VALÈNCIA. (EP) El Consejo de Ministros ha aprobado este martes el Real Decreto por el que se establecen la ordenación y las enseñanzas mínimas de la Educación Primaria, Real Decreto que fija el currículo de esta etapa según lo establecido en la LOMLOE y que se implantará para los cursos impares el próximo curso 2022-2023 y para los pares en el curso 2023-2024.
Según el Real Decreto, el currículo será más competencial, incluirá la asignatura de Educación en Valores Cívicos y Éticos, se aumentarán las horas en asignaturas de ciencias en detrimento de la Religión y establecerá la perspectiva de género en cada una de las materias.
El nuevo currículo establece un total de ocho competencias clave que han de adquirir los alumnos al término de la enseñanza básica, que son: competencia en comunicación lingüística; competencia plurilingüe; competencia matemática y competencia en ciencia, tecnología e ingeniería; competencia digital; competencia personal, social y de aprender a aprender; competencia ciudadana; competencia emprendedora; y competencia en conciencia y expresión culturales.
El currículo también introduce una novedad: el Perfil de Salida del alumno, en el que se concretan los principios y los fines del sistema educativo español referidos a dicho periodo; y cada asignatura tiene sus propias competencias específicas y saberes básicos que han de adquirir los niños.
En relación con los objetivos de esta etapa educativa, se destacan conocer y apreciar los valores y las normas de convivencia; desarrollar hábitos de trabajo individual y de equipo, de esfuerzo y de responsabilidad en el estudio; y adquirir habilidades para la resolución pacífica de conflictos y la prevención de la violencia, entre otros.
Conocer, comprender y respetar las diferentes culturas y las diferencias entre las personas, la igualdad de derechos y oportunidades de hombres y mujeres y la no discriminación de personas por motivos de etnia, orientación o identidad sexual, religión o creencias, discapacidad u otras condiciones, son otros de los objetivos.
El documento también se refiere a la evaluación de los estudiantes, que será "continua y global y tendrá en cuenta su progreso en el conjunto de los procesos de aprendizaje". Además, fija que cuando el progreso de un alumno no sea el adecuado, se establecerán "medidas de refuerzo educativo", que deberán adoptarse "tan pronto como se detecten las dificultades" y estarán dirigidas a garantizar la adquisición de los aprendizajes imprescindibles para continuar el proceso educativo.
Al final de cada ciclo, el equipo docente adoptará las decisiones correspondientes sobre la promoción del alumnado de manera colegiada, tomando especialmente en consideración la información y el criterio del tutor. Solo se podrá repetir una vez durante la etapa y con carácter excepcional.
En las actas de evaluación de los alumnos, los resultados se expresarán en los términos Insuficiente (IN) para las calificaciones negativas; y Suficiente (SU), Bien (BI), Notable (NT) o Sobresaliente (SB) para las positivas.
El Real Decreto señala que los alumnos de Primaria tendrán seis asignaturas en todos los cursos: Conocimiento del Medio Natural, Social y Cultural, que se podrá desdoblar en Ciencias de la Naturaleza y Ciencias Sociales; Educación Artística, que se podrá desdoblar en Educación Plástica y Visual, por una parte, y Música y Danza, por otra; Educación Física; Lengua Castellana y Literatura; Lengua Extranjera; y Matemáticas.
A las áreas antes mencionadas, se añadirá o bien en 5º o bien en 6º la asignatura de Educación en Valores Cívicos y Éticos y en aquellas comunidades con lengua cooficial, otra asignatura sobre dicha lengua y su literatura.
Todas ellas se impartirán teniendo en cuenta la perspectiva de género y fomentando la igualdad.
La nueva asignatura de Matemáticas en la Educación Primaria es una de las materias que más revuelo ha suscitado, al incorporar la gestión emocional entre los saberes básicos. El Ministerio de Educación explica que los saberes básicos se estructuran en seis sentidos en torno al concepto de 'sentido matemático' e integran un conjunto de conocimientos, destrezas y actitudes diseñados de acuerdo con el desarrollo evolutivo del alumnado.
El documento apunta que el 'sentido socioemocional' integra "conocimientos, destrezas y actitudes esenciales para entender las emociones". "Manejar correctamente estas habilidades mejora el rendimiento del alumnado en matemáticas, combate actitudes negativas hacia ellas, contribuye a erradicar ideas preconcebidas relacionadas con el género o el mito del talento innato indispensable y promueve un aprendizaje activo. Para reforzar este fin, resultará esencial dar a conocer al alumnado las contribuciones de las mujeres a las matemáticas a lo largo de la historia", sostiene el Ejecutivo.
Respecto a la asignatura de Lengua Castellana y Literatura, la primera de las competencias específicas se orienta al reconocimiento de la diversidad lingüística y dialectal del entorno y de España, "para favorecer actitudes de aprecio hacia la diversidad étnica y cultural, combatir prejuicios y estereotipos lingüísticos e iniciarse en la reflexión entre distintas lenguas, incluidas las lenguas de signos".
Un segundo grupo de competencias se relacionan con la producción, comprensión e interacción oral y escrita, incorporando las formas de comunicación mediadas por la tecnología y atendiendo al ámbito personal, educativo y social; y la alfabetización informacional. Además, se prestará "especial atención al reconocimiento de las mujeres escritoras" y se abordan las prácticas comunicativas no discriminatorias, para "identificar y rechazar los abusos de poder a través de la palabra".
Otra de las áreas que ha suscitado cierta polémica es la de Educación en Valores Cívicos y Éticos, que algunos han asimilado a la antigua asignatura de Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos. En este caso, la propuesta del Gobierno fija entre los saberes básicos el pensamiento crítico y ético; la educación afectivo-sexual; el significado de 'bueno' y 'malo'; la influencia de los medios y las redes de comunicación, la prevención del abuso y el ciberacoso, y las conductas adictivas; los derechos humanos; o la empatía, el cuidado y el aprecio con respecto a los seres vivos y el medio natural, entre otros.
También se recogen modificaciones en cuanto a las horas de contenido de cada asignatura. Así, Religión --que con la LOMLOE no contará con "asignatura espejo" ni contará para la nota media de los alumnos-- tendrá 210 horas para toda Primaria (70 horas para cada ciclo), es decir, 90 horas menos si se compara con la LOE de 2006 del Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero. O lo equivalente a una hora a la semana.
Teniendo en cuenta la reducción de 90 horas que sufriría Religión, la asignatura que más horas aumenta es la de Educación Artística, que si tenía 300 horas en la LOE (si el currículo fijado fuese del 60%, como la LOMLOE), ahora tendrá 360. Mientras, la materia de Conocimiento del Medio sería impartida en 480 horas, en lugar de 465; Matemáticas tendrá 545 en toda Primaria, en vez de 535; y Lengua Castellana y Literatura será impartida durante 840 horas, 5 horas más.