco de cooperación transparencia, rigor técnico, objetividad, proporcionalidad y receptividad", según la información publicada en el DOGV.
Asimismo, propondrá líneas de actuación que permitan avanzar en el desarrollo del modelo de relación cooperativa entre la administración tributaria y los agentes participantes del mundo tributario y que incidan directamente en la generalización de buenas prácticas por parte de los contribuyentes, en una mejora de la seguridad jurídica en unos menores costes de cumplimiento y reduciendo la conflictividad.