MADRID. Endesa cotiza a 15x veces sobre beneficios del 2016, ligeramente superior a su media histórica que se sitúa entorno a un PER 10x. Endesa como 'utility' cotiza en una industria defensiva con un alto grado de madurez en la cual no se descuentan fuertes beneficios potenciales para el futuro.
Uno de los principales aspectos en los que debemos fijarnos es en la mejora de los márgenes operativos, ya que dentro de su cuenta de resultados las ventas y el beneficio neto no van a sufrir fuertes oscilaciones al alza y siempre hay que tener presente el factor regulatorio, al que pueden verse afectadas las eléctricas. Su deuda Neta/Ebitda se sitúa en1,50x, es decir, según la media de sus competidores. Uno de los factores más atractivos es su rentabilidad por dividendo, que se encuentra por encima del 6%.
Como podemos ver el gráfico semanal, desde que el valor alcanzara en mínimos en 2012 la secuencia de máximos y mínimos es creciente, lo que nos indica un sesgo alcista a medio plazo. En próximas semanas veremos cómo se comporta en los máximos de 2007, máximo histórico del valor. Esto supondría dar un nuevo paso alcista en tendencia, y marcaríamos el 17,50 como el nivel clave a no perder para mantener posiciones estructurales en el valor.
Si hacemos un zoom en la cotización y bajamos a un sesgo diario, vemos cómo se ha producido una corrección al impulso alcista iniciado en los 18 euros. Esta corrección se ha parado en el 61,8-66% de retroceso, nivel de giro potencial que solemos utilizar para determinar si hay recuperación o una vuelta al origen del movimiento.
Por tanto, para aquellos inversores más activos el nivel a mantener a corto plazo está en los 18,85 euros. Perder este nivel sería una primera señal de debilidad que advertiría del riesgo de ver nuevas caídas hacia 18 euros. Como podemos apreciar, los osciladores están alcistas y no advierten de sobrecompra a corto plazo.
Gonzalo Recarte es Senior Sales Trader de Orey Financial