Foto: JOSÉ CUÉLLAR/CORTSVALÈNCIA. El Partido Popular quiere hacer un frente común con Compromís en la reivindicación de una financiación justa para la Comunitat Valenciana. Lo ha manifestado de distintas maneras en diferentes ocasiones y este martes dio un paso más en esta dirección: los populares retiraron su enmienda a la totalidad a la Ley del Trato Justo planteada por la coalición valencianista que lidera Joan Baldoví. Un gesto que es más significativo de lo que parece.
La norma impulsada por los valencianistas constaba de tres puntos principales: la reforma del sistema de financiación autonómica; la aprobación urgente, mientras tanto, de un fondo de nivelación –un mecanismo transitorio con el que se reparte dinero entre las comunidades peor financiadas para que puedan acercarse a la media del conjunto de territorios–, y la condonación de la parte de la deuda valenciana causada por la falta de financiación.
Finalizado el trámite de enmiendas ocurrieron dos cosas: el PSPV no registró ninguna enmienda para tratar de mejorar el texto, mientras el PPCV aprovechó para registrar una enmienda a la totalidad que proponía, mediante ley orgánica, crear el Fondo de Nivelación que resuelva de forma transitoria la infrafinanciación hasta que se produjera la reforma del sistema que lleva caducado desde 2014.
El texto de la proposición de ley orgánica, que debería someterse a la aprobación del Congreso en caso de salir adelante en Les Corts, proponía que a "lo largo de la vigencia del presente sistema [el aprobado en 2009], en la liquidación del modelo de financiación se incluirá una transferencia final de nivelación con el objetivo de que todas las Comunidades Autónomas alcancen como mínimo una financiación per cápita ajustada, incluyendo el importe de los fondos de convergencia y la transferencia final de nivelación y a competencias homogéneas, del 99% de la financiación media per cápita ajustada y a competencias homogénea del conjunto de comunidades de régimen común, incluyendo el importe de los fondos de convergencia y la transferencia final de nivelación".
En lenguaje más llano, significaría que el sistema incorporaría un fondo adicional destinado a las CCAA peor financiadas para que ninguna estuviera más de un punto -99%- por debajo de la media. Las principales beneficiarias serían la Comunitat Valenciana y Región de Murcia, que año tras año están entre siete y ocho puntos por debajo de la media. Una media que, cabe señalar, subiría al inyectarse más dinero en el sistema.
Ahora bien, que esta enmienda a la totalidad se aprobara hubiera supuesto suprimir de un plumazo la iniciativa de Compromís, por lo que los valencianistas ya advirtieron hace un mes que votarían en contra de ella. Y desde entonces, el grupo liderado por Baldoví ha tratado de hacer hincapié en las diferencias que separan a su formación del PP cuando se trata de reivindicar las principales cuestiones de la agenda valenciana. Una distancia que para los populares no es tal, y para justificarlo recuerdan todo lo ocurrido en las últimas semanas.
Para muestra, la propuesta de resolución de Compromís que validó el PP en el Debate de Política General que reclamaba estas tres cuestiones o compartir las exigencias en la Plataforma Pel Finançament Just frente al PSPV, que rompió el consenso que existía hasta ese momento. Obvian, eso sí, el disenso que tuvieron en el Senado la semana pasada cuando el PP vetó una enmienda de la coalición valencianista para incluir el fondo de nivelación en la reforma de la financiación.
Con todo, en el Partido Popular buscan tender la mano a Compromís con la retirada de esta enmienda a la totalidad y negociar la letra pequeña en el debate parlamentario a través de enmiendas parciales. Un trámite más amable de cara a negociar el contenido de la normativa valenciana que impulsa la coalición. La maniobra, eso sí, también está cargada de una evidente estrategia política: que el PSPV se retrate y poner de manifiesto de nuevo que los socialistas no están dispuestos a molestar en exceso al Gobierno central en lo que respecta a esta cuestión para dejar que sea el Ejecutivo de Pedro Sánchez quien lleve la voz cantante.
El debate sobre la financiación autonómica se ha reactivado -si bien nunca se ha aparcado- desde que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, abriera la puerta a un régimen "singular" para Cataluña que desde la derecha tildan como "cupo catalán". Por lo que para el PSPV, ahora, la cuestión es negociar una reforma de la financiación pero no quieren ni oír hablar del fondo de nivelación que anhela ahora el PP.
