VALÈNCIA. La portavoz del PP en el Ayuntamiento de València, María José Català, ha anunciado que el grupo municipal ha presentado para el próximo pleno del Ayuntamiento una moción en la que se pide que el Ayuntamiento de Valencia no cobre impuestos a los negocios que se han visto obligados a cerrar por las nuevas restricciones decretadas por la Generalitat con motivo de la expansión del Covid-19. “Hay que reaccionar rápido porque muchas familias se van a ver arruinadas. La hostelería en un sector fundamental en la ciudad y su cierre va a suponer una terrible pérdida de puestos de empleo”, ha señalado.
Por ello, según Català, “la obligación de Ribó es no cobrarles los impuestos mientras dure la situación del cierre. No es justo que les obliguemos a cerrar y tengan que pagar impuestos. El equipo municipal debe reaccionar ante esta situación devastadora para muchos negocios de la ciudad”. Asimismo, el PP exige que la liquidación del 2018 vaya destinada a la reactivación económica. “Valencia ha recibido 12 millones más por la liquidación de 2018. Debe ir a ayudas en vena a los sectores afectados por las nuevas restricciones como la hostelería y el comercio”, ha afirmado Catalá.
Además, para incentivar el mantenimiento del empleo se propone bonificar el 50% del IBI comercial y del IAE para aquellas empresas dedicadas a las actividades económicas más castigadas por la crisis, que garanticen el mantenimiento de empleo, durante el ejercicio 2021. El año pasado se cerró con un 25% más de paro y las nuevas restricciones van a suponer más destrucción de puestos de trabajo. “Por ello, debemos dar incentivos a la empresas que mantengan esos puestos de trabajo”.