Teresa Ribera, ministra de Transición Ecológica. Foto: EDUARDO PARRA (EP)VALÈNCIA. El Puerto de Valencia ya tiene en su poder el último informe que necesitaba antes de poder otorgar definitivamente a TIL (grupo MSC) la construcción y explotación de la futura terminal de contenedores. Se trata del preceptivo Informe de Compatibilidad con las Estrategias Marinas que emite la Dirección General de Costas para determinar si la obra es compatible con los objetivos ambientales de la estrategia marina correspondiente, en este caso la de la demarcación Levantino-Balear. Pues bien, el informe emitido por este departamento dependiente del Ministerio de Transición Ecológica (Miteco) sobre la ampliación norte es "favorable con condiciones".
Según recoge la Estrategia Marina definida en su momento por el Miteco para la demarcación en la que se ubica el Puerto de Valencia, uno de los grandes objetivos de esa demarcación con los que debe encajar el proyecto de la nueva terminal es el de "proteger y preservar el medio marino, incluyendo su biodiversidad, evitar su deterioro y recuperar los ecosistemas marinos en las zonas que se hayan visto afectados negativamente".
Consultadas por Valencia Plaza sobre las condiciones que el Miteco ha puesto al proyecto, la Autoridad Portuaria de Valencia (APV) rehúsa pronunciarse al respecto y se limita a informar de que sus técnicos están "analizando dicho informe".
A la vista de la obra prevista, el Ministerio de Transición Ecológica podía pronunciarse de forma favorable; favorable con condiciones, si la actuación es compatible con la estrategia marina pero debe ejecutarse con "ciertas condiciones"; o directamente desfavorable si las actuaciones vulneran los objetivos medioambientales de la estrategia marina correspondiente.
Según un portavoz de la APV, el informe concluye que "a la vista de la documentación e información disponible, se observa que los efectos de la actuación sobre los objetivos ambientales de la estrategia marina levantino-balear, en principio, no pondrán en riesgo la consecución del buen estado ambiental".
En el caso de los informes favorables con condiciones, estos deben especificar qué aspectos habría que modificar para hacer la obra compatible con la estrategia.
Hasta ahora, el Ministerio de Teresa Ribera ha eludido pronunciarse sobre la ampliación del Puerto de Valencia, en concreto sobre si la ampliación norte requiere renovar la DIA que obtuvo en 2007 o si, por el contrario, puede ejecutar la última fase de la obra sin una nueva evaluación ambiental, ni siquiera simplificada.
Para ello, lo que hizo el Miteco fue dictar en marzo del año pasado una resolución con la que delegó en el propio Puerto de Valencia la competencia para solicitar una nueva DIA para su propia ampliación. Esa resolución que convierte a la APV en el órgano sustantivo fue recurrida por la Comissió Ciutat-Port ante la Audiencia Nacional, que decidió admitirla a trámite.
