VALÈNCIA. El Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) que se aplicará en la EMT de València afectará a más de 400 empleados. Concretamente, el número de trabajadores afectables por este despido temporal será de 433, la mayoría de los cuales, cerca de un 79% serán conductores, según recoge la última propuesta de acuerdo entre el Comité de Empresa y la dirección del ente, al que ha tenido acceso este diario. Según fuentes sindicales, son datos que pueden servir de guía si bien pueden sufrir alguna pequeña modificación en las últimas horas.
Así, la empresa que dirige Giuseppe Grezzi y gerencia Josep Enric García prepara ya esta operación que deberá ser ratificada este miércoles por el Consejo de Administración. El alcalde de la ciudad, Joan Ribó, ya dio su visto bueno este martes. El recorte temporal de plantilla se aplicará para hacer frente al excedente de trabajadores ante el que se encuentra la empresa con motivo de la reducción de la actividad económica y el descenso de la demanda.
Todo ello, junto a las recomendaciones del Gobierno central, ha hecho que la EMT haya reducido el servicio hasta un 45% respecto a los horarios habituales. A priori, esta situación se mantendrá entre el 9 de abril y el 10 de mayo, pero los empleados que lo deseen tendrán varias opciones: o acogerse al ERTE durante todo el período o hacerlo por semanas.
De los 433 empleados afectados, 340 serán conductores, de manera que quedarían en activo otros 1.219 conductores para dar servicio a toda la ciudad de València durante lo que dure el estado de alarma. Ahora bien, según recoge el acuerdo que deberá ser ratificado por el Consejo de Administración este miércoles, el descenso de la actividad con motivo del coronavirus "produce también una disminución en el trabajo y tareas que se realizan en el Área Técnica (Talleres) y en los Servicios Generales (Área de Administración)", por lo que el ERTE afectará a todas estas secciones también.
El reparto entre ellas será proporcional, permitiendo en todo el funcionamiento ordinario de la empresa. En este sentido, el resto de empleados afectados por el ERTE pertenecen a las otras grandes áreas de la empresa municipal: administración -16 empleados-, operaciones -18 inspectores-, y el área técnica -59 encargados de taller-.
Desde los sindicatos consideran que estas semanas constituirían una buena época para avanzar en las reparaciones urgentes de los vehículos. "Hay áreas con más cargo de trabajo, donde no va a ser fácil desprenderse de gente, como limpieza o el área de mecánica", explican. "Es una buena oportunidad para hacer esas reparaciones costosas de tiempo y tener el material a punto", subrayan en este sentido, dado que las averías son uno de los motivos por los que los vehículos se suelen quedar sin salir en una jornada normal.
Se trata de un ERTE voluntario. Es decir, se podrán acoger aquellos empleados que inicialmente lo deseen hasta alcanzar las cifras marcadas en cada área. Ahora bien, si hay más peticionarios que plazas posibles, la empresa aplicará unos criterios para garantizar la seguridad de los empleados más vulnerables o con mayor dificultad para la conciliación familiar. En este sentido, tendrán prioridad los mayores de 55 años y aquellos que tengan a su cargo hijos pequeños o familiares dependientes.
Por contra, si las solicitudes de incluirse en el ERTE son insuficientes y hay un excedente de empleados de, al menos, el 25%, la empresa será la que decidirá qué empleados figuran en las listas hasta completar las plazas, especialmente teniendo en cuenta los criterios de vulnerabilidad y conciliación. En todo caso, como recoge el acuerdo, "la posible adscripción obligatoria no podrá implicar que afecte simultáneamente a dos trabajadores que sean pareja". La lista definitiva, eso sí, deberá ser acordada previamente con las organizaciones sindicales.
En cuanto a los salarios, los empleados cobrarán el 100% del mismo -pagado entre la empresa y el Estado-, y que sólo incluye el salario base, la prima fija y la antigüedad, no así el resto de complementos. Así pues, la EMT completará lo que no cubra la prestación de desempleo mediante un complemento que recibirá el nombre de "Gratificación ERTE". Aquellos empleados en situación de incapacidad temporal se equipararán a los trabajadores despedidos temporalmente en términos económicos.
Con todo, lo cierto es que el despido temporal no afectará al abono de las pagas extras e incluso se podrá solicitar un anticipo de la paga extra de julio para sobrellevar estos meses. Tampoco tendrá repercusión en la antigüedad, en el orden de escalafón dentro de la mercantil ni en los días de vacaciones, de convenio o de descanso. En cuanto a los altos cargos de la empresa, gerente incluído, el salario se rebajará un 10% en todos los conceptos.
Por otra parte, y como medida adicional de prevención y favorecedora de la conciliación familiar, aquellos trabajadores no afectados por el ERTE, podrán solicitar días de descanso a cuenta de días de formación. Permiso que será otorgado siempre que no imposibilite la prestación de los servicios mínimos esenciales.