El Escalante asegura su estancia en la Nave de Ribes un año más

VALÈNCIA. Fue el pasado año cuando Ribes Espai Cultural abrió sus puertas al público, un centro cultural de nuevo cuño ubicado en el Parc Central que nació con continente pero con un contenido todavía por definir. La nave, propiedad del Ayuntamiento de València, está ahora pendiente del cierre de la adjudicación de la licitación para su gestión, un proceso con el que se ordenará sus objetivos de futuro. Entretanto, el espacio ha funcionado como marco para colaboraciones puntuales con eventos externos y, principalmente, como sede temporal del Teatre Escalante. De esta forma, el teatro de la Diputació, que lleva desde 2016 sin sede estable, ha encontrado en Ribes su perfecto aliado mientras espera una solución definitiva.

El área de Cultura del Ayuntamiento y de Teatros de la Diputació -ambas gestionadas por Glòria Tello- aprobaron en septiembre un convenio para la gestión conjunta de la programación cultural de la nave, un acuerdo que por un lado daba una mayor estabilidad al Escalante y, por otro, dotaba de contenido a este nuevo espacio. El convenio tiene vigencia durante un año, prorrogable por otro, una ampliación para la que no habrá que esperar mucho. Será este viernes, apenas dos días antes de las elecciones locales, cuando se apruebe en la Junta de Gobierno Local, con lo que el Ayuntamiento y la Diputación aseguran la continuidad del Escalante en la nave de cara a la próxima temporada. 

El convenio original, que ahora se amplía, especifica que el Ayuntamiento no repercutirá a la corporación provincial los gastos por la utilización de la nave y el Centro de Artes Escénicas Escalante será responsable del buen uso del edificio y las instalaciones. Mediante este acuerdo, el espacio del Parc Central se ha convertido en el escenario principal del Escalante durante la temporada 2022/2023, donde ha llevado las representaciones de obras como An-Ki o Lázaro, aunque no el único, pues ha mantenido otras como el Teatre Principal o Teatre el Musical. 

Tras años sin sede, fue en 2021 cuando la Diputación dio respuesta al futuro del Escalante con el anuncio de la construcción de un nuevo edificio en el entorno de la Avenida de las Cortes, un proyecto para el que se invertirá alrededor de cinco millones de euros, a lo que habrá que sumar el coste del equipamiento técnico. El proyecto cuenta con un plazo estimado de ejecución de entre 45 y 47 meses, un proyecto cuya licitación se anunció para el primer trimestre de este año... y que finalmente no ha cumplido los plazos prometidos. Ya en mayo y con el final de legislatura a la vuelta de la esquina la licitación todavía no se ha formalizado, con lo que el calendario sobre la mudanza definitiva del Escalante todavía está por definir.