El magistrado no encontró indicio de delito de odio en las palabras del prelado durante una homilía en Valencia, lo que hace prever el archivo de la segunda denuncia
VALENCIA. La primera denuncia que se presentó contra el cardenal Antonio Cañizares por sus palabras contra las mujeres y los homosexuales ya está archivada. El magistrado instructor no encontró ningún indicio de delito en lo que el prelado dijo durante una homilía. Además Cañizares pidió perdón después por su alguien se había sentido ofendido.
La segunda denuncia, la interpuesta por el colectivo Lambda, ha llegado a las manos del mismo magistrado, en este caso un juez que está reforzando uno de los juzgados de instrucción de Valencia. Fuentes jurídicas consultadas por Valencia Plaza opinan que la denuncia de Lambda correrá, con toda seguridad, la misma suerte que la otra ya que el magistrado es previsible que siga el mismo criterio que siguió con la primera de las denuncias.
A las opciones de que se archive o se instruye hay que sumar una tercera vía. Podría darse el caso de que la primera denuncia esté archivada y que dicho archivo sea firme, ya sea porque el fiscal de dicho juzgado ha dado el visto al archivo o bien porque nadie haya recurrido la decisión del magistrado.
En ese caso, el juez instructor podría devolver la denuncia de Lambda a la Fiscalía para que sean ellos los encargados de investigar si hay o no delito en las palabras de Cañizares.
La Fiscalía Provincial de Valencia abrió diligencias de investigación penal contra el cardenal y arzobispo de Valencia como presunto autor de un delito de odio contra los homosexuales y las mujeres, que contempla condenas de hasta a tres años de prisión.
La investigación se inició por la denuncia presentada por el colectivo Lambda de lesbianas, gays, transexuales y bisexuales que denunció al arzobispo por sus "condenables declaraciones homófobas y machistas contra las personas homosexuales y el movimiento feminista".
Cañizares arremetió durante una homilía contra la "importante escalada contra la familia por parte de dirigentes políticos, ayudados por otros poderes como el 'imperio gay' y ciertas ideologías feministas", subrayando que las "leyes que comentan la ideología de género" (en clara referencia a las legislaciones que abogan por la igualdad efectiva entre hombre y mujer) son "las más insidiosas que ha habido en toda la historia de la Humanidad". Estas palabras, unidas a otras muchas frases poco o nada acertadas del prelado colmaron la paciencia de Lambda, quienes hartos de los desprecios nada velados del cardenal decidieron presentar una denuncia.
Estas palabras llevaron al prelado a recibir una reprimenda del Papa Francisco, quien, según fuentes vaticanas, le recordó que "España está viviendo un momento electoral y político muy complicado en el que la Iglesia debe ser instrumento constructivo, y no elemento desestabilizador".
El cardenal pide una oración contra la violencia que "obliga a tantos a emigrar de sus pueblos con pateras que se traga el Mediterráneo" y contra "la violencia doméstica", al tiempo que califica al gobierno de Maduro de "tiránica dictadura"