MADRID. El desayuno de Nueva Economía Fórum celebrado en Madrid este martes protagonizado por el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, tuvo también momentos destacados para los actores secundarios. La intervención de José Luis Rodríguez Zapatero, la no intervención de Mónica Oltra o la nutrida representación de dirigentes del Gobierno valenciano, fueron algunos de los hechos llamativos al margen del contenido de la propia conferencia.
La iniciativa de elegir a un ex presidente del Gobierno para que sea el presentador de una charla siempre es un arma de doble filo, más aún en el actual contexto político nacional, con las negociaciones por La Moncloa al rojo vivo y la posibilidad de unas nuevas elecciones en el horizonte. Con esta antesala, es obvio que un acto en celebrado en Madrid siempre conllevará preguntas dirigidas al presentador en vez de al presentado. Y ocurrió.
Rodríguez Zapatero, no obstante, tejió una elegante presentación del jefe del Consell, Ximo Puig, al que consideró una “voz imprescindible” en la política actual que busca la “esencia y no la escena”. En esta línea, salió al paso del concepto 'pacto a la valenciana' -ese término que causa cierto malestar en el PSPV- que viene utilizándose por Podemos, Compromís y por no pocos medios nacionales. “Para ser más justo no habría que hablar de la vía valenciana, habría que hablar de la vía Ximo Puig”, recalcó. Una manera de otorgar el mérito del Acuerdo del Botánico al presidente de la Generalitat a sabiendas de las mayores dificultades de visibilidad que posee el jefe del Consell frente a sus socios de Compromís.
Sin embargo, como era lógico, el ex presidente del Gobierno también tuvo su minuto -o minutos- de gloria en el desayuno al ser inquirido por diversas cuestiones de actualidad tras el turno de Puig. Fue aquí donde Zapatero realizó unas reflexiones que, en algún caso, chirriaron en cierta medida con lo que el protagonista de la conferencia había expuesto.
Así, el otrora líder del PSOE, además de mencionar las peculiaridades de la Comunitat Valenciana -menos dispersión poblacional y menos envejecimiento que otras- para explicar su infrafinanciación, puso algunos ejemplos de su etapa en La Moncloa estrechamente relacionados con el discurso de Puig. De esta manera, valoró que el jefe del Consell siga “exigiendo infraestructuras porque son un actor decisivo en las cifras de turismo” y reconoció la importancia de un proyecto como el Corredor Mediterráneo, si bien recordó que en algunos lugares “la opción de invertir es una apuesta por sobrevivir y en otros es por competir más y mejor”.
“Yo convoqué durante mi mandato una ronda de todos los presidentes autonómicos. Todos llegaron a mi despacho con sus carpetas y el 80% de sus demandas eran infraestructuras. Cuando terminé la ronda le pedí a mi gabinete que estimara a cuánto ascendían las demandas solicitadas: el balance final equivalía a tres PIB de España. No hice ninguna ronda más”, relató Zapatero. Una anécdota que a más de un alto cargo valenciano le pareció poco oportuna teniendo en cuenta que por la tarde tenía lugar la reforma del Estatuto valenciano en el Congreso para solicitar la equiparación de las inversiones al peso poblacional.
No fue la única situación dispar. A continuación Zapatero relató cómo abordó su primera y única conferencia de presidentes -justo lo que Ximo Puig acababa de solicitar en su intervención como exigencia estrella-. “Tampoco hice ninguna más porque no fue una conferencia de presidentes, fue una cámara política más donde los presidentes del PP venían hacer la crítica y la oposición al Gobierno de España”, explicó el exinquilino de La Moncloa.
Otro de los momentos curiosos de la conferencia se vivió también en el turno de preguntas. El moderador comentó la cantidad de cuestiones de los invitados en las que se hacía referencia a la vicepresidenta del Consell y coportavoz de Compromís, Mónica Oltra, que se encontraba entre el público. Tanto fue así, que el presentador del acto ofreció la posibilidad de responder a alguna de ellas: ¿Quiere usted intervenir?”, le propuso, algo que declinó la número dos del Consell. Un hecho que volvió a evidenciar el tirón que tiene la vicepresidenta del Gobierno valenciano también en la capital.
En cuanto a la asistencia, el recinto se quedó pequeño para la conferencia pronunciada por Puig, que estuvo respaldado por ocho de sus nueve consellers. Algunos de ellos como el titular de Economía, Rafael Climent, habían preparado una intensa agenda en Madrid, al igual que el conseller de Transparencia, Manuel Alcaraz, quien visitó la Casa de Valencia en Madrid. Por otro lado, mientras la vicepresidenta, Mónica Oltra, acudió a La Sexta, concretamente al plató de Al Rojo Vivo, otros aprovecharon para mantener contactos más discretos con periodistas de la capital y, algunos, como la responsable de Sanidad, Carmen Montón, se dejaron ver por el Congreso de los Diputados.
Así, solo la titular de Justicia, Gabriela Bravo, no asistió al acto, al que tampoco acudió el líder del PSOE, Pedro Sánchez. Sí se dejaron ver compañeros de partido como el alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri, diputados nacionales como José Luis Ábalos, Herick Campos o Julián López, o parlamentarios autonómicos como el síndic en les Corts, Manolo Mata, Alfred Boix, José Muñoz o Ana Barceló. Además, miembros de la patronal como José Vicente González, presidente de Cierval, o José Vicente Morata, presidente de la Cámara de Valencia.