VALENCIA (EP). La vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, el conseller de Hacienda y Modelo Económico, Vicent Soler, y el director general del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), Manuel Illueca, han acordado que el banco público de la Generalitat pueda facilitar el anticipo de las subvenciones para el mantenimiento de centros de atención social a personas con diversidad funcional en 2017.
La vicepresidenta, el conseller de Hacienda y el director general del IVF han realizado este anuncio en rueda de prensa en la sede del Instituto Valenciano de Finanzas.
Durante la presentación de esta iniciativa, Oltra ha indicado que "se trata de una línea del Instituto Valenciano de Finanzas que va a financiar en el ámbito social, en una medida pionera, el mantenimiento de centros que gestionan entidades sin ánimo de lucro".
La vicepresidenta ha señalado que, desde hace un tiempo, está trabajando con el director del IVF para paliar la situación de estos centros a la que se ven abocados "dado que la infrafinanciación provoca continuos problemas de tesorería, lo que hace que se llegue tarde a pagar a estas entidades".
Por tanto, la coordinación entre ambos departamentos permitirá a las organizaciones que atienden estos servicios ajustar cómodamente los cobros y pagos derivados de su actividad corriente.
El conseller de Hacienda, Vicent Soler, ha hecho hincapié en el "carácter pionero" de esta iniciativa en un tema que afecta "a los más débiles y vulnerables y a entidades que no tienen afán de lucro, que no tienen el poso financiero para sobrellevar el aplazamiento de un dinero que, hoy en día, llega mediante el Fondo de Liquidez Autonómico u otras vías extraordinarias". "Somos pioneros dentro del sector financiero en la consecución de acuerdos con las diferentes conselleries para atender problemas del día a día de los ciudadanos y garantizar la prestación de servicios fundamentales".
Soler ha puesto también de relieve que esta iniciativa muestra "la relevancia de la banca pública de la Generalitat, una banca propia del siglo XXI, que entra en un sector en el que la banca privada no ha entrado en estos años". "Desde la banca pública, la Conselleria de Hacienda ha marcado la senda a la banca privada", ha recalcado.
Se estima que más de un centenar de organizaciones o entidades privadas sin ánimo de lucro, titulares de centros de atención social a personas con diversidad funcional -inscritas en el Registro de Titulares de Actividades, Centros y Servicios de Acción Social de la conselleria- puedan acceder a este servicio.
A este respecto, la vicepresidenta Oltra ha insistido en que "es la primera vez que se abre una línea social en la banca pública valenciana, lo que demuestra que la banca pública valenciana responde y responde a los colectivos más vulnerables y lo hace, además, desde un punto de vista económicamente muy ventajoso".
La vicepresidenta, que ha definido este acuerdo como "una decisión de Legislatura", ha remarcado la importancia de esta medida "porque le quitamos al sector de la diversidad funcional la angustia y eso no tiene precio".
El director del IVF, Manuel Illueca, ha reflexionado sobre que en determinados ámbitos se cuestionara el que haya una banca pública "que apoye a las personas y tenga una mirada social". Y ha añadido: "No hay mejor manera de hacer realidad estas cuestiones que poner circulante, financiación, a disposición de un sector que realmente padece estrecheces financieras, no insolvencias. No es un sector insolvente. Las quiebras de compañías son mínimas y año tras año prestan un servicio".
Illueca ha insistido, además, que "financiar a estas empresas entra dentro del servicio que tiene que prestar la banca pública. Vamos allá donde no va la banca privada y yendo donde no va aseguraremos que, antes o después, la banca privada vaya también cuando vea que, efectivamente, la iniciativa es posible".
Según ha explicado la responsable de las políticas sociales en el Consell, la fuente de ingresos primordial del sector es la subvención otorgada por la Generalitat.
Por ello, y para evitar que los retrasos en los pagos causados básicamente por la infrafinanciación y la arbitrariedad en los plazos de entrega del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), se pone a disposición de estas entidades una herramienta financiera que les permita afrontar con garantías y estabilidad la gestión de los centros.
Se trata de un préstamo a corto plazo que cubriría el cien por cien del importe de las subvenciones del ejercicio presupuestario a devolver en 18 meses, con un tipo de interés fijo entre el tres y el cuatro por ciento anual desde la formalización hasta la notificación de la aprobación de las subvenciones.
El interés bajará hasta el dos por ciento desde el momento en que se notifique la resolución de la subvención hasta la cancelación del préstamo.
Asimismo, la cancelación anticipada no comportará ninguna comisión adicional, mientras que la de apertura se queda en un 0,25 por ciento sobre el importe nominal del préstamo.
Para acceder a este servicio del IVF, las entidades tendrán que haber sido beneficiarias de subvenciones de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas en la convocatoria de 2016 e incluir en la solicitud una declaración jurada de que han vuelto a solicitar la ayuda en el ejercicio 2017, así como estar al corriente de sus obligaciones tributarias y con la Seguridad Social.
El desembolso se hará en tres entregas a cuenta en enero, mayo y septiembre. A la formalización del préstamo, el 33 por ciento del importe solicitado. Si supera en un diez por ciento las recibidas en 2016 el porcentaje de desembolso se aplicará sobre el 110 por ciento de la subvención aprobada ese año. Se exceptúa de este límite a las entidades que gestionen centros que no estuvieran en funcionamiento todo el ejercicio 2016.
Del mismo modo, a partir del 1 de mayo de 2017 se integrará el 33 por ciento de la subvención finalmente concedida, regularizándose en su caso las diferencias que hayan podido producirse con motivo del primer desembolso. La tercera entrega tendrá lugar a partir del 1 de septiembre de 2017 y será el 33 por ciento del importe de la subvención finalmente concedida.
De esta manera, el IVF retendrá el uno por ciento del total de la subvención a cuenta de los intereses de la operación. Cabe la posibilidad de que en la fecha de vencimiento el IVF abonara al prestatario el exceso de interés descontado o, en su defecto, le reclamara los importes pendientes a abonar en concepto de intereses.
Tras la solicitud, la Subdirección de Riesgos del IVF la estudiará y emitirá un informe que se someterá a sus órganos de decisión. El resultado de la deliberación será notificada a la entidad solicitante y a la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas.